El desquite de los ausentes
Reyes Est¨¦vez y Niurka Montalvo ganan en Lisboa las medallas que no pudieron lograr en Sydney
El atletismo espa?ol se redimi¨® ayer en una buena parte de sus ¨²ltimas desdichas. Dos medallas, una de plata, muy significativa para Reyes Est¨¦vez, en los 1.500 metros y otra de bronce, de Niurka Montalvo, en salto de longitud, con nuevo r¨¦cord nacional (6,88 metros), se unieron a la lograda el viernes por el lanzador de peso Manuel Mart¨ªnez. Dos ausentes en los Juegos Ol¨ªmpicos de Sydney 2000 subieron al podio en los Campeonatos del Mundo de pista cubierta de Lisboa 2001. Todo un desquite. Y la jornada a¨²n pudo ser mejor, pues Marta Dom¨ªnguez, como se esperaba, luch¨® tambi¨¦n por la medalla en los 3.000 metros, pero qued¨® la cuarta, el puesto maldito, aunque tambi¨¦n con r¨¦cord nacional.
Reyes Est¨¦vez ha vuelto al gran camino. El que no ganara el t¨ªtulo no empa?a en lo m¨¢s m¨ªnimo su recuperaci¨®n absoluta para la ¨¦lite despu¨¦s del lamentable episodio que le excluy¨® de Sydney al no ser seleccionado. Ayer estaba en forma en el magn¨ªfico pabell¨®n Atl¨¢ntico. Y por eso roz¨® el oro, como hab¨ªa anunciado con otra exhibici¨®n en la semifinal del d¨ªa anterior. Ha vuelto a ser el atleta que asombr¨® en 1998 y 1999. En Sevilla, en los Mundiales al aire libre, obtuvo el bronce y ahora ha subido un escal¨®n. No estaba el marroqu¨ª El Guerruj, pero s¨ª el keniano Ngeny, al que super¨® con claridad. S¨®lo le falt¨® superar al irresistible Rui Silva, siempre peligros¨ªsimo por su tremendo sprint.
La carrera fue al principio lenta, muy lenta. Ngeny y Est¨¦vez se pusieron en cabeza para controlarla y, aunque a los 300 metros Higuero, el otro espa?ol finalista, aceler¨® el ritmo, el grupo hizo los primeros 400 en unos floj¨ªsimos 1m 10,36s. Aquello ol¨ªa demasiado a tacticismos. A los 700 atac¨® Ngeny y le sigui¨® Est¨¦vez. Pero tambi¨¦n el marroqu¨ª Kaouch, que ceder¨ªa, y el portugu¨¦s Rui Silva. Los 800 se pasaron en 2m 14,34s, un mundo, pero algo mejor. La carrera estaba lanzada y s¨®lo cab¨ªa esperar los ataques finales.
A falta de 250 metros, antes de entrar en la ¨²ltima vuelta, Est¨¦vez dio un aceler¨®n espl¨¦ndido y rompi¨® el ¨²ltimo grupo. La inc¨®gnita estaba en si resisitir¨ªa la remontada del galgo luso, que esperaba el ataque y se fue tras ¨¦l. Ngeny, en cambio, se vio desbordado y ya no reaccion¨®. Bastante hizo con mantener el bronce ante su compatriota Rotich. Higuero, muy verde para estas palabras mayores, se hab¨ªa perdido mucho antes y acab¨® el ¨²ltimo. Est¨¦vez, camino de la gloria total, se vio cazado por Rui Silva al salir de la ¨²ltima curva y ya no pudo con ¨¦l.
Gran clase
Niurka Montalvo tampoco pudo competir en Sydney por la negativa de su pa¨ªs de nacimiento, Cuba, a darle el permiso necesario. Hubiera ganado o no una medalla, era una seria aspirante al podio. Lo es siempre. Es una espl¨¦ndida atleta y una gran profesional. Roto su matrimonio y de vuelta a Valencia tras su etapa gaditana, los cambios en su vida no han perjudicado su concentraci¨®n. Ayer empez¨® el concurso de longitud la tercera y as¨ª lo termin¨®. S¨®lo hizo un nulo, en el segundo intento, y comenz¨® con 6,76 metros para seguir con 6,71, batir por primera vez el r¨¦cord nacional con 6,85, bajar a 6,69 y asegurarse el bronce con un ¨²ltimo salto de 6,88, otra vez plusmarca espa?ola.
Niurka, que esta vez no tuvo problemas con el codo, que siempre le quitaba cent¨ªmetros en la ca¨ªda, los traspas¨® esta vez a la espalda. Cay¨® en el foso demasiado tumbada y eso le perjudic¨®. Pero est¨¢ de nuevo en la ¨¦lite y por un cent¨ªmetro esta vez le quit¨® el podio, lo mismo que le hab¨ªa arrebatado el oro en Sevilla, a la italiana Fiona May. El t¨ªtulo parec¨ªa claro para la rusa Tatiana Kotova, que hizo un concurso espl¨¦ndido (6,83, 6,88, 6,88 y 6,94), pero en el ¨²ltimo salto la estadounidense Dawn Burrell se fue hasta 7,03 y se convirti¨® en la ¨²nica atleta que super¨® los siete metros.
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