Un abrazo de 25 a?os
Comisiones Obreras de Madrid elige el cartel de la Amnist¨ªa, de Genov¨¦s, para celebrar el nacimiento del sindicato
No. La verdad es que no fue un camino de rosas. Pero la historia, tal vez piadosa, tal vez injusta, dulcifica los recuerdos.
-Se empe?an en hacer creer que la transici¨®n fue una operaci¨®n palaciega... Y no es verdad.
Juan Genov¨¦s. Pintor. Tiene ahora 70 a?os. Y la voz, joven. Y la memoria, viva. Es el autor de uno de los s¨ªmbolos de la transici¨®n: El abrazo. Ese cuadro que representaba a gente busc¨¢ndose, con los brazos abiertos, el aire moviendo la ropa como banderas, abrazos en los que se puede adivinar una fuerza que hac¨ªa casi crujir las costillas, en los que se notaba el calor de la piel. Es la imagen que Comisiones Obreras de Madrid ha elegido como s¨ªmbolo de esos 25 a?os de transici¨®n, dura y dif¨ªcil. Como s¨ªmbolo del 25? aniversario del nacimiento de la Uni¨®n de Madrid.
Esa misma imagen del grito por la amnist¨ªa pol¨ªtica que, hace ahora 25 a?os, ech¨® a la gente a la calle y conmovi¨® los cimientos de un viejo r¨¦gimen que se derrumbaba, de una reforma miedosa y tenue. No. No todo fue producto de una operaci¨®n palaciega.
-Se reun¨ªan aqu¨ª, en mi estudio, los de la Junta Democr¨¢tica. Y un d¨ªa me pidieron un cartel para la campa?a de la amnist¨ªa.
Jos¨¦ Sandoval, el responsable de cultura del PCE, miraba, curioso, entre los cuadros que Genov¨¦s ten¨ªa preparados para una exposici¨®n en el extranjero. Vio aquellos hombres y mujeres corriendo a encontrarse, abraz¨¢ndose, gritando casi. Movi¨¦ndose, vivos, entre un viento nuevo.
-?ste es el cartel, Juan. ?ste.
Y Juan Genov¨¦s dijo que s¨ª. Que era ¨¦se. No pod¨ªa ser otro.
No fue un a?o f¨¢cil aquel de 1976. El a?o anterior hab¨ªa fallecido Franco, dejando una estela de muerte: el 27 de septiembre, tres militantes del FRAP y dos de ETA eran fusilados. No fue un a?o f¨¢cil. El abrazo era s¨®lo un s¨ªmbolo de una democracia que no llegaba.
La autoridad gubernativa prohib¨ªa los recitales de Raimon, Joan Manuel Serrat andaba huido por Latinoam¨¦rica, se secuestraban las revistas Cambio 16, Por Favor, Posible, Destino. Obreros, estudiantes, pol¨ªticos, ca¨ªan detenidos como moscas. Se celebraba juicio sumar¨ªsimo contra un comandante y ocho capitanes del Ej¨¦rcito que ped¨ªan su democratizaci¨®n.
La transici¨®n ven¨ªa con hambre atrasada. Tras la noche, dec¨ªa Luis Eduardo Aute, ven¨ªa una noche m¨¢s larga. A primeros de marzo mor¨ªan tres trabajadores en Vitoria. Otros 40 resultaban heridos en una de las acciones m¨¢s violentas de la historia de la transici¨®n. Pasar¨ªa largo tiempo antes de olvidar la entrada salvaje de los antidisturbios en la iglesia donde los huelguistas se hab¨ªan reunido. Luego, los sucesos de Montejurra: dos muertos y numerosos heridos. A Juan Genov¨¦s lo detuvieron hacia el 19 de marzo de aquel a?o. Recuerda que era por San Jos¨¦. Estaba en la imprenta, imprimiendo el cartel de El abrazo. Y lleg¨® la polic¨ªa.
-Nos pill¨®, en este caso, con la masa en las manos. Est¨¢bamos sacando los carteles y nos cogieron a todos.
Todav¨ªa se r¨ªe Genov¨¦s al recordar su interrogatorio. Bueno, ahora se r¨ªe. Entonces no se re¨ªa. Ahora s¨ª, cuando le viene a la memoria aquel polic¨ªa que le dijo:
-Usted es un pintor. Usted es... Ya me acordar¨¦, ya.
Y se fue. Y qued¨® Juan Genov¨¦s con el temor de si ser¨ªa bueno o malo que le identificaran como pintor. Sobre todo, como el pintor de aquel cartel que le hab¨ªa llevado a la Direcci¨®n General de Seguridad. Y, al rato, volvi¨® el polic¨ªa y, con tono de desprecio, le espet¨®, ape¨¢ndole el usted:
-Ya s¨¦ qui¨¦n eres. T¨² no eres el Veron¨¦s, t¨² eres Genov¨¦s, un desgraciao...
Era un desgraciado. Porque este tipo de pintores no eran buena gente. Ni de fiar.
Aquel a?o de 1976 Adolfo Su¨¢rez era nombrado presidente del Gobierno. Pero la historia de una transici¨®n a la que tanto contribuir¨ªa la entonces joven promesa del r¨¦gimen empezaba escribi¨¦ndose con tinta negra: en el mes de agosto, un joven era abatido a tiros cuando realizaba una pintada en Almer¨ªa. Un mes despu¨¦s, en Madrid, el estudiante Carlos Gonz¨¢lez Mart¨ªnez ca¨ªa bajo los disparos que, al grito de '?Viva Cristo Rey!', hab¨ªa efectuado una persona de paisano. El joven participaba en un acto en recuerdo de los fusilamientos del a?o anterior.
Las manifestaciones por la amnist¨ªa continuaban en todo el pa¨ªs. Precisamente pidiendo amnist¨ªa era asesinado de un tiro el estudiante Arturo Ruiz. En los actos de protesta, apenas 24 horas despu¨¦s, ca¨ªa Mari Luz N¨¢jera, muerta por el golpe de un bote de humo lanzado por la polic¨ªa en pleno centro de Madrid. Era el mes de enero de 1977. Y en esa misma semana, el horror se hac¨ªa carne en un grupo de ultraderechistas que provocaba una matanza en un despacho de abogados laboralistas de la calle de Atocha: cinco muertos y cuatro heridos graves.
No fue una transici¨®n dulce. Por m¨¢s que El abrazo se hubiera convertido en el s¨ªmbolo de una Espa?a que exig¨ªa la libertad frente a otra Espa?a que se resist¨ªa a balazos al cambio. La imagen de los hombres y mujeres con los brazos abiertos hizo, quiz¨¢, m¨¢s soportable el gris de esos d¨ªas. Comisiones Obreras recuerda ahora, con aquella pintura, sus 25 a?os de vida. Y m¨¢s cosas. Dice Francisco Naranjo, responsable de comunicaci¨®n de la Uni¨®n de Madrid:
-Queremos tambi¨¦n rendir homenaje a los 25 a?os de una transici¨®n que quieren hacernos ver id¨ªlica y dulce. Pero que cost¨® vidas.
Y desgrana nombres: Pedro Pati?o, Yolanda Gonz¨¢lez, los abogados de Atocha, Mari Luz N¨¢jera, Arturo Ruiz, el estudiante Enrique Ruano, los obreros de Vitoria...Y tantos.
La historia, tal vez piadosa, tal vez injusta, no siempre mantiene la exactitud en el recuerdo.
Pero eso es ya otra historia.
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