Un largo camino en los tribunales

El 24 de marzo de 1998, la C¨¢mara de Diputados argentina derog¨® las leyes de Punto Final y Obediencia Debida. Uno de los proponentes de la derogaci¨®n, el diputado Alfredo Bravo, confesaba al periodista Miguel Bonasso su deseo m¨¢s ¨ªntimo: 'Ahora lo que hace falta es que aparezca un juez con un buen par de bolas y declare la inconstitucionalidad de esas leyes de mierda'. Bien, pues ese d¨ªa ya ha llegado, de la mano del juez Gabriel Cavallo. 'Es la causa m¨¢s importante en la que me ha tocado trabajar', ha dicho este magistrado de 42 a?os.

?Y ahora? Tras la explosiva decisi¨®n judicial del martes cabe esperar un r¨¢pido recurso de los afectados. El juez Cavallo ha citado a declarar a los ex polic¨ªas Juan Antonio del Cerro, alias Colores (el 15 de marzo), y Julio Sim¨®n, el Turco Juli¨¢n (el 20), que est¨¢n detenidos y procesados por el secuestro y desaparici¨®n de Gertrudis Hlaczik y Jos¨¦ Antonio Poblete, y la apropiaci¨®n de la hija de ¨¦stos, Claudia. En esta misma causa est¨¢ incriminado por el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) el general Carlos Su¨¢rez Mason, ex comandante del I Cuerpo del Ej¨¦rcito, que cumple arresto domiciliario por la causa del robo de beb¨¦s.

Tras la previsible apelaci¨®n de los abogados de los represores, corresponder¨¢ a la Sala Segunda de la C¨¢mara Federal confirmar o rechazar los razonamientos en el fallo de Cavallo. En anteriores ocasiones, los miembros de este tribunal han considerado que no se puede invocar las leyes de Punto Final y de Obediencia Debida en hechos atroces o aberrantes como el robo de hijos de desaparecidos, y que tales leyes no son de cumplimiento obligatorio, sino que deben ser evaluadas en cada caso.

La siguiente instancia es la Corte de Casaci¨®n y, por ¨²ltimo, el recurso llegar¨¢ hasta la Corte Suprema. El alto tribunal convalid¨® la ley de Obediencia Debida en 1987, con el voto favorable de tres jueces que permanecen en la Suprema. Uno de ellos, Enrique Petracchi, descalific¨® en sus fundamentos el concepto de obediencia debida aunque apoy¨® la ley por 'la particular coyuntura pol¨ªtica' de la ¨¦poca, en la que los militares golpistas acosaban con fuerza al Gobierno democr¨¢tico de Ra¨²l Alfons¨ªn.

Hoy las circunstancias pol¨ªticas de Argentina son completamente distintas, lo que induce a pensar en un voto distinto de estos jueces.

En la larga explicaci¨®n del fallo del martes, el juez Cavallo recuerda el caso de la extradici¨®n del nazi Erich Priebke, en el que la Corte Suprema acept¨® el derecho de gentes, esgrimido por el magistrado en su resoluci¨®n, al considerar que los delitos cometidos por el antiguo oficial de las SS alemanas no prescrib¨ªan. ?Por qu¨¦ no adoptar el mismo criterio ante cr¨ªmenes cometidos en territorio argentino por militares argentinos?, se preguntaba el juez. Una reciente encuesta del diario Clar¨ªn se?ala que el 78% de los argentinos est¨¢ a favor de la nulidad de las leyes y de la reanudaci¨®n de los juicios contra los militares implicados en la llamada guerra sucia.