Milosevic y Costa frenan al Rayo

El dicho de a entrenador nuevo victoria segura se cumpli¨® a rajatabla para los intereses del Zaragoza. Con un aire renovado y con la firme decisi¨®n de olvidar todos los problemas que hasta la fecha le han perseguido, los ma?os lograron superar las dificultades que durante todo el encuentro le present¨® el Rayo. Y lo hicieron en gran medida gracias a Milosevic. El balc¨¢nico ha vuelto a Zaragoza del mismo modo en el que se march¨®, haciendo goles.

Pese a la situaci¨®n de ambos equipos en la clasificaci¨®n, el partido result¨® abierto y entretenido. A eso contribuy¨® la actitud del Rayo, que no escondi¨® sus armas en ning¨²n momento y puso en muchos aprietos al Zaragoza. Los franjirrojos se adelantaron en el marcador en una espectacular conexi¨®n entre los dos bosnios del equipo, Baljic y Bolic, y estuvieron muy bien plantados sobre el campo durante todo el partido. Sin embargo, era palpable que la actitud del Zaragoza se diferenciaba en mucho a la de otras veces. Esta vez no agach¨® la cabeza, sino que a fuerza de tes¨®n trat¨® de darle la vuelta a un partido que se le hab¨ªa complicado. Eran los br¨ªos que le daban nombres nuevos como Costa o Milosevic, sumados a la oportunidad de dejar descolgado a un rival directo.

Pero tuvo que ser una jugada pol¨¦mica la que permitiera empatar al conjunto ma?o, una dudosa acci¨®n que el ¨¢rbitro interpret¨® como cesi¨®n y luego transform¨® Acu?a. A partir de ese momento el encuentro se convirti¨® en un vaiv¨¦n de ocasiones que s¨®lo la calidad de Milosevic consigui¨® desequilibrar de un lado.

Fue tambi¨¦n la ocasi¨®n perfecta para que los ¨¢nimos de la hinchada local volviesen a templarse despu¨¦s de una temporada de grandes sobresaltos. Muestra de ello es la ovaci¨®n con la que despidi¨® a su equipo.