Duhalde suspende con un decreto las demandas legales contra el 'corralito'

El contragolpe del Ejecutivo argentino a cargo del presidente Eduardo Duhalde culmin¨® ayer con un uno-dos a la mand¨ªbula del Supremo: el primer decreto mantuvo en pie el corralito bancario alrededor de los dep¨®sitos en los bancos a pesar del fallo de la Corte que lo declar¨® 'inconstitucional', y el segundo, publicado ya en el Bolet¨ªn Oficial y por tanto vigente, suspende por seis meses 'la tramitaci¨®n de todos los procesos judiciales, medidas cautelares y ejecutorias' contra las nuevas medidas econ¨®micas anunciadas el pasado domingo por el ministro de Econom¨ªa, Jorge Remes Lenicov.

'No soy un presidente d¨¦bil', hab¨ªa advertido Duhalde poco despu¨¦s de que el Supremo golpeara duro el pasado viernes. En uso de sus facultades, el jefe del Estado, 'por razones de necesidad y urgencia', no s¨®lo mantiene las restricciones sobre el derecho a la propiedad del dinero, sino que ahora tambi¨¦n congela el reclamo, y la temida avalancha de demandas que se supon¨ªa pod¨ªan presentarse ante los tribunales con la esperanza de que las sentencias obligaran a la restituci¨®n de fondos, queda postergada, al menos por ahora.

?Resignaci¨®n o cacerolada? Resignaci¨®n y cacerolada. La pesificaci¨®n de la econom¨ªa confirmada por el ministro Remes Lenicov favorece a grandes y peque?os deudores, que devolver¨¢n sus pr¨¦stamos a la paridad uno a uno del peso con el d¨®lar.

El retiro de fondos sin l¨ªmites para los que cobran salarios, indemnizaciones por despidos, seguros por accidentes de trabajo y retroactivos de jubilaciones, tambi¨¦n los t¨ªtulos voluntarios a m¨¢s largo plazo de devoluci¨®n que pueden suscribir los que todav¨ªa esperan recuperar los d¨®lares originales que depositaron, esas y otras medidas calman en parte a la mayor¨ªa de los ahorradores y les conduce lentamente a la resignaci¨®n. Pero otros resisten todav¨ªa y las asambleas de vecinos de Buenos Aires convocan ya a la cacerolada del viernes en las esquinas, con marcha espont¨¢nea hacia la Plaza de Mayo.

La agenda del conflicto social se mantiene. Hoy los piqueteros, grupos de choque de las organizaciones de desocupados, anuncian cortes de ruta, concentraciones y marchas. Para el mi¨¦rcoles est¨¢ prevista la cacerolada contra los bancos, el jueves la que le toca en particular a la Corte Suprema de Justicia y la del viernes es contra todos. Hasta el propio Duhalde admiti¨® que nadie festejar¨ªa ' las medidas econ¨®micas' adoptadas.

El Ejecutivo se dispone a domar, como un jinete sobre un caballo salvaje, la cotizaci¨®n del d¨®lar para impedir que se dispare. El precio comenzar¨¢ a flotar ma?ana, aunque su libertad ser¨¢ relativa porque el banco central est¨¢ dispuesto a vender parte de sus 14.000 millones de d¨®lares de reservas para impedir que se dispare y se desate a su vez una inflaci¨®n galopante. Al cumplirse un mes de la devaluaci¨®n del peso, que durante 10 a?os se mantuvo en paridad uno a uno con el d¨®lar, en las cuevas del centro de Buenos Aires se vend¨ªan ayer a dos pesos cada d¨®lar a pesar de que reg¨ªa el feriado bancario y cambiario impuesto hasta hoy por el banco central. Los analistas estiman que podr¨ªa llegar a los tres pesos en poco tiempo. Los funcionarios del equipo econ¨®mico conf¨ªan en que los exportadores liquidar¨¢n m¨¢s de 5.000 millones de d¨®lares que a¨²n retienen. El banco central oblig¨® a los bancos a entregar los d¨®lares que a¨²n ten¨ªan y les impide ahora operar como casa de cambios para evitar conflictos con los clientes, que les acusaban de vender a 1,40 pesos y devolver los ahorros en d¨®lares a un peso.

Las p¨¦rdidas de los bancos, que van a cobrar sus cr¨¦ditos en d¨®lares a la paridad uno a uno con el peso y deben devolver los dep¨®sitos en d¨®lares a 1,40 pesos por d¨®lar, ser¨¢n cubiertas en parte por la conversi¨®n a pesos y a 1,40 por d¨®lar de los 50.000 millones de d¨®lares que poseen en t¨ªtulos de la deuda p¨²blica, garantizados con la recaudaci¨®n de impuestos tras el canje de bonos del pasado mes de noviembre.

En los balances, esos 50.000 millones de d¨®lares se considerar¨¢n como 70.000 millones de pesos. Pero el ministro de Econom¨ªa se comprometi¨® adem¨¢s a compensar tambi¨¦n el desequilibrio en las cuentas de aquellos bancos que tomaron pr¨¦stamos en el exterior en d¨®lares para ofrecer cr¨¦ditos en Argentina y reciben ahora pesos en devoluci¨®n. Ese desfase, estimado seg¨²n fuentes bancarias en m¨¢s de 10.000 millones de d¨®lares, ser¨¢ cubierto con la emisi¨®n de otro bono de deuda p¨²blica garantizado por el Estado.