Vecinos de Retiro, contra las obras de construcci¨®n de un centro municipal

Las obras que la Junta Municipal de Retiro ha iniciado en una parcela ubicada entre las calles del Can Menor y del Pez Austral (barrio de La Estrella) para levantar un 'centro multifuncional' han puesto en pie de guerra a un grupo de vecinos del barrio. ?stos acusan al Ayuntamiento de construir un edificio 'ilegal'. Afirman que su estructura no respeta la distancia de separaci¨®n m¨ªnima -siete metros- con sus casas.

La concejal del distrito, Mar¨ªa Dolores Navarro, del PP, asegura que la edificaci¨®n cumple con todos los par¨¢metros legales y est¨¢ convencida de que 'no molestar¨¢' a los vecinos (unos 60). ?stos discrepan. Aparte de vulnerar la distancia de separaci¨®n, afirman que la nueva edificaci¨®n restar¨¢ luz a sus viviendas. Seg¨²n las normas urban¨ªsticas de Madrid, entre un edificio y otro debe mediar un m¨ªnimo de siete metros de separaci¨®n.

El conflicto suscitado entre estos vecinos y la Junta de Retiro se inici¨® hace un a?o, cuando supieron que el Ayuntamiento iba a crear el citado centro multidisciplinar sobre una parcela de 1.408,75 metros cuadrados cercana a sus bloques de viviendas. Entonces, los afectados denunciaron que, tal como estaba prevista la edificaci¨®n, constitu¨ªa un serio obst¨¢culo para el acceso de los bomberos en caso de incendio. La concejal Navarro atendi¨® esta queja y transform¨® el proyecto. Pero, aun as¨ª, el malestar vecinal contin¨²a. 'Parece que la idea de construir en esa parcela se ha convertido en una cabezonada de la concejal, en una obsesi¨®n', se lamenta un residente.

La asociaci¨®n vecinal, integrada por unos 60 residentes, sostiene que el centro que planea el Ayuntamiento afectar¨¢ a los inmuebles n¨²meros 4 y 8 de la calle del Pez Austral e igualmente al n¨²mero 8 de la del Can Menor.Lo que m¨¢s preocupa a estos vecinos es que el nuevo edificio quebranta la distancia m¨ªnima de separaci¨®n con sus bloques. Por ello encargaron un informe al arquitecto Jos¨¦ Horcajada ?lvarez. El informe ya est¨¢ hecho y les da la raz¨®n. El estudio de detalle de la parcela se hizo sobre una superficie de 1.408,75 metros cuadrados, si bien despu¨¦s, al medirla sobre planos, la superficie inicial ha quedado reducida a 1.231,85 metros cuadrados. Por esta raz¨®n, Horcajada se?ala en su estudio que los par¨¢metros de ocupaci¨®n y edificabilidad aplicados por el Ayuntamiento 'son excesivos'.

'Tal como est¨¢ dise?ado, me parece que el proyecto incumple algunas normas urban¨ªsticas', se?ala Horcajada. 'Yo creo que nos quieren emparedar', dice con sorna otro vecino afectado. En la parcela donde la junta levanta ya el centro multifuncional se erige, desde hace muchos a?os, una especie protegida de cedro de L¨ªbano que los vecinos pretenden defender a toda costa, porque temen que este ¨¢rbol sea arrancado al paso de las m¨¢quinas.

La edil del distrito, Mar¨ªa Dolores Navarro, promete que eso no ocurrir¨¢. 'El dise?o se ha elaborado de tal manera que no afecte a ese ¨¢rbol', subraya, y a?ade: 'La edificabilidad del recinto no se ha agotado. Inclusive ha quedado por debajo de lo que el plan establec¨ªa. Ahora s¨®lo sobresalen dos plantas, porque una de ellas ser¨¢ m¨¢s baja'.

Navarro asegura que apenas ha recibido quejas vecinales sobre su proyecto: 'Hemos tenido varias reuniones y nadie ha dicho esta boca es m¨ªa. Adem¨¢s, el edificio cumple todos los par¨¢metros y las distancias reglamentarias. Y mi obligaci¨®n es cumplir lo que establece el Plan General'. Las 'pocas' cartas con quejas que reposan en el despacho de Navarro han sido, dice, 'respondidas en su totalidad'. 'Hasta tengo tres cartas de felicitaci¨®n', asegura.

Ante un conflicto urban¨ªstico similar, dos vecinos del barrio del Pilar acudieron hace 10 a?os a los tribunales alegando la escasa distancia entre sus casas y la pared trasera del templo de Nuestra Se?ora de las Fuentes. Los vecinos aseguraban que las paredes del templo taponaban la entrada de luz solar a sus viviendas. A?os despu¨¦s, los jueces les han dado la raz¨®n y han ordenado que se derribe la parte ilegal del templo. Los jueces afirman que no cabe legalizar la parte ilegal de la iglesia, como pretende el Ayuntamiento, mediante un estudio de detalle. Pero el pleito est¨¢ ahora en manos del Tribunal Supremo.