Lukashenko renueva mandato en Bielorrusia con un voto a la sovi¨¦tica
La OSCE colaborar¨¢ con Minsk pese a las irregularidades electorales
Las instituciones democr¨¢ticas internacionales y el autoritario presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, expresaron ayer su voluntad de seguir colaborando en el futuro pese a las divergencias en torno a los comicios del pasado domingo, que culminaron con la reelecci¨®n del actual l¨ªder por otros cinco a?os. Lukashenko, que dirige Bielorrusia desde 1994, obtuvo el apoyo de un 75,62% de los votantes, seg¨²n los resultados definitivos divulgados ayer. Sus contrincantes, el sindicalista Vlad¨ªmir Gonch¨¢rik y el liberal Sergu¨¦i Gaidukevich, lograron, respectivamente, un 15,39% y un 2,48% de los votos.
Gonch¨¢rik carece de capacidad de movilizaci¨®n y recursos para oponerse a un resultado que considera fraudulento, a juzgar por el exiguo grupo de j¨®venes que se manifestaron ayer en Minsk. En los comicios particip¨® un 83,85% del censo.El proceso electoral 'no cumpli¨®' con las obligaciones internacionales suscritas por Bielorrusia (el documento de Copenhague de 1990 y los requerimientos del Consejo de Europa), seg¨²n las conclusiones de la misi¨®n de 293 observadores de la Organizaci¨®n sobre Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa (OSCE). Los observadores formularon, no obstante, dos pautas de actuaci¨®n para el futuro. La primera es que en Bielorrusia est¨¢ surgiendo una 'sociedad civil pluralista'. La segunda es que 'el aislamiento' del pa¨ªs no va en inter¨¦s del pueblo bielorruso ni favorece el desarrollo de la democracia.
En lo que se refiere al proceso electoral, el fin¨¦s Kimmo Kiljunen, el jefe de la misi¨®n de observadores, enumer¨® una amplia lista de irregularidades, desde las enormes ventajas de las que goz¨® Lukashenko gracias a sus amplios poderes hasta la existencia de un r¨¦gimen pol¨ªtico que hace todo lo que puede para sofocar a la oposici¨®n.
Acoso a la oposici¨®n
Seg¨²n los observadores de la OSCE, los candidatos que desafiaban al presidente no pudieron desplegar sus campa?as, el recuento de votos careci¨® de transparencia y no se garantiz¨® la independencia de las comisiones electorales. Los observadores denunciaron adem¨¢s las presiones a las que fueron sometidos los medios de informaci¨®n independientes; entre ellas, el cierre temporal de una importante imprenta que pas¨® despu¨¦s a ser dirigida por un censor, la confiscaci¨®n o robo de equipo, el secuestro de peri¨®dicos, el cierre de locales y la detenci¨®n de periodistas. Constataron que, durante los cinco d¨ªas de votaciones anticipadas, las urnas estuvieron fuera de control de los observadores.
Bielorrusia es el ¨²nico pa¨ªs de Europa sin un rango oficial en la asamblea parlamentaria del Consejo de Europa. Sin embargo, una delegaci¨®n bielorrusa ha sido invitada a asistir a la pr¨®xima sesi¨®n de este organismo en Estrasburgo, dijo ayer Stef Goris, el jefe de esta asamblea. Por su parte, Adrian Severin, de la Asamblea Parlamentaria de la OSCE, calific¨® de 'incivilizada' la campa?a contra Hans-Georg Wieck, el representante permanente de esta organizaci¨®n en Bielorrusia.
En rueda de prensa, el presidente indic¨® que daba por terminado el periodo de beligerancia abierta con la comunidad internacional, incluida la misi¨®n de la OSCE en Minsk, y su embajador Wieck, a quien exhort¨® a trabajar de forma constructiva por Bielorrusia. Lukashenko, que el d¨ªa anterior hab¨ªa amenazado con expulsar a Wieck, acus¨® a Occidente de haberse 'equivocado' al valorar la situaci¨®n en su pa¨ªs. Sin embargo, se mostr¨® dispuesto a activar las relaciones con la Uni¨®n Europea sin condiciones previas y a dialogar con la OTAN. Lukashenko elogi¨® la democracia norteamericana, exhort¨® a la inversi¨®n occidental y llam¨® 'gran amigo' al embajador de Alemania.
Tras afirmar que la relaci¨®n con Rusia es la 'prioridad b¨¢sica' de su pol¨ªtica exterior, Lukashenko manifest¨® con cierta irritaci¨®n que deben utilizarse los mecanismos de integraci¨®n existentes entre ambos pa¨ªses, en lugar de crear otros nuevos. El presidente afirm¨® tambi¨¦n: 'Europa debe comprender que toda la base de sus materias primas est¨¢ en el Este y que el tr¨¢nsito de estos recursos depender¨¢ de Bielorrusia'.
'Cinco a?os como m¨ªnimo'
El presidente Alexandr Lukashenko, feliz por su victoria, manifest¨® ayer que se quedar¨¢ 'cinco a?os como m¨ªnimo' y no excluy¨® la posibilidad de cambiar la legislaci¨®n para prolongar su poder m¨¢s all¨¢ de ese periodo. El dominio de la situaci¨®n que el presidente exhibi¨® ayer ante sus seguidores indica que su talento ha sido subestimado por quienes le critican. Lukashenko, sin embargo, soporta mal que no le quieran, seg¨²n ha indicado en varias ocasiones este hombre de 47 a?os que se cri¨® sin padre en un entorno rural del este de Bielorrusia y que mantiene aislada a su esposa en una ciudad de provincias. Lukashenko se mostr¨® ayer dolido por el rechazo que le muestran los universitarios. El presidente, que se form¨® como maestro rural y lleg¨® a dirigir una explotaci¨®n agr¨ªcola colectiva, subray¨® el contraste entre los j¨®venes trabajadores que le respaldan y los desagradecidos estudiantes de familias humildes a quienes ¨¦l, seg¨²n dijo, ha dado una oportunidad de estudiar. Los estudiantes de provincias que temen ser expulsados de sus residencias por su actitud cr¨ªtica debieron de sentir escalofr¨ªos cuando Lukashenko dijo estar dispuesto a demostrarles que 'no necesitan otro presidente' y que va a controlar ¨¦l mismo el acceso a la Universidad. El presidente se mostr¨® descontento por los fallos pedag¨®gicos de los responsables de las instituciones de ense?anza superior. ?stos, al parecer, no han logrado asegurarle el voto de sus pupilos. Puede que a Lukashenko tampoco le gustara la actitud de los j¨®venes que se manifestaron ayer en Minsk ni los happenings preelectorales del grupo Zubr (Bisonte), que le presentaban como un psic¨®pata.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.