El ¨²ltimo pleno de la Asamblea acaba en bronca entre Pedroche y el PSOE

No es que fuera una sesi¨®n tranquila. Pero nada hac¨ªa presagiar que lo que hab¨ªa empezado con felicitaciones al consejero de Econom¨ªa, Luis Bl¨¢zquez -ayer celebraba el santoral la festividad de san Luis Gonzaga- acabara en un enfrentamiento entre Pedroche y los socialistas. La tormenta se hab¨ªa anunciado ya cuando el presidente de la Comunidad, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, contest¨® a una pregunta de Sabando, que quer¨ªa saber c¨®mo y cu¨¢ndo se va a plasmar el compromiso de consensuar en comisi¨®n plural -parti-dos, asociaciones, sindicatos...- las transferencias de Sanidad desde el Gobierno central al regional.

El presidente regional dio fecha para la comisi¨®n: el 18 de octubre. Y, despu¨¦s, recrimin¨® al socialista que exigiera tanto: 'Usted es como un autoestopista, que pide que le lleven. Yo le llevo, le abro el coche. La puerta de la derecha', matiz¨®, 'y encima quiere decirme c¨®mo debo conducir y a d¨®nde tengo que llevarle'.

Luego, una intervenci¨®n del diputado del PSOE Antonio Carmona hizo saltar la chispa de los incidentes. Con motivo de una pregunta al consejero Bl¨¢zquez, el socialista defendi¨®, con su ardor habitual, la tradici¨®n del Rastro, puesta en peligro por las normas de Ayuntamiento y Comunidad. Y, fuera por el fuego de su verbo o por cierta socarroner¨ªa del consejero, el caso es que comenzaron a o¨ªrse gritos desde la tribuna del p¨²blico. Mand¨® Pedroche callar, sin ¨¦xito alguno, y dijo: 'Recuerdo a sus se?or¨ªas, y especialmente al se?or Carmona, que recuerden a sus invitados el respeto que se debe a esta C¨¢mara'.

Creci¨® la bronca. Pidieron la palabra el diputado aludido y los portavoces socialistas. Neg¨®sela el presidente y sigui¨®, tenso, el pleno. Ni siquiera el intercambio musical entre el socialista Antonio Chazarra y la consejera de Cultura, Alicia Moreno, rebajaron la tensi¨®n. Y eso que Chazarra aludi¨® a Atahualpa Yupanqui, a Gloria Lasso y a Carlos Gardel, al que culp¨® del retraso de la creaci¨®n del Consejo de Archivos. 'La culpa la tiene Gardel', dijo, 'porque si ¨¦l dijo que 20 a?os no es nada, qu¨¦ son ocho a?os que lleva usted de retraso'. La consejera re¨ªa y anunciaba, animosa, que iba a cantarle algo. Por desgracia, el tiempo se hab¨ªa acabado, qued¨¢ndose los diputados con las ganas.

Bueno, pues ni eso, ni la felicitaci¨®n con la que Teresa Nevado (PSOE-Progresistas) se dirigi¨® a Bl¨¢zquez logr¨® que el pleno acabara en paz y armon¨ªa. Terminadas las preguntas, pidi¨® de nuevo la palabra Sabando. Y Pedroche se la dio. El portavoz socialista exigi¨® que el presidente retirara sus afirmaciones sobre la responsabilidad de Carmona en el comportamiento de los invitados. Pero Sabando buscaba, adem¨¢s, sacarse una espina. Y lo hizo. Volvi¨® al ejemplo del coche y espet¨® a Ruiz-Gallard¨®n: 'Ese coche no es suyo. Es del pueblo, que lo da con sus votos. Y decide qui¨¦n se sube a ¨¦l'. Aplaudieron los socialistas. Y, con ganas y sonriendo, Ruiz-Gallard¨®n.

Pedroche replic¨® que, como presidente del Parlamento, no pod¨ªa polemizar con Sabando. Pero dicho eso, le aclar¨® que su obligaci¨®n era la de defender la dignidad de la C¨¢mara, 'incluida su dignidad, se?or Sabando'. Y, a continuaci¨®n, y ante la sorpresa del socialista, que insist¨ªa en volver a hablar, dio la palabra al portavoz del PP. Breve y en tono desenfadado, Villanueva recomend¨® al socialista: 'Sea usted feliz, se?or Sabando'.

El pateo era ensordecedor cuando Pedroche pas¨® a la comparecencia del defensor del Menor, Javier Urra. 'Se?or¨ªas, oigan la voz de la infancia', clamaba Urra. Nada. '?ste es el partido de los ni?os y ni?as, o¨ªganlo', continuaba. Poco afortunadas palabras que s¨®lo aumentaban el esc¨¢ndalo. Finalmente, Sabando impuso silencio en sus filas.

Pero el pleno no fue in¨²til: se aprob¨® crear el Servicio Regional de Empleo, la Ley del Juego -con los votos en contra del PSOE-, la s¨¦ptima universidad privada (la Francisco de Vitoria) y una iniciativa socialista para llegar a acuerdos de movilidad con Castilla-La Mancha y Castilla y Le¨®n para los ciudadanos madrile?os.