Bajo el s¨ªndrome del 'efecto domin¨®'
El contagio de la crisis argentina ha sido asumible hasta ahora, pero podr¨ªa agravarse
La moratoria de la deuda y la devaluaci¨®n en Argentina no han producido a¨²n el temido efecto domin¨® sobre el resto de la regi¨®n. Tal como preve¨ªa la mayor¨ªa de los analistas, la agudizaci¨®n de la situaci¨®n de la tercera econom¨ªa latinoamericana en diciembre no arrastr¨® a sus vecinos. S¨®lo provoc¨® da?os en la otra orilla del Atl¨¢ntico, en la Bolsa de Madrid. Sin embargo, si la depreciaci¨®n del peso se descontrola y se acent¨²a la inestabilidad en Argentina, Latinoam¨¦rica terminar¨¢ sufriendo.
UBS Warburg dice que Brasil crecer¨¢ el 2,5% en 2002, siempre que no se agrave la crisis argentina y pierda las elecciones el candidato izquierdista
Venezuela no se contagiar¨¢, pero sus males son similares: crisis pol¨ªtica, exceso de gasto, fuga de capitales y una moneda sobrevaluada
No es que Argentina, el modelo de las reformas de mercado en la d¨¦cada pasada, haya ca¨ªdo sin contagiar a nadie. Sus vecinos Brasil y Chile padecieron durante el segundo y tercer trimestres de 2001. El gigante suramericano necesit¨® un cr¨¦dito de 15.000 millones de d¨®lares del Fondo Monetario Internacional (FMI) para evitar una crisis de su deuda (236.000 millones de d¨®lares) similar a la que castigaba a Argentina. Su prima de riesgo pa¨ªs creci¨® al 12% y el d¨®lar se dispar¨® de 2 reales a 2,85. En Chile, mientras tanto, el peso se depreci¨® el 25% entre octubre de 2000 y octubre de 2001, por lo que el d¨®lar lleg¨® a cotizar a 7,20.
'La ca¨ªda de Argentina ya estaba descontada en los mercados regionales', se?ala el analista Mat¨ªas Silvani, del banco UBS Warburg. A partir de noviembre, cuando Argentina reestructur¨® su deuda local, sus vecinos comenzaron a desmarcarse. La prima de riesgo de Brasil ahora est¨¢ por debajo del 9%, mientras el d¨®lar ha bajado a 2,35 reales. En Chile, la moneda de EE UU retrocedi¨® a fines de 2001 a 6,50 pesos y volvi¨® a subir levemente tras la suspensi¨®n de pagos de Argentina a 6,65. Tambi¨¦n se devalu¨® el peso uruguayo.
Las relaciones comerciales se modificar¨¢n tras la depreciaci¨®n del peso argentino, que permaneci¨® atado al d¨®lar casi once a?os. Las importaciones de Argentina, que ven¨ªan cayendo por la recesi¨®n, tendr¨¢n que afrontar ahora, adem¨¢s, un tipo de cambio desfavorable. Por contra, se abaratar¨¢n sus exportaciones. Las ventas de Brasil, socio mayor de Mercosur, a Argentina, el segundo en importancia, suponen el 9,5% de las totales al exterior, tras caer el 7,2% en los ocho primeros meses de 2001. A Argentina se destinan tambi¨¦n el 6,5% de las exportaciones de Paraguay y el 15,5% de las de Uruguay.
La devaluaci¨®n del peso no inquiet¨® al real y el Gobierno de Brasilia reaccion¨® con euforia. Funcionarios y economistas de Brasil ven¨ªan insistiendo en que Argentina deb¨ªa imitarlos y dejar flotar su tipo de cambio, como ellos hicieron en 1999. La discusi¨®n sobre el r¨¦gimen monetario deriv¨® en enfrentamientos, sobre todo por las cr¨ªticas del ex ministro argentino Domingo Cavallo contra la depreciaci¨®n del real. El comercio en Mercosur (al que est¨¢n asociados Chile y Bolivia) cay¨® en 2001 un 10%, pero la crisis terminal del bloque empez¨® a disiparse a partir de los estrechos v¨ªnculos que est¨¢ tejiendo el presidente argentino, Eduardo Duhalde, con su par brasile?o, Fernando Henrique Cardoso.
La crisis argentina no le impidi¨® a Brasil salir a los mercados externos para financiarse. A principios de este a?o recolect¨® all¨ª 1.250 millones de d¨®lares, 250 millones m¨¢s de lo previsto. La Comisi¨®n Econ¨®mica para Am¨¦rica Latina y el Caribe (CEPAL) calcula que en 2001 Brasil creci¨® el 1,7% y en 2002 llegar¨¢ al 2,5% por la mejora de sus exportaciones y la recuperaci¨®n de la demanda interna. No obstante, el nuevo informe de CEPAL advierte de que la evoluci¨®n brasile?a depende de una bajada del tipo de inter¨¦s del actual 18%, que s¨®lo ser¨¢ posible si el real se mantiene estable. Por otra parte, el sector tur¨ªstico dejar¨¢ de percibir 156 millones de d¨®lares de los viajeros argentinos. UBS Warburg pronostica que Brasil crecer¨¢ el 2,5% en 2002 y el real terminar¨¢ el a?o a 2,60 unidades por d¨®lar, siempre y cuando no se agrave la crisis argentina y pierda en las elecciones presidenciales de octubre el candidato izquierdista Luiz Inacio Lula da Silva.
En Chile y Uruguay tambi¨¦n temen la ca¨ªda de ingresos del turismo desde Argentina, as¨ª como una eventual invasi¨®n de productos de ese pa¨ªs. Junto con M¨¦xico, son los ¨²nicos pa¨ªses latinoamericanos cuyas deudas tienen grado de inversi¨®n, lo que significa que son confiables en su capacidad de pago. De todos modos, Uruguay dispuso nuevos ajustes fiscales para compensar la recesi¨®n que se acentuar¨¢ por contagio de Argentina.
Riesgo
'La evoluci¨®n de Argentina, que est¨¢ por verse, determinar¨¢ el futuro de los mercados latinoamericanos', dice Silvani. 'Si el d¨®lar llega a cotizarse de dos a tres pesos, habr¨¢ m¨¢s contagio. Ese escenario no ha sido descontado por los vecinos. Si el peso y la inflaci¨®n se mantienen estables, y la econom¨ªa argentina se desdolariza, los mercados reaccionar¨¢n favorablemente'.
Venezuela no se contagiar¨¢ de Argentina, pero sus males son similares: crisis pol¨ªtica -enfrentamiento entre el presidente Ch¨¢vez y la oposici¨®n-, exceso de gasto p¨²blico -financiado por la recuperaci¨®n del precio del crudo-, fuga de capitales y una moneda sobrevaluada. UBS Warburg prev¨¦ que su PIB caer¨¢ en 2002 el 1,5%, mientras CEPAL calcula que crecer¨¢ m¨¢s del 2%, frente al 2,8% de 2001. Si la suerte de Venezuela depende del valor del barril de crudo, la de M¨¦xico, con crecimiento nulo en 2001, est¨¢ ligada a la econom¨ªa norteamericana. Diversas fuentes calculan que se expandir¨¢ el 1% este a?o.
Latinoam¨¦rica, seg¨²n CEPAL, tambi¨¦n crecer¨¢ un modesto 1,1%, frente al 0,5% de 2001.
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