California, un emporio a luz de gas
La desregulaci¨®n el¨¦ctrica amenaza con colapsar la mayor econom¨ªa de EE UU
La semana pintaba mal para los californianos. El lunes, el gobernador Gray Davis pregon¨® lo que todos sab¨ªan, que la desregulaci¨®n del sector el¨¦ctrico en California constituye un 'descomunal y peligroso fracaso' que amenaza con dejar a oscuras a millones de personas y frenar la mayor econom¨ªa del pa¨ªs. Esas palabras fueron seguidas el martes por una cumbre energ¨¦tica en Washington para intentar salvar de la crisis al m¨¢s importante Estado norteamericano. El mi¨¦rcoles se filtraron ideas para posibles acuerdos, sin que hubiera nada s¨®lido. El jueves, Davis se revel¨® profeta: unos dos millones de californianos de la zona de San Francisco y del Silicon Valley tuvieron que cortar el consumo para evitar un apag¨®n total. El viernes cre¨ªan poder volver a respirar. En lo que respecta a la electricidad, California vive al d¨ªa, sin saber qu¨¦ esperar (pero temiendo que lo malo pase a peor) para el siguiente.
El calor del verano y el fr¨ªo de este invierno han hecho saltar los fusibles del sistema el¨¦ctrico californiano, desregulado en 1996 en una operaci¨®n que ahora se considera 'un descomunal y peligroso fracaso', en palabras del gobernador. 'Ha producido precios por las nubes, tarifas de estafa y un suministro no fiable. En una palabra, una pesadilla energ¨¦tica'.
Los californianos consumen un 25% m¨¢s de energ¨ªa de la que producen, el grueso de ella generada, en California y fuera del Estado, por compa?¨ªas no californianas que imponen tarifas de mercado a unas distribuidoras que, por ley, no pueden repercutir los costes al consumidor. Las dos principales, Pacific Gas & Electric y Southern California Edison, alegan que ese orden de cosas les ha hecho acumular casi 12.000 millones de d¨®lares de deudas desde la primavera. A principios de semana, los consumidores pagaban a raz¨®n de 64 d¨®lares por un megavatio/hora que a las compa?¨ªas les costaba 307. Pacific y Edison advierten que est¨¢n sin liquidez. El mi¨¦rcoles, Pacific dijo que en las pr¨®ximas ocho semanas tiene que hacer frente a facturas por valor de 2.210 millones de d¨®lares y que no dispone ni de la cuarta parte.
'Que los proveedores y la comunidad financiera lo sepan: rechazo la idea de que podemos permitir que nuestras principales compa?¨ªas el¨¦ctricas quiebren', anunci¨® el gobernador el lunes en Sacramento. 'La quiebra significar¨ªa que millones de personas se quedar¨ªan sin luz. La seguridad p¨²blica estar¨ªa en peligro. Cerrar¨ªan negocios... y nuestra econom¨ªa sufrir¨ªa un golpe devastador'.
Potenciales desastrosas consecuencias para la que 'no hay una soluci¨®n f¨¢cil', dijo Davis antes de plantear una serie de medidas de choque que van desde el recorte en el consumo a la creaci¨®n de un organismo p¨²blico en California que genere y administre la electricidad. El gobernador ofreci¨® 250 millones de d¨®lares para subvencionar la sustituci¨®n en las casas de electrodom¨¦sticos poco eficaces con vista a ahorrar un 7% de electricidad al a?o. 'Estoy dispuesto a recurrir a los poderes de defensa del bien p¨²blico para impedir que los generadores dejen a los consumidores a oscuras y lleven a la quiebra a las distribuidoras', se?al¨®. 'Nunca m¨¢s volver¨¢n los especuladores de fuera del Estado a tener a California como reh¨¦n'.
Silencio total sobre lo que m¨¢s esperaban o¨ªr las distribuidoras, noticia de una emisi¨®n de bonos que les ayude a hacer frente a los costes disparados de la energ¨ªa. Lo ¨²nico que han logrado es un incremento en los precios a los consumidores que oscila entre el 7% y el 15% cuando hab¨ªan reclamado alzas de hasta el 30%, con el aviso de que en los pr¨®ximos dos a?os necesitar¨¢n subidas de en torno al 70%.
Para el segundo cuadro del drama, la escena se tralad¨® el martes a Washington. Los actores eran pesados, convocados por Bill Clinton: el secretario del Tesoro, el de Energ¨ªa, el propio Davis, los directivos de las el¨¦ctricas y una bater¨ªa de pol¨ªticos y t¨¦cnicos. Durante siete horas, prolongadas el mi¨¦rcoles con reuniones de expertos, se pas¨® revista a la situaci¨®n y se barajaron salidas.
Las el¨¦ctricas, distribuidoras (cargadas con 12.000 millones de deudas) y productoras (pendientes de cobrar esa cantidad) quer¨ªan a toda costa arrancar a Davis un compromiso de dedicar dineros p¨²blicos a la crisis. 'Seis o siete veces' dijo el gobernador que le preguntaron si estaba dispuesto a emitir bonos. 'Les dije que no, que no voy a hacer ninguna promesa'.
De momento, los 'especuladores de fuera del Estado', en palabras de Davis, cuyos beneficios se dispararon en el ¨²ltimo trimestre, pero cuyas cotizaciones en bolsa han ca¨ªdo por la incertidumbre de si van a cobrar las sumas que se les deben, parecieron dispuestos a perdonar parte de las deudas o a cobrarlas a m¨¢s largo plazo. Tambi¨¦n se baraj¨® la posibilidad de pactar un precio constante a largo plazo, unos nueve a?os, que ser¨ªa mucho m¨¢s bajo que el que ahora se carga, pero que con el paso del tiempo podr¨ªa ser muy lucrativo para los productores.
A la espera de arreglos pol¨ªticos, las compa?¨ªas distribuidoras han acudido a los tribunales a reclamar contra la ley que les impide repercutir a los consumidores las tarifas que les aplican las compa?¨ªas generadoras.
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