Carmen Mart¨ªn Gaite, su obra y su mundo
La exposici¨®n 'Lo raro que es vivir' recorre toda la vida de la escritora salmantina
'Mientras dure la vida, sigamos con el cuento'. 'Mientras quede vida, hablemos de vida'. Dos frases de Carmen Mart¨ªn Gaite, que resumen su pensamiento, dan la bienvenida al visitante de la exposici¨®n Lo raro que es vivir, t¨ªtulo extra¨ªdo de uno de sus ¨²ltimos libros (Lo raro es vivir), que se exhibe desde hoy y hasta el 22 de julio en el Centro Cultural del C¨ªrculo de Lectores, en Madrid.
Es impresionante. Y tambi¨¦n oportuna. Hace un a?o, Carmen Mart¨ªn Gaite estaba firmando libros en la Feria de Madrid. Era la reina, se enrollaba con sus lectores, la mayor¨ªa j¨®venes. Un mes despu¨¦s, en la madrugada del 23 de julio, muri¨®, a los 74 a?os, abrazada a los cuadernos de su ¨²ltima novela, Los parentescos, publicada p¨®stumamente, inacabada, pero hermosa como todos sus textos. Ni siquiera sus amigos sab¨ªan que estaba tan enferma y su muerte caus¨® una aut¨¦ntica conmoci¨®n. Como la provoca tambi¨¦n esta exposici¨®n que muestra a la perfecci¨®n a la mujer vitalista y reflexiva.
'Hemos intentado mostrar la mezcla de literatura y vida en Carmen Mart¨ªn Gaite', afirma Santos Sanz Villanueva, el comisario de la exposici¨®n. 'Era una mujer extraordinariamente vital, presumida, provocadora, le gustaba parecer extravagante con su boina, pero no es ¨¦sa la imagen que hemos querido dar. Se abre la exposici¨®n con una fotograf¨ªa en que aparece ensimismada y melanc¨®lica, y se cierra con otra en que lleva su divertida boina pero en la que tambi¨¦n aparece ensimismada'.
'Carmen era aparentemente bohemia. Yo cre¨ªa que no daba importancia a nada, que era an¨¢rquica en todo, pero era muy conservadora, conservadora en el sentido de que lo guardaba todo. Guard¨® hasta el resguardo de entrega de Entre visillos, la novela con que gan¨® el Premio Nadal. En todo lo otro, como en toda nuestra familia, su palabra preferida era futuro, futuro, futuro', explica su hermana Ana Mar¨ªa Mart¨ªn Gaite.
La exposici¨®n sigue un cierto orden cronol¨®gico. Hay fotograf¨ªas de sus abuelos y de sus padres; tambi¨¦n la correspondencia que mantuvo con su padre. El esp¨ªritu de la familia se refleja en un texto que, a modo de testamento, dej¨® el padre a sus hijos: 'Olvidaos de la ambici¨®n de poseer y, en cambio, no perd¨¢is nunca hasta el fin de vuestros d¨ªas la ambici¨®n de saber'. Carmi?a, Calila, como le llamaban sus ¨ªntimos, se tom¨® muy en serio el consejo de su padre.
El hijo muerto
Carmen Mart¨ªn Gaite se cas¨® con Rafael S¨¢nchez Ferlosio el 14 de octubre de 1953. Est¨¢ en la exposici¨®n el acta de matrimonio. Su primer hijo, Miguel, naci¨® el 22 de octubre de 1954 y muri¨® poco antes de cumplir los nueve meses. Emocionan las narraciones escritas e ilustradas por Carmen y Rafael para este hijo. Dos a?os despu¨¦s naci¨® su hija Marta, a quien llamaban cari?osamente La Torci, porque, recuerda Ana Mar¨ªa, siempre se pon¨ªa torcida en la cuna. Se constata en la exposici¨®n la intensa relaci¨®n que mantuvieron madre e hija. Hay muchas cartas, entre las que llama la atenci¨®n una carta-collage que Mart¨ªn Gaite envi¨® a La Torci desde Nueva York, en la que, con alegre colorido, le explicaba c¨®mo viv¨ªa all¨ª. Marta muri¨® antes de cumplir los 30 a?os.
Desde muy chiquitita, Marta sab¨ªa c¨®mo trabajaba su madre, llenando cuadernos y cuadernos. En la exposici¨®n se muestra uno que le regal¨®, cuando ten¨ªa cinco a?os, y en el que, con letra infantil, aparece escrito Cuaderno de todo. Fue el principio de los cuadernos de todo que escribi¨® Mart¨ªn Gaite y que incluso numer¨®, el cuaderno de todo 2, el 3... Se exhibe una amplia selecci¨®n de sus muchos cuadernos de todo en los que tomaba notas para sus libros, apuntaba comentarios de libros, impresiones...
Tiene raz¨®n Ana Mart¨ªn Gaite cuando dice que su hermana lo guardaba todo: est¨¢n sus cuadernos escolares, cartillas, calificaciones, orlas y t¨ªtulos de ense?anza secundaria y universitaria, la fotograf¨ªa de la fiesta de licenciatura. Hay incluso un cuaderno fechado en 1934, escrito por Mart¨ªn Gaite cuando ten¨ªa ocho a?os. Y otro de 1936, titulado Redacciones, con textos de vocaci¨®n narrativa, en los que describe un viaje a Madrid.
La exposici¨®n incluye objetos ¨ªntimos, como la pluma que hered¨® de su padre, su inseparable costureo o su gorra gris con estrellitas. Ana Mar¨ªa Mart¨ªn Gaite cuenta que todo ese material lo guardaba Carmi?a en su casa de Doctor Esquerdo, en Madrid. 'Verlo y colaborar en esta exposici¨®n, en la que Santos [Sanz Villanueva] ha puesto tanto amor, me ha ayudado a poner orden en mi cabeza y a salir adelante'.
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