Sara Lee tira la toalla en el sector de la carne

Desembarc¨® en Espa?a en 1983, en el sector del caf¨¦, y 10 a?os m¨¢s tarde lo hac¨ªa en el mundo de la carne con la adquisici¨®n de Hesperia. Como en otras de las actividades donde opera el grupo -textiles o productos de limpieza-, la multinacional Sara Lee aspiraba tambi¨¦n a lograr un cierto liderazgo en el sector de la carne en Espa?a. Sin embargo, en la ¨²ltima d¨¦cada, el grupo norteamericano no fue capaz de despegar y, lejos de aumentar sus ventas, ha llevado una l¨ªnea de retrocesos en la facturaci¨®n y en los resultados. En los ¨²ltimos tiempos no funcionaron tampoco diferentes intentos para la formaci¨®n de un grupo c¨¢rnico de mayor volumen en Espa?a, ubicado en Catalu?a.

Los responsables de la firma multinacional acabaron por tirar finalmente la toalla con la venta de Argal (antes, Hesperia Alimentaci¨®n) a un grupo de directivos de la compa?¨ªa. Esta decisi¨®n se produce a los pocos meses de que en el sector consolidase su indiscutible liderazgo el grupo Campofr¨ªo, mientras El Pozo mantiene su apuesta de crecer en solitario y se sigue barajando la posibilidad de que se forme un nuevo grupo en Catalu?a entre varias firmas importantes.

Los inicios de la actividad de Sara Lee en Espa?a se remontan a los a?os setenta, cuando los directivos de la firma conectaron con empresarios espa?oles por el negocio del caf¨¦. Estos contactos desembocaron, en 1983, con la compra de Caf¨¦ Marcilla y, posteriormente, con la adquisici¨®n de Cruz Verde, una empresa dedicada a la fabricaci¨®n de productos de higiene y cuidado personal. En 1985 sigui¨® la compra de Legrain. En el sector de la carne, con el objetivo de lograr un gran grupo alimentario, en 1993, la firma norteamericana se hizo por 2.000 millones de pesetas con Hesperia Alimentaci¨®n, integrada en la divisi¨®n de British Petroleum Nutrition.

Un grupo diversificado

Al margen de la actividad en el sector de la carne, el grupo Sara Lee obtuvo en Espa?a, en el ejercicio anterior, una facturaci¨®n de 65.000 millones de pesetas, de los que m¨¢s de 36.000 millones correspondieron a Cruz Verde, con marcas como Ambipur, Kiwi o Aqua Velva; m¨¢s de 23.000 millones de pesetas, al grupo Sans, con marcas como Ocean, Princesa o Abanderado, y m¨¢s de 5.000 millones de pesetas, a Playtex. En el cap¨ªtulo alimentario destaca Marcilla en caf¨¦s y fundamentalmente el grupo Argal en el de c¨¢rnicos transformados, con una facturaci¨®n que se ha ido reduciendo en los ¨²ltimos a?os hasta los 17.000 millones de pesetas, con resultados negativos.

Argal, tras los procesos de compra llevados a cabo por Campofr¨ªo en el ¨²ltimo a?o, se manten¨ªa estabilizada en el tercer puesto en el mercado de los productos elaborados, con una cuota superior al 4%, frente al 8% de El Pozo y al 22% de Campofr¨ªo, y por delante de Tarradellas o Casademont. La empresa cuenta con una f¨¢brica en Miralcamp (Lleida), junto con su filial Industrias C¨¢rnicas Navarras, en Lumbier (Navarra). Igualmente dispone de instalaciones en Fregenal de la Sierra (Badajoz), dedicadas a la elaboraci¨®n de productos de cerdo ib¨¦rico, donde ocupaba una posici¨®n destacada, con ventas de unos 1.500 millones de pesetas

El estancamiento en la actividad de la empresa, junto con los malos resultados cosechados en los ¨²ltimos ejercicios, con unas p¨¦rdidas cercanas en tres a?os a los 3.000 millones de pesetas, habr¨ªan sido algunas de las razones que han decidido a los responsables de la multinacional a abandonar la sociedad y dejar la misma en manos de un grupo de directivos encabezados por su presidente, Pere Castell¨¤. La empresa no ha hecho p¨²blico el precio de la operaci¨®n. Sara Lee aportar¨¢ 10.000 millones de pesetas para tapar agujeros, mientras que los directivos se har¨ªan con parte de la deuda, unos 4.000 millones de pesetas, y han suscrito ya un cr¨¦dito sindicado de 1.500 millones para circulante con entidades financieras como Caja Madrid, BBVA y BSCH.

Tras este cambio en la titularidad de la empresa Argal, antigua Hesperia Alimentaci¨®n, los nuevos ejecutivos pretenden llevar a cabo un plan a tres a?os para mejorar la productividad de la sociedad en todas las plantas, con especial incidencia en la marca blanca. Igualmente, en el futuro de la empresa se quiere contar con la presencia de un grupo industrial.