Los directivos de Enron falsearon los resultados para enriquecerse
Los responsables comparecer¨¢n esta semana ante la comisi¨®n del Congreso que investiga el caso
En los ¨²ltimos cinco a?os, Enron alent¨® una cultura de corrupci¨®n que se extend¨ªa a todos los niveles de la empresa e hizo millonarios a unos cuantos empleados en detrimento de sus accionistas. Son las conclusiones de un informe interno de la compa?¨ªa hecho p¨²blico el pasado s¨¢bado y que revela la amplitud de los tejemanejes financieros que causaron finalmente el colapso del gigante energ¨¦tico. Hoy sus principales responsables empiezan a comparecer ante el Congreso en una investigaci¨®n que podr¨ªa salpicar a la Casa Blanca.
'El enriquecimiento de los empleados, la falta de mecanismos de control y vigilancia adecuados y graves errores de contabilidad en el contexto de una cultura de empresa que alentaba llegar hasta el l¨ªmite' causaron el colapso de Enron, que se declar¨® en bancarrota el pasado 2 de diciembre. La que fuera s¨¦ptima compa?¨ªa norteamericana 'particip¨® en transacciones de escasa sustancia econ¨®mica y expuso de forma enga?osa sus resultados financieros', asegura el informe.
Las malversaciones contables empezaron en 1997. Se llevaban a cabo antes de la presentaci¨®n de resultados a los accionistas. En total, Enron infl¨® sus beneficios en casi 1.000 millones de d¨®lares (1.100 millones de euros) en tan s¨®lo un a?o (de septiembre de 2000 a septiembre de 2001), el doble de lo que se pens¨® en un principio. El documento de m¨¢s de 200 p¨¢ginas, elaborado por un comit¨¦ interno de la compa?¨ªa, designado el pasado octubre, fue hecho p¨²blico en la tarde del s¨¢bado en el bufete de abogados en Nueva York que se ocupa de la quiebra de Enron.
Red de corrupci¨®n
El director financiero de Enron, Andrew Fastow, y el que fuera presidente ejecutivo de la compa?¨ªa, Jeffrey K. Skilling -que dimiti¨® antes de conocerse el esc¨¢ndalo-, manejaban la red de corrupci¨®n. Fastow, en especial, estaba a cargo de las sociedades instrumentales que serv¨ªan para inflar artificialmente el balance de la empresa y de paso convertir en millonarios a los implicados. Se estima que Fastow gan¨® unos 30 millones de d¨®lares en estas operaciones. En una de ellas consigui¨® convertir una modesta inversi¨®n de 25.000 d¨®lares en una ganancia de 4,5 millones en tan s¨®lo dos meses. Skilling por su parte, 'aprob¨® una transacci¨®n para cubrir las p¨¦rdidas significativas' de la empresa, de las que se enter¨® en marzo de 2000, a?o y medio antes de que estallara el esc¨¢ndalo. Fastow y Skilling deben comparecer esta semana ante el Congreso.
'El Departamento de Justicia debe decidir si se trata de conductas criminales', asegur¨® ayer el senador Byron Dorgan, presidente del subcomit¨¦ de Comercio del Senado. El senador Billy Tauzin, presidente del Comit¨¦ de Energ¨ªa y Comercio de la C¨¢mara de Representantes, dijo que el informe demostraba que no s¨®lo se trataba de corrupci¨®n, sino directamente de fraude.
El informe dice que Kenneth Lay, el tan vituperado ex presidente de Enron, estaba al corriente de todo y dej¨® florecer la cultura de corrupci¨®n a todos los niveles. Arthur Andersen, la empresa auditora que encubri¨® los tejemanejes de Enron, tambi¨¦n sale muy malparada del informe. Juzga su actuaci¨®n inexplicable. Andersen habr¨ªa cobrado 5,7 millones en comisiones por las auditor¨ªas de las sociedades instrumentales controladas por Fastow.
Por su parte la auditora Arhtur Andersen anunci¨®, en un intento por mejorar su imagen, el fichaje de un ex presidente de la reserva federal, Paul Volcker, y a?adi¨® que no ofrecer¨¢ algunos servicios de consultor¨ªa a los clientes que audite.
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