Arte en el est¨®mago

No existe arte ef¨ªmero m¨¢s ef¨ªmero que el arte comestible. En apenas media hora, la pulcra combinaci¨®n de sabores salados y dulces, que cual pigmento de color reproduc¨ªan pict¨®ricamente el edificio de Tecla Sala, pas¨®, gracias al dinamismo de los comensales, a convertirse en una amalgama abstracta en la que s¨®lo se identificaba el merengue. Este dulce fue el ¨²ltimo basti¨®n en caer de una composici¨®n creada por la artista Alicia R¨ªos, especialista en la combinaci¨®n creativa de elementos culinarios. Profesora de psicolog¨ªa y antropolog¨ªa en la Universidad Complutense de Madrid, R¨ªos es autora de El libro del aceite y la aceituna y El arte de la cocina espa?ola. Su conocimiento de la gastronom¨ªa y su pasi¨®n por encontrar en ella su expresi¨®n sensorial la llevaron a trabajar en el mundo del arte comestible.

El mosaico comestible se present¨® el pasado jueves en el Centro Cultural Tecla Sala, junto a la intervenci¨®n art¨ªstica M¨®n-Xampiny¨® d'Enric Massot, que presentaba un curioso enlace entre la micolog¨ªa y el arte en el c¨¦sped de los nuevos jardines del recinto. El motivo del ¨¢gape art¨ªstico fue conmemorar, en plena Fiesta de la Primavera, los 75 a?os de la obtenci¨®n del t¨ªtulo de ciudad de L'Hospitalet de Llobregat. Por eso, esta composici¨®n creada con alimentos reproduc¨ªa el elemento simb¨®lico de la antigua f¨¢brica de Tecla Sala, convertida ahora en un espacio cultural. "He querido realizar un acto de iconofagia, comerse un icono que representa a la ciudad", explic¨® R¨ªos.

Este pictograma culinario conten¨ªa todos los elementos de la energ¨ªa primaria de la ciudad. El cielo, con las formas del merengue; la tierra, con el pan; la ganader¨ªa, con la leche y la industria, expresada con todo el conjunto. "Hemos tenido en cuenta tambi¨¦n las texturas", explic¨® R¨ªos. Sobre la mesa pod¨ªan contemplarse hileras de chips de yuca, banana y boniato, que junto a los carquinyolis representaban el equipo crujiente frente a la fr¨¢gil resistencia del pan de leche con leche merengada y de los dulces de lim¨®n, chocolate, frutas de la pasi¨®n y vainilla. "Y tambi¨¦n se ha tenido en cuenta la sorpresa y el sentido del humor", a?adi¨®.

Curioso efecto en el paladar produc¨ªa encontrarse huevos de trucha navegando en un denso mar de crema de berros. No se quedaba atr¨¢s la sensaci¨®n producida en la boca por las almendras sumergidas en la pasta de berenjenas. Todo ello regado por la fuerza de la naturaleza del mosto y la sangr¨ªa.

La carne s¨®lo estaba representada con alitas de pollo en escabeche. Una representaci¨®n que planteaba la parte cr¨ªtica del discurso del mosaico. "La carne completa la representaci¨®n simb¨®lica representando al sistema, la burocracia y el capitalismo", explic¨® Felip Planas, del restaurante Ot de Barcelona. Este joven cocinero fue el encargado de ejecutar culinariamente el proyecto de Alicia R¨ªos junto a Paco, del restaurante Santa Mar¨ªa, tambi¨¦n de Barcelona, y Paula, de Les Petxines, de Lloret de Mar.

Dicen que la seducci¨®n empieza por el est¨®mago. Quiz¨¢ ahora tambi¨¦n lo har¨¢ la pasi¨®n por el arte.