La protesta contra la globalizaci¨®n ahonda la crisis del FMI y el Banco Mundial

Presi¨®n insostenible

ENVIADO ESPECIAL La presi¨®n de miles de manifestantes en la calle y las cr¨ªticas devastadoras encajadas esta semana han sumido en una crisis al Fondo Monetario Internacional (FMI) y al Banco Mundial, que ayer decidieron adelantar un d¨ªa la ceremonia de clausura de la 55? asamblea anual que celebran en Praga, hacer las maletas y reflexionar en Washington, sede de su cuartel general, sobre el futuro de ambas organizaciones. Al trascender la medida, la desolaci¨®n cundi¨® en la sala de plenarios, semivac¨ªa, pues fueron pocos los delegados que, tras los disturbios del martes, quisieron correr el riesgo de ser apedreados a la salida de sus hoteles o encerrados de nuevo en la sede de la asamblea, como ocurri¨® el pasado martes.

"Comparto con mis colegas", dijo en un sombr¨ªo discurso de clausura James Wolfensohn, presidente del Banco Mundial, "la consternaci¨®n por los problemas que han surgido en las calles". Wolfensohn se refer¨ªa a los enfrentamientos que un d¨ªa antes oscurecieron la inauguraci¨®n oficial de la reuni¨®n, y en los que unos 10.000 manifestantes venidos de toda Europa, tras desbordar a otros tantos polic¨ªas, encerraron a las autoridades en el edificio que albergaba la conferencia durante cuatro horas y forzaron a la fuerza p¨²blica a evacuar en metro a ministros y representantes de los bancos centrales de 182 pa¨ªses. M¨¢s de 50 polic¨ªas heridos -al menos 12, hospitalizados- y unos 18 entre los radicales, dos delegados afectados de un cantazo en la sien y un periodista brit¨¢nico contusionado, am¨¦n de cuantiosos da?os a la propiedad, fue el saldo de las peores manifestaciones en Praga desde la ca¨ªda del comunismo en 1989.

Menos dispuesto que Wolfensohn a admitir la derrota, el director del FMI, Horst K?hler, dijo que las prisas por clausurar la conferencia no ten¨ªan nada que ver con las protestas, y que la eficiente organizaci¨®n hab¨ªa permitido ganar tiempo. "El presidente de la conferencia propuso al plenario acabar hoy, y nos pareci¨® bien".

Pero todo fue un poco m¨¢s complicado de lo que sugiri¨® K?hler. En estado de conmoci¨®n por lo sucedido el martes, las autoridades de ambos organismos decidieron que la presi¨®n resultaba insostenible, en una reuni¨®n de urgencia celebrada ayer por la ma?ana temprano, seg¨²n las fuentes consultadas. Ante el temor de que se repitiese el acoso del d¨ªa anterior, el FMI y el Banco Mundial decidieron recortar de tres a dos d¨ªas la duraci¨®n de la asamblea, vista la ausencia de muchos de los 15.000 delegados que este a?o han acudido a Praga, y acabar as¨ª con el calvario en que se estaba convirtiendo la reuni¨®n.Las filas contrarias clamaron ¨¦xito de forma inmediata, y Alice Dvorska, una de las portavoces de la Iniciativa Contra la Globalizaci¨®n Econ¨®mica (INPEG, por sus siglas en checo), el grupo que ha coordinado a los descontentos con la globalizaci¨®n, se mostr¨® encantada del abrupto final de la reuni¨®n y del da?o inflingido a la ¨¦lite del capitalismo. "No s¨¦ si esto es consecuencia directa de nuestro triunfo de ayer ", dijo Dvorska. "Pero seguramente hemos contribuido". El movimiento mundial contra la globalizaci¨®n se apunta as¨ª, tras las cumbres de Seattle y Washington, otro triunfo.

Un triunfo serio, adem¨¢s, porque las algaradas no s¨®lo han logrado interrumpir la asamblea. Funcionarios del banco y delegados admitieron en privado que los costes y la tensi¨®n de este tipo de reuniones internacionales comenzaba a ser demasiado elevado. La capacidad de presi¨®n y organizaci¨®n de los manifestantes anticapitalistas supone adem¨¢s, una tensi¨®n a?adida que impide desarrollar con normalidad una asamblea, sometida a fuego graneado de adoquines, huevos e insultos. "Quiz¨¢ deber¨ªamos reunirnos cada dos a?os", reflexion¨® un alto funcionario que pidi¨® anonimato.

Pero naturalmente, nadie plante¨® disolver ambos organismos multilaterales, como ped¨ªan los radicales. "Si el FMI y el Banco Mundial deben o no existir es un asunto que tienen que resolver los 182 pa¨ªses representados aqu¨ª", dijo Yashwant Sinha, ministro de Finanzas de India. "Y no un pu?ado de gamberros en las calles".

Hasta las ONG acreditadas como interlocutores del FMI y del Banco Mundial han vertido cr¨ªticas de tal ferocidad, que han afectado al ¨¢nimo de los funcionarios. Ayer, en un acto con Jubileo 2000 -una de las ONG m¨¢s serias en favor de la condonaci¨®n de la deuda de los pa¨ªses m¨¢s pobres-, K?hler y Wolfensohn recibieron por sorpresa sendas cruces en representaci¨®n de los 19.000 ni?os que cada a?o mueren y podr¨ªan ser salvados con el endeudamiento que Occidente se niega a perdonar.