Represi¨®n
Qu¨¦ largu¨ªsima mano represora posee el temible Putin. Qu¨¦ capacidad de manipulaci¨®n y maniobra. Les voy a contar una triste historia: desde hace varios a?os, el Partido Radical Transnacional forma parte de las Naciones Unidas como ONG con estatuto consultivo. Hace unas semanas, el PRT invit¨® a hablar ante la Comisi¨®n de Derechos Humanos a un parlamentario checheno, Akhiad Idigov. Pocos d¨ªas despu¨¦s, la Federaci¨®n Rusa exigi¨® la expulsi¨®n del Partido Radical de la ONU. Acusan a los radicales de acoger y apoyar a terroristas, y con ello se refieren al pobre Idigov. Pero adem¨¢s refuerzan su demanda con otro cargo, argumentando que los radicales (que defienden la legalizaci¨®n de las drogas justamente para acabar con las mafias) se financian con el narcotr¨¢fico, el comercio ilegal de armas y el blanqueo de dinero.Que esta segunda acusaci¨®n es un completo disparate es algo tan obvio que no merece la pena ni detenerse en ello: es la t¨ªpica campa?a de difamaci¨®n heredada de los usos estalinistas, y tan s¨®lo resulta interesante porque evidencia los tenebrosos m¨¦todos que se gastan los rusos. En cuanto a Akhiad Idigov, es la ant¨ªtesis del perfil del terrorista. Es un conocid¨ªsimo pol¨ªtico checheno; presidi¨® el Parlamento hasta las elecciones de 1997, y a partir de entonces dirigi¨® el Comit¨¦ de Asuntos Exteriores. Adem¨¢s fue unos de los miembros m¨¢s relevantes de la delegaci¨®n que negoci¨® la paz de 1997 entre Chechenia y Rusia.
Y justamente de paz habl¨® Idigov ante la ONU. Pidi¨® que se respetaran los acuerdos de 1997; y record¨® que el presidente checheno Maskhadov hab¨ªa sido elegido leg¨ªtimamente bajo supervisi¨®n internacional. Habl¨® tambi¨¦n de las violaciones sistem¨¢ticas de derechos humanos en Chechenia, algo que todo el mundo sabe; y de la necesidad de terminar el conflicto por medio de negociaci¨®n. Simples y transparentes palabras que han provocado la respuesta represora de los rusos. Resulta sarc¨¢stico que Putin, el gran bombardeador, sea recibido con honores por todas partes, mientras que los radicales, por hablar de paz y de violaciones de derechos (?y d¨®nde mejor que ante la Comisi¨®n de Derechos Humanos?), vayan a ser expulsados como apestados de la ONU.
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