El Banco de Espa?a quiere reforzar los recursos propios de las cajas de ahorro

El Banco de Espa?a est¨¢ analizando la posibilidad de elaborar una circular que clarifique y potencie el uso de las cuotas participativas de las cajas, seg¨²n fuentes financieras. El organismo considera que las cuotas participativas, una especie de acciones sin derechos pol¨ªticos, son la f¨®rmula ideal para reforzar los recursos propios de las cajas. Algo que puede ser necesario si se tuerce el buen momento econ¨®mico y aparecen los primeros s¨ªntomas de morosidad. Ninguna caja ha emitido cuotas en los ¨²ltimos 10 a?os.

El reci¨¦n aterrizado equipo del Banco de Espa?a tiene en su carpeta de asuntos a abordar con cierta urgencia el tratamiento t¨¦cnico de las cuotas participativas. ?se es el mensaje que los responsables del organismo han hecho llegar a varias cajas de ahorros en las ¨²ltimas semanas.Oficialmente, se insiste en que los altos cargos designados por el nuevo gobernador, Jaime Caruana, a¨²n no han tenido pr¨¢cticamente tiempo de coger el pulso a los asuntos de este calado y que, por lo tanto, no hay decisiones firmes al respecto.

En cualquier caso, la tesis que se maneja en el Banco de Espa?a es que las cuotas participativas pueden apuntalar las entidades y dotarlas de m¨²sculo (computan como recursos propios de primera categor¨ªa) para afrontar las dificultades que puedan surgir como consecuencia de un hipot¨¦tico cambio de ciclo o, cuando menos, de un empeoramiento del actual momento dulce que atraviesan la econom¨ªa y la banca espa?olas. Una bonanza que se refleja en datos como que la morosidad est¨¢ en niveles hist¨®ricamente bajos, rondando el 1% del conjunto de cr¨¦ditos.

Llamamiento a la prudencia

Este razonamiento abunda en la l¨ªnea de prudencia que tradicionalmente ha defendido el Banco de Espa?a y que recientemente ha tenido un nuevo hito con la aprobaci¨®n de un fondo antic¨ªclico, una especie de hucha que bancos y cajas de ahorros han de constituir para cuando lleguen las vacas flacas. La futura norma sobre cuotas participativas del Banco de Espa?a clarificar¨ªa, adem¨¢s, situaciones como la creada a ra¨ªz del anuncio de Caixa Galicia de que iba a emitir cuotas participativas, algo que no fue bien visto por la Xunta. El Ejecutivo que dirige Manuel Fraga tambi¨¦n tiene entre sus planes elaborar un reglamento sobre esta materia.Las cuotas participativas, que son en definitiva una especie de acciones sin derechos pol¨ªticos, est¨¢n reguladas por un real decreto de mayo de 1990, que desarrollaba la Ley sobre Disciplina Bancaria de 1988.

Sin embargo, en este amplio periodo de tiempo ninguna caja se ha decidido a poner en el mercado este producto. Al margen del ¨²ltimo intento de Caixa Galicia, La Caixa, Unicaja, Ibercaja y Caja Espa?a han barajado en serio la posibilidad de emitirlas. Parad¨®jicamente, el modelo s¨ª ha tenido ¨¦xito en Noruega. Las cajas del pa¨ªs n¨®rdico emiten cuotas, que son incluso negociadas en la Bolsa.

Gran parte del fracaso en Espa?a tiene su origen en la sospecha de que con las cuotas participativas se abre una puerta a la conversi¨®n de las cajas de ahorros en sociedades an¨®nimas, aun a pesar de que su emisi¨®n no va acompa?ada de derechos pol¨ªticos.Esta posibilidad de dar un giro de 180 grados y propiciar la entrada de capital privado en las cajas, parece absolutamente descartada por el Banco Espa?a y los politicos.