Mosc¨² asegura que est¨¢ listo para dialogar con Washington

Rusia ha puesto buena cara al mal tiempo y, al menos oficialmente, ha subrayado el lado positivo del discurso del presidente norteamericano, George W. Bush, en el que anunci¨® que EE UU no cumplir¨¢ el tratado ABM de 1972 y desplegar¨¢ un escudo nuclear. 'Es sumamente importante que la Administraci¨®n estadounidense no planea tomar medidas unilaterales, sino que desea consultar con sus aliados y amigos, incluida Rusia', declar¨® ayer el ministro de Exteriores, ?gor Ivanov. Mosc¨² est¨¢ preparado para dialogar con Washington sobre los problemas de la estabilidad estrat¨¦gica, agreg¨® el jefe de la diplomacia rusa.

El Kremlin se ha opuesto hasta ahora a revisar el tratado de 1972, porque considera que ¨¦ste es la piedra angular de la disuasi¨®n nuclear, pol¨ªtica gracias a la cual se ha podido evitar el estallido de una guerra at¨®mica. La filosof¨ªa de esta pol¨ªtica es muy simple: se proh¨ªbe la creaci¨®n de sistemas fiables de defensa contra misiles bal¨ªsticos, pues as¨ª ninguna de las partes se atrever¨¢ a atacar, ya que sabr¨¢ que no tendr¨¢ protecci¨®n contra los cohetes de respuesta. El problema de crear un escudo nuclear es que la otra parte -en este caso, Rusia o China- se siente amenazada, puesto que teme que el que tenga ese escudo puede verse tentado a atacar, confiando en que est¨¢ suficientemente protegido contra los misiles que en respuesta lance el enemigo.

Hay pol¨ªticos nacionalistas que son partidarios de responder a EE UU denunciando el tratado START-2 de reducci¨®n de armas at¨®micas -los expertos afirman que no hay escudo que sea eficaz si se lanza un gran n¨²mero de misiles- o el de no proliferaci¨®n nuclear. Sin embargo, la mayor¨ªa de los pol¨ªticos rusos son m¨¢s responsables y comprenden que hay que ser realistas: Washington no permanecer¨¢ en los marcos del tratado ABM y, por tanto, hay que preocuparse por c¨®mo llegar a un compromiso que garantice un equilibrio de fuerzas.