Los 'shock' de la noche del d¨ªa 13

El d¨ªa 13, a la noche, puede haber un shock en la sociedad vasca, sean cuales sean los resultados. Es posible, no porque se ponga en duda el veredicto de las urnas -los enfrentamientos que se han producido a lo largo de la campa?a entre PP, PSE, PNV e IU son, como es l¨®gico, escrupulosamente democr¨¢-ticos- sino porque esos resultados van a tener un impacto superior al de otras elecciones, tanto en los votantes como en los propios partidos pol¨ªticos.

Si PP y PSE lograran formar Gobierno, el shock ser¨ªa enorme entre los militantes y seguidores del PNV. Durante estos 15 d¨ªas, la mayor¨ªa de ellos se ha cre¨ªdo que ¨¦se era, en el fondo, un escenario imposible y que no merec¨ªa la pena llenar la cabeza, ni por un minuto, con la posibilidad de tener que abandonar los puestos clave de esta sociedad. Si el PNV consiguiera un resultado superior al actual, el impacto ser¨ªa para los militantes populares y socialistas, que han puesto algo m¨¢s que esperanzas electorales en estos comicios y que temen la frustraci¨®n que podr¨ªa instalarse entre sus filas. El ¨¦xito avasallador del PNV ser¨ªa tambi¨¦n acogido con enorme decepci¨®n en el ¨¢mbito intelectual y universitario de Euskadi, que por primera vez desde la transici¨®n ha abandonado sus casas, aulas y estudios para intervenir en pol¨ªtica en defensa de unos valores que considera amenazados. La presencia ayer de un gran grupo de estos intelectuales en una reuni¨®n a puerta cerrada con Jaime Mayor simboliza esa apuesta, que hubiera sido considerada imposible en Euskadi hace pocos meses, antes del asesinato del socialista Fernando Buesa.

Para muchos socialistas, incluso los m¨¢s comprensivos con el papel desempe?ado por el nacionalismo, una gran victoria del PNV ser¨ªa tambi¨¦n algo m¨¢s que una derrota electoral propia, porque si los resultados finales exigieran un pacto, ese acuerdo ser¨ªa pr¨¢cticamente imposible con la direcci¨®n actual triunfante.

Por ¨²ltimo, estas elecciones est¨¢n provocando una aut¨¦ntica inquietud en EH, que personaliza su propio shock en la figura de Jaime Mayor como lehendakari. Sus seguidores temen un Gobierno PP-PSE no s¨®lo porque vaya a adoptar una actitud m¨¢s combativa contra la lucha callejera que desarrolla una parte de sus militantes, sino, sobre todo, porque suprima buena parte de las subvenciones que reciben asociaciones culturales de todos los ¨¢mbitos con ideolog¨ªa abertzale militante. Este temor es el que est¨¢ llevando a Arnaldo Otegi a reiterar de forma algo pat¨¦tica sus ofrecimientos al PNV.

Unos y otros esperan que las largas negociaciones que se abran el d¨ªa 14 permitan que el afectado vaya superando su shock. Pase lo que pase, ya est¨¢ claro que ¨¦stas no van a ser unas elecciones in¨²tiles, en contra de lo que afirm¨® Ibarretxe en su d¨ªa. Los electores han mostrado en las encuestas su cansancio y su deseo de que los pol¨ªticos resuelvan c¨®mo organizar una sociedad como ¨¦sta, que algunos llaman plural y que otros dicen que est¨¢ dividida en dos. Aun en el caso de que la encuesta del CIS sea correcta y el 13 por la noche los resultados sean muy parecidos a los actuales, algo habr¨¢ cambiado en la pol¨ªtica vasca, porque exigir¨¢n al PNV que decida si acepta o no seguir un trecho del camino con EH. Y ¨¦se es, posiblemente, el debate m¨¢s importante que se plantea la sociedad vasca.