India se pone al d¨ªa

Una labor de titanes tiene ocupados a 2,4 millones de funcionarios en India. En 20 d¨ªas -desde el pasado 9 de febrero y hasta el pr¨®ximo d¨ªa 28-, los empleados p¨²blicos, en su mayor¨ªa docentes, recorrer¨¢n las 5.500 ciudades y 650.000 pueblos que integran el subcontinente para realizar el preceptivo censo de un pa¨ªs que ya en agosto de 1999 super¨® los mil millones de habitantes.

Los impresos con las 23 preguntas cuyas casillas deben rellenar los agentes del empadronamiento -entrenados espec¨ªficamente para esta labor- se han traducido a m¨¢s de 16 lenguas e incluso se ha desarrollado un programa inform¨¢tico que se encargar¨¢ de digerir la avalancha de cifras.

Si las preguntas no han variado sustancialmente desde que el colonizador brit¨¢nico instaurara esta pr¨¢ctica de recuento en 1871, la evoluci¨®n de la sociedad impone alguna actualizaci¨®n en el cuestionario. En una India que se urbaniza lentamente, el Gobierno quiere saber cu¨¢nto tiempo tarda un asalariado en desplazarse desde su lugar de residencia a su trabajo y qu¨¦ medio de transporte utiliza. Asimismo, los barrios chabolistas que no paran de desarrollarse alrededor de grandes urbes como Bombay y Calcuta por primera vez se contabilizar¨¢n aparte, lo que podr¨¢ dar una idea de la poblaci¨®n que vive en ellos y en qu¨¦ condiciones. Para ajustar en la medida de lo posible el resultado, se esperar¨¢ a la madrugada del d¨ªa 28 para hacer el recuento de los sin techo.

'Los resultados del empadronamiento tienen efectos constitucionales', comenta J. K. Banthia, responsable general del empadronamiento, 'ya que la Carta Magna prev¨¦ cuotas de esca?os en el Parlamento Federal en funci¨®n de la poblaci¨®n de los Estados, as¨ª como la reserva de empleos p¨²blicos para los parias (intocables)'. Esta categor¨ªa, en la parte m¨¢s baja de la escala social india, tiene, adem¨¢s, que precisar el nombre de su casta o de su tribu.

El empadronamiento obligatorio ha provocado una violenta reacci¨®n en eunucos y prostitutas. Los primeros, transexuales o travestidos en su mayor parte, se amotinaron recientemente al verse reducidos a la categor¨ªa de hombres y reclaman la creaci¨®n de una clasificaci¨®n intermedia, un punto equidistante entre lo masculino y lo femenino. Por su parte, las prostitutas no quieren que se las incluya en la categor¨ªa de 'mendigos'. Y aunque la Asociaci¨®n India de Mujeres Oprimidas (BPUS) aseguraba la semana pasada que los responsables del recuento han prometido que les permitir¨¢n registrarse como 'empleadas (de la industria) del sexo', Bimla Jingdar, directora del censo en la capital, Nueva Delhi, rechazaba tal posibilidad. 'Es as¨ª como se hace en todo el mundo', concluye, sin ofrecer alternativa.

Pero es en las capas m¨¢s desahogadas de la poblaci¨®n en las que los agentes est¨¢n encontrando m¨¢s dificultades para cumplir con su ingente labor: temen que los datos facilitados al Estado acaben dirigiendo hasta su puerta a otros funcionarios menos inocentes, los del fisco. No les tranquiliza el compromiso de confidencialidad de las informaciones obtenidas durante el empadronamiento, que no pueden ser utilizadas ante ninguna jurisdicci¨®n.

Con la preocupaci¨®n de comprender mejor los cambios de la sociedad por g¨¦nero, en un pa¨ªs en el que los hombres son mayor¨ªa, se ha a?adido al cuestionario la edad de casamiento sin distinci¨®n de sexo. Y, seg¨²n datos conocidos hasta ahora, hasta donde hist¨®ricamente se daba una proporci¨®n mayoritaria femenina, caso del estado de Kerala, se est¨¢n invirtiendo las cifras.

Una nueva pregunta, de las principales, y que adem¨¢s los encuestadores encuentran delicada de plantear es la de la presencia de minusv¨¢lidos en las familias. El empadronamiento distingue cinco tipos de minusval¨ªas -visual, auditiva, af¨¢sica, motora o mental-.

El obligatorio registro de este a?o se muestra, no obstante, indulgente con los casos de fuerza mayor. Las operaciones emprendidas en Cachemira se tuvieron que interrumpir atendiendo a la agitada situaci¨®n pol¨ªtica. Y, como consecuencia del reciente terremoto en Gujarat, las regiones m¨¢s golpeadas por el se¨ªsmo han sido excluidas por el momento del padr¨®n. Seg¨²n Banthia, los primeros resultados del gigantesco inventario deber¨ªan conocerse a finales de marzo.

? Le Monde.