En busca del r¨¦dito electoral de las cajas

Javier Arenas ha proclamado que la pol¨¦mica de las cajas de ahorro en Andaluc¨ªa demuestra que el ciclo pol¨ªtico de Manuel Chaves ha terminado. El secretario general del PP, que sufri¨® dos derrotas en las urnas ante Chaves, ha decretado que el socialismo andaluz 'est¨¢ en fase terminal' y que en ¨¦l anidan 'los ¨²ltimos rescoldos de la corrupci¨®n'. La teor¨ªa del ciclo acu?ada por Arenas hace dos semanas es hoy el bander¨ªn de enganche que enarbola Te¨®fila Mart¨ªnez, presidenta del PP andaluz, para justificar la alianza en el tema de las cajas entre la derecha pol¨ªtica y econ¨®mica y la izquierda aglutinada en torno a IU y CC OO.

En apoyo de esta tesis han desembarcado en la pol¨ªtica andaluza los pesos pesados del Gobierno. El vicepresidente y ministro de Econom¨ªa, Rodrigo Rato, ha afirmado que la actuaci¨®n de Chaves en las cajas es 'obscena'. P¨ªo Cabanillas, portavoz del Gobierno, dijo el pasado viernes desde la tribuna del Consejo de Ministros que es 'imprescindible' que las cajas recuperen su independencia 'dado que el dinero de los andaluces no se puede convertir en el dinero p¨²blico de la Junta'.

El PP defiende a dos socialistas frente a su partido pese a que tendr¨¢ m¨¢s peso en los consejos renovados

Previamente, Arenas hab¨ªa se?alado que la actuaci¨®n de Chaves estaba rodeada de 'indecencia e indignidad'. Conforme se baja en el escalaf¨®n popular, la descalificaci¨®n sube de grado: el secretario regional del PP, Antonio Sanz, le ha llamado 'fascista', 'totalitario' y 'cacique'.

?Por qu¨¦ han iniciado los populares una ofensiva de desgaste de Chaves de estas caracter¨ªsticas? El PP, seg¨²n reconocen varios dirigentes, cree haber encontrado en las cajas un medio para dar un vuelco al mapa pol¨ªtico de Andaluc¨ªa, comunidad gobernada por el PSOE desde 1982.

La Junta y los socialistas afirman que se han limitado a hacer cumplir la Ley de Cajas de Ahorros aprobada por el Parlamento andaluz. Las seis cajas de la comunidad deb¨ªan adaptar sus estatutos a la nueva ley, con la consiguiente renovaci¨®n de sus cargos a trav¨¦s de un proceso electoral. Tres de ellas as¨ª lo est¨¢n haciendo, mientras que CajaSur, controlada por la Iglesia cat¨®lica, est¨¢ pendiente de una sentencia del Tribunal Constitucional.

Por contra, los presidentes de las dos cajas sevillanas, El Monte y San Fernando, decidieron hacer un regate a la ley: iniciar un proceso de fusi¨®n con el que pretend¨ªan paralizar el proceso electoral. As¨ª, sus presidentes, los socialistas Juan Manuel L¨®pez Benjumea (Caja San Fernando) e Isidoro Beneroso (El Monte), pretend¨ªan mantenerse al frente de las cajas hasta culminar la fusi¨®n y cumplir su proyecto personal de alumbrar AlCaja.

La ambici¨®n personal de Beneroso y Benjumea, en opini¨®n de los dirigentes del PSOE regional, los enfrent¨® a su partido. El PP estaba al acecho: vio en ese enfrentamiento una grieta por la que iniciar la erosi¨®n del socialismo sevillano, el m¨¢s poderoso del PSOE andaluz. Lo dec¨ªa claramente la pasada semana un dirigente popular: 'Cada d¨ªa de crisis en las cajas son votos para el PP'.

S¨®lo as¨ª se puede explicar la defensa cerrada por parte del PP de dos militantes del PSOE en proceso de expulsi¨®n. Una defensa que est¨¢ siendo desbaratada por resoluciones judiciales: el Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa (TSJA) y el Consejo Consultivo (una especie de Consejo de Estado andaluz) han avalado la interpretaci¨®n que la Junta hace de la Ley de Cajas.

Porque, curiosamente, cuando termine el proceso electoral en las cajas de Sevilla, el PP incrementar¨¢ notablemente su peso en ambas, testimonial en la actualidad.

Y la estrategia de erosi¨®n se concentra en Sevilla porque esta provincia es clave para el PP si quiere gobernar Andaluc¨ªa. El PSOE aventaja al PP en seis esca?os en el Parlamento auton¨®mico (52 frente a 46). De esos seis diputados de diferencia, cuatro corresponden a Sevilla (10 frente a 6), por lo que equilibrar esta diferencia es fundamental para el PP.

Despu¨¦s de que el PSOE ralentizar¨¢ el proyecto de fusi¨®n de los presidentes de las cajas por estar al margen de la ley, el PP ha comenzado a ondear la bandera del sevillanismo y explotar el discurso del agravio de la Junta a esta provincia. De ah¨ª tambi¨¦n que el segundo objetivo de su ofensiva sea el alcalde de la capital hispalense, el socialista Alfredo S¨¢nchez Monteseir¨ªn, al que el PP ha tildado de 'Judas' y 'traidor'.

La pasada semana, Jos¨¦ Manuel Mart¨ªnez Rastrojo, ex responsable de finanzas del PSOE andaluz, volvi¨® a resucitar una vieja historia: la venta de un grupo de medios de comunicaci¨®n en manos de los socialistas. Aunque el propio Mart¨ªnez Rastrojo dijo que no hab¨ªa delito alguno en la operaci¨®n, a Arenas le falt¨® tiempo para afirmar solemnemente que nac¨ªa una 'Filesa-2'.