El pintor Manolo Vald¨¦s muestra en un curso c¨®mo reinterpretar las aportaciones de otros artistas

El pintor Manolo Vald¨¦s (Valencia, 1942), ex miembro del desaparecido Equipo Cr¨®nica y residente en Nueva York desde hace 11 a?os, imparte desde ayer un curso en Bilbao en el que el ¨²nico programa es transmitir a los alumnos el inter¨¦s por la obra de otros artistas. "La ¨²nica manera de aprender en pintura es conocer lo que hacen los dem¨¢s", reconoci¨®. "Para hacer una obra de arte es importante tener suficientes conocimientos almacenados en la cabeza y ver si a ese gran alfabeto se le puede a?adir una letra". El curso, organizado por el centro Bilbaoarte, cuenta con la asistencia de 14 artistas, que participan en los talleres de pintura, escultura y grabado, disciplinas que Vald¨¦s ha abordado a lo largo de toda su carrera. Las actividades pr¨¢cticas se complementan con una peque?a exposici¨®n, en la que Vald¨¦s ha reunido cuatro pinturas, tres grabados de gran formato, pertenecientes a una serie de figuras femeninas, y tres esculturas de madera, aut¨¦nticas se?as de identidad de su trabajo. "Son obras hechas con mis propias manos, no esculturas de taller, que tienen menos inter¨¦s para acompa?ar al curso porque no son obras de relaci¨®n tan directa".

Vald¨¦s parte del convencimiento de que es dif¨ªcil ense?ar algo en su profesi¨®n, m¨¢s all¨¢ de las bases de un oficio que cree superadas por la evoluci¨®n del arte. "No tiene manual; ni siquiera uno mismo puede aprovechar sus experiencias", dijo. As¨ª que ha resuelto su papel de maestro mostrando ante sus alumnos c¨®mo resuelve obras diferentes. A ellos les ha pedido lo mismo: mostrar su trabajo y comentarlo. "Vengo a contar qu¨¦ es lo que hago. El inter¨¦s de estos cursos est¨¢ en que los alumnos conozcan posiciones diferentes frente a la obra de arte y saquen sus propias conclusiones. Uno con el tiempo aprende que ninguna tendencia est¨¢ por encima, ni puede excluir a las otras".

Vald¨¦s realizar¨¢ en el curso una de sus reinterpretaciones de obras de grandes maestros. Un peque?o dibujo de Matisse ser¨¢ el punto de partida de un cuadro de dos metros y medio. "Los artistas pop me ense?aron que hacer una nariz de medio metro es posible", explic¨®. "Y ser¨¢ un cuadro con texturas, como me ense?aron los pintores abstractos mat¨¦ricos".