'No creo que nos vayan a flaquear los ¨¢nimos', dice un magistrado

Por encima del dolor por el asesinato de un compa?ero y de la exigencia de medidas de protecci¨®n eficaces, en el ¨¢nimo de los jueces y fiscales del Pa¨ªs Vasco prevalec¨ªa ayer la decisi¨®n de continuar en sus puestos. No por un acto de hero¨ªsmo, sino como compromiso con el Estado de Derecho. Unos expresaron esta determinaci¨®n en privado, aun reconociendo que son sensibles a la amenaza terrorista, y otros lo hicieron en p¨²blico, tras concentrarse en el Palacio de Justicia de Bilbao.

'Yo no creo que vayan a flaquear los ¨¢nimos o vaya a haber una desbandada', manifest¨® el magistrado del Tribunal Supremo Joaqu¨ªn Gim¨¦nez, ex presidente de las audiencias provinciales de Bilbao y San Sebasti¨¢n. Gim¨¦nez form¨® parte, con Juan Alberto Belloch, Elisabette Huertas y otros, del grupo de jueces progresistas que en los duros a?os ochenta contribuy¨® a asentar y prestigiar la justicia democr¨¢tica en Euskadi y conoce de primera mano la experiencia de estar en la diana. Por eso reclama el respaldo de la sociedad y de las instituciones vascas al sistema judicial, frente a los intentos por deslegitimarlo.

Ana Iracheta, su sustituta al frente de la Audiencia de Bilbao, asegur¨® que los jueces van a seguir trabajando 'todav¨ªa con m¨¢s firmeza'. Por su parte, el fiscal jefe de ?lava, Alfonso Aya, apel¨® a la responsabilidad de sus compa?eros de la fiscal¨ªa y la judicatura.

'Tenemos que seguir aqu¨ª', recalc¨®, antes de reconocer que el asesinato de Lid¨®n no va a formentar las ya escasas vocaciones judiciales en el Pa¨ªs Vasco ni el atractivo de esta comunidad como destino. De hecho, es la autonom¨ªa con m¨¢s plazas judiciales vacantes y la de mayor movilidad.

Movilidad y vacantes

El pasado a?o hubo que recurrir a 91 jueces sustitutos y 30 magistrados suplentes para cubrir vacantes en las 190 plazas que hay en Euskadi. S¨®lo en el a?o 2000 se produjeron 19 vacantes, debido en gran medida al tenso clima pol¨ªtico y social.

'Supongo que habr¨¢ gente que quiera marcharse, pero esperemos que habr¨¢ un grupo fundamental y grande que quiera seguir manteni¨¦ndose aqu¨ª, porque esto hay que sacarlo entre nosotros', se?ala Aya.

Esto es, como apunta Iracheta, es 'seguir garantizando los derechos de todos los ciudadanos'. Incluso de 'quienes est¨¢n en contra del Estado de Derecho', precisa Joaqu¨ªn Gim¨¦nez.

Entre los jueces m¨¢s curtidos, unos vascos de nacimiento y otros de adopci¨®n, se compart¨ªa ayer la sensaci¨®n de haber regresado a los 'a?os de plomo' y un cierto disgusto por considerar que el recelo del nacionalismo en el Gobierno ante un poder judicial que no siente como 'propio' les ha dejado m¨¢s desamparados frente a la amenaza terrorista.