Sade rompe ocho a?os de silencio con 'Lovers rock'

Decidi¨® tomarse un periodo de descanso tras una gira por Estados Unidos y luego se qued¨® embarazada. "Me pareci¨® que mi hija era m¨¢s importante que mi carrera", cont¨® Sade la semana pasada al referirse a los ocho a?os que ha permanecido en silencio, despu¨¦s de haber vendido 40 millones de discos. El regreso a la m¨²sica de la cantante nigeriana coincide con Lovers rock, su nuevo disco.

A Helen Folsade Adu (Ibadan, Nigeria, 1959) no le gustan las entrevistas y menos a¨²n las fotos. Su paso por Madrid para promocionar el nuevo ¨¢lbum lo solucion¨® con un par de entrevistas, una para la radio y otra para seis medios que no pas¨® de los 30 minutos. Ven¨ªa de Alemania, ese mismo d¨ªa se iba para Londres, donde reside actualmente, y en sus planes de viaje entraba Jap¨®n.Tan guapa como siempre, vestida con unos vaqueros, un abrigo de ante negro, una camisa india y unos zapatos con cordones, la cantante contesta en ingl¨¦s, pero escucha las preguntas en espa?ol, un idioma que conoce bien dado que vivi¨® en Espa?a varios a?os. "En todo este tiempo no he dejado de cantar, pero en mi casa", cont¨® cuando le preguntaron si ocho a?os no era demasiado tiempo para que una cantante est¨¦ callada.

Sade repite con su banda habitual, Pride, Stuart Matthewman, Andrew Hale y Paul Spencer. Cada uno vive en un lugar del mundo pero durante todos estos a?os no ha hecho falta reunirse de vez en cuando para mantener la armon¨ªa. "Hemos viajado mucho juntos y hay una comprensi¨®n personal y musical muy fuerte", asegur¨® Sade que reconoci¨® que Lovers rock era "su disco m¨¢s imperfecto" porque ha sido un trabajo para el que, en cierta medida, "hemos empezado de nuevo".

Hace 16 a?os cuando debut¨® con Diamond life, que conten¨ªa sencillos como Smooth Operator y Your love is king, las compa?¨ªas discogr¨¢ficas no "sab¨ªan d¨®nde colocarnos, luego el disco se convirti¨® en un bombazo y aquello supuso un gran choque en mi vida. No deseaba la fama y estuve a punto de dejar la m¨²sica". Mientras ella se debat¨ªa en un mar de dudas la cr¨ªtica la calificaba "como una artista lineal" y defin¨ªa sus canciones como "m¨²sica de fondo para ambientes de dise?o". "Ha habido una imagen equivocada de lo que soy. Mi m¨²sica tiene una gran calidez y llega directamente del coraz¨®n". Las ventas siguieron subiendo en los discos siguientes especialmente con Promise y Love deluxe.

Como compositora Sade cont¨® que no hay nada preparado de antemano. "Cada canci¨®n empieza en el estudio. No hay nada compuesto, vamos improvisando y trabajamos sobre una palabra una estrofa o una melod¨ªa. Hay temas que surgen muy r¨¢pidamente y otros tardan d¨ªas. Es un trabajo duro, pero hay que fiarse del instinto", cuenta la cantante que conf¨ªa en no correr la suerte de grupos de los ochenta como Duran Duran o Spandau Ballet. "No entiendo c¨®mo se puede odiar o amar a alguien de forma tan desmesurada". Nunca ha sentido el racismo en su propia piel -"no soy consciente de ser una mujer negra en el mundo del disco"-, pero recuerda que en los a?os ochenta en EE UU hab¨ªa radios para negros y para blancos.