Veteranos
Inasequibles al desaliento, los dirigentes de Izquierda Unida anuncian la vig¨¦sima renovaci¨®n de su formaci¨®n. Bajo la etiqueta de una Nueva Convocatoria por Andaluc¨ªa pretenden recomponer un llamado 'bloque social alternativo' que se convierta en 2003 en una alternativa de poder al PSOE.
No voy a negar ni quitar m¨¦rito a ese af¨¢n izquierdista por aparecer como algo distinto a la pol¨ªtica y al partido de Chaves, aquejados de un profundo anquilo-samiento que da el estar dos d¨¦cadas montados en coche oficial. Sin embargo, hagamos constar que estos rojos de IU siempre sacan de la chistera el mismo conejo. Entre todo el prolijo discurso de esta izquierda andaluza varias palabras constituyen su ¨²nico armaz¨®n sem¨¢ntico: alternativa, poder, convocatoria. Todo el lote de palabras cargadas de potentes valores de renovaci¨®n pol¨ªtica se fueron al garete en cortos momentos hist¨®ricos. Uno, cuando IU dej¨® pasar la oportunidad ¨²nica de acordar un gobierno y un programa nuevo con el PSOE andaluz entre 1994 y 1995, prefiriendo los arrumacos de Arenas; dos, cuando en la ¨²ltima campa?a electoral Antonio Romero dej¨® atr¨¢s su ancestral antisocialismo y se dedic¨® a cortejar sin pudor a Manuel Chaves.
De nuevo atacan con el discurso alternativo buscando aliados y masa cr¨ªtica. De momento hay que esperar y ver c¨®mo se desarrollan las cosas. Valderas y Caballero parece que han dejado atr¨¢s sus enfrentamientos y se ponen de acuerdo en el proyecto. El prusiano Meyer tambi¨¦n est¨¢ por la labor, o lo que es lo mismo, Alcaraz avala el proyecto. La foto tambi¨¦n nos deja ver a otros dirigentes (Vaquero, Recio, etc¨¦tera) apoyando la declaraci¨®n. Todos son viejas caras de la izquierda miniparlamentaria de Andaluc¨ªa. Por delante de ellos han pasado Breznev, Chernenko, Gorbachov y Yeltsin; Reagan, Bush y Clinton; Carrillo, Iglesias y Anguita, Gonz¨¢lez y Almunia; Escuredo y Borbolla y tantos m¨¢s. S¨®lo Zarr¨ªas y Caballos les hacen frente en veteran¨ªa y trienios.
Lo cual nos lleva a la pregunta inevitable: ?Cu¨¢ndo pensar¨¢n renovar no s¨®lo el discurso sino tambi¨¦n las caras de la global alternativa?
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