Kostunica abre consultas para formar un nuevo Gobierno sin adelantar las elecciones

Las peleas entre pol¨ªticos apenas tienen eco entre la poblaci¨®n, que da claras muestras de apat¨ªa y desinter¨¦s, extradici¨®n de Milosevic incluida. El viceprimer ministro federal, Miroljub Labus, coment¨®, a ra¨ªz de la decisi¨®n de la conferencia de donantes de conceder una ayuda a Yugoslavia de 250.000 millones de pesetas, que los conflictos provocados por la extradici¨®n de Milosevic son s¨®lo las r¨¦plicas del terremoto y pronto llegar¨¢ la calma. Los sectores tecnocr¨¢ticos de la Oposici¨®n Democr¨¢tica de Serbia (DOS), que gobierna con mayor¨ªa absoluta en Serbia y en coalici¨®n en Yugoslavia, quieren superar cuanto antes la crisis provocada por la extradici¨®n de Milosevic y ocuparse de gestionar la econom¨ªa del pa¨ªs.

Antes de llegar a esta ansiada normalidad, queda pendiente el cierre de las heridas abiertas con la decisi¨®n de extraditar a Milosevic. La primera ser¨ªa la formaci¨®n de un nuevo Gobierno en Yugoslavia, que, por parad¨®jico que parezca, podr¨ªa ser casi una repetici¨®n del antiguo. Los montenegrinos del SNP, que acaban de anunciar su salida del Gobierno yugoslavo, parecen dispuestos a negociar su vuelta al redil. Tambi¨¦n se especula con la posibilidad de que el Partido Popular (NS), un peque?o partido de Montenegro partidario de mantener la uni¨®n con Serbia, entre en el futuro Gobierno federal, aunque no cuenta con diputados en el Parlamento federal porque el pasado 24 de septiembre boicote¨® las elecciones.

Kostunica y Djindjic siguen enzarzados en su guerra particular de declaraciones sobre la extradici¨®n de Milosevic y si el presidente de Yugoslavia sab¨ªa o no. Kostunica insiste en que nunca se mostr¨® partidario de la extradici¨®n de ciudadanos yugoslavos a La Haya, y afirma: 'Yo no deseo defenderme de las calumnias. S¨®lo quiero quitar a la poblaci¨®n las dudas que pueda tener despu¨¦s de las declaraciones de algunos individuos que tratan de hacerme decir lo que no he dicho'.

Por su parte, Djindjic replic¨® que la decisi¨®n 'no sorprendi¨® a nadie de la DOS', y a?adi¨®: 'En varias reuniones hemos decidido cada vez por unanimidad: no al aislamiento, no la vuelta atr¨¢s. Desde esta perspectiva, la decisi¨®n no ha sorprendido a nadie en la DOS'.

Seg¨²n Djindjic, las dos ¨²nicas opciones que hab¨ªa era colaborar o no con La Haya. Para Djindjic, la colaboraci¨®n significaba extraditar a los acusados, y no hacerlo era equiparse 'con Irak, el aislamiento y nuestra propia justicia apartada por completo de la mundial y la europea. Un aislamiento que Serbia tal vez pueda o no pueda resistir, pero en ese caso alguien tiene que asumir la reponsabilidad'. Coment¨® Djindjic a periodistas extranjeros que el ministro de Sanidad, Obren Joksimovic, del partido de Kostunica, estuvo presente en todos los debates del Gabinete y de vez en cuando sal¨ªa para hablar por tel¨¦fono, y ¨¦l supone que informar¨ªa al presidente yugoslavo de lo que se debat¨ªa. Se pregunta Djindjic c¨®mo es posible que Kostunica no supiese lo que estaba en marcha.

Los sondeos de opini¨®n muestran que la popularidad de Kostunica rebasa con mucho al resto de los pol¨ªticos. Un 77% de los encuestados tienen una opini¨®n positiva de Kostunica, y s¨®lo un 5%, negativa. Djindjic cuenta con un 43% a favor y 25% en contra. Al hu¨¦sped de la c¨¢rcel del tribunal, Milosevic, le apoya un 9% y lo rechaza un 73% de los encuestados.