Joane Somarriba, reina del Tour

Fabiana Luperini ten¨ªa cara de mal genio al traspasar la l¨ªnea de meta en la estaci¨®n alpina de Vaujany. Acababa de ganar su tercera etapa en el Tour femenino y la d¨¦cima en su historial, que incluye tres triunfos totales consecutivos. Pero estaba disgustada. El ¨¦xito parcial no era suficiente. Su problema no fue mirar al frente y ser la primera en divisar las c¨¢maras de la televisi¨®n, sino hacerlo hacia atr¨¢s y ver a Joane Somarriba a cuatro segundos de ella. De esa forma, la ciclista espa?ola se hab¨ªa asegurado virtualmente su segundo Tour tras salvar con ¨¦xito la etapa reina.

La italiana lo ha intentado todo a lo largo de la carrera, pero siempre ha tenido a su sombra a la vasca, que ha hecho de tripas coraz¨®n y ha superado por s¨ª misma la falta de efectivos en su equipo, el italiano Alfa Lum. La historia se repite: Luperini, Somarriba y la alemana Judith Arndt por delante o por detr¨¢s de otras compa?eras de fatigas. Luperini comprob¨® ayer que su antigua alumna, Somarriba, le resulta ahora inalcanzable. Su reinado acab¨® en 1997, con su tercer Tour. Su posterior maternidad, en 1998, fren¨® su progresi¨®n, pero no su combatividad. Su h¨¢ndicap es que Somarriba aprendi¨® r¨¢pidamente y combin¨® sus condiciones f¨ªsicas con su doctorado psicol¨®gico.

Al final, el Izoard se ascendi¨® con tranquilidad. Quedaba mucho margen para aventurarse en ataques feroces. La guerra comenz¨® en el Lautaret. Somarriba, Luperini, Arndt, Bonanomi, Polikeviciute, Lorenzoni y Ljungskog pusieron asfalto de por medio. En el descenso se les unieron Cappellotto y Boubnenkova, compa?era de Luperini. La misi¨®n de esta rusa era tirar sin desmayo en el llano para asfixiar a Somarriba. Pero ¨¦sta resisti¨®, siempre a la rueda de Luperini.

En el Vaujany la italiana se jug¨® la ¨²ltima carta. Tir¨® con fuerza de su peque?o cuerpo, lo exprimi¨® al m¨¢ximo, pero Somarriba se le peg¨® como una lapa. Era una ascensi¨®n dura pero corta, exigente pero sufrible. Luperini trepaba con el estilo cl¨¢sico de las escaladoras: ¨¢gil, el¨¢stico, suelto. Somarriba daba la sensaci¨®n de ir m¨¢s atrancada, padeciendo metro a metro, pero abrazada a una tenacidad indesmayable. S¨®lo le quedaba ese puerto para disfrutar hoy en Par¨ªs. Y lo subi¨® con los ri?ones. Al cabo, Luperini se pleg¨® a la evidencia y ambas convinieron irse relevando en un acuerdo que supon¨ªa la renuncia por parte de la espa?ola a disputar la victoria en la meta a la italiana.

Por detr¨¢s, Arndt, caminaba sola, incapaz de seguir el ritmo de las m¨¢s fuertes. Y, m¨¢s atr¨¢s, la lituana Polikevicute, eterna aspirante sin podio, sufr¨ªa despu¨¦s de haber acariciado hace unos d¨ªas un instante de gloria. Perdida en el horizonte, Longo, la reina de Francia, cargaba con una minutada en un ejercicio de humildad que la mejor ciclista de todos los tiempos sobrelleva con dificultad. El viernes, las c¨¢maras la captaron en el momento en el que se descolgaba y no pudo por menos que mostrar su desagrado por esa, en su opini¨®n, falta de tacto. La veterana corredora nunca ha ganado, desde luego, un premio a la simpat¨ªa.

Pero la historia estaba unos kil¨®metros m¨¢s arriba. All¨ª, en la meta, cuando Luperini se rindi¨® a la actitud de Somariba, frunci¨® el ce?o y reconoci¨® la imposibilidad de batir a la espa?ola, que hoy pasear¨¢ su maillot amarillo por la avenida Foch, de Par¨ªs, antes de consagrarse una vez m¨¢s como la mejor.

Clasificaci¨®n de la 13? etapa (Gillestre-Vaujany, de 135,5 kil¨®metros): 1. F. Luperini (Edilsavino), 4h 16m 27s. 2. J. Somarriba (Alfa Lum), a 5s. 3. J. Arndt (Junkers), a 30s.

Clasificaci¨®n general: 1. J. Somarriba, 39h 22m. 2. F. Luperini, a 3m 27s. 3. Arndt, a 5m 34s. 4. A. Cappellotto (Gas Sport), a 7m 23s. 5. R. Polikeviciute (Acca Due), a 8m. 6. S. Ljungskog (Mixte Aliverti), a 9m 49s. 7. S. Boubnenkova, a 12m 11s. 8. M. Lorenzini (Mixte Aliverti), a 12m 17s. 9. J. Longo (Swam), a 19m 27s. 10. R. Bonamoni (Gas Sport), a 21m 59s.