El cubano Jes¨²s D¨ªaz narra la aventura de un exiliado

El cineasta y escritor cubano Jes¨²s D¨ªaz cuenta la historia real de un compatriota en su sexta novela, Las cuatro fugas de Manuel (Espasa). El protagonista, Manuel Desd¨ªn, es un joven f¨ªsico cubano que estudia en la Universidad de J¨¢rkov, Ucrania, y que decide fugarse a Occidente durante el verano de 1991, cuando el Gobierno de Fidel Castro le exige regresar a la isla debido a su incorrecto comportamiento pol¨ªtico. 'El relato', explica Jes¨²s D¨ªaz, 'no es tanto la historia de un exilio -que es lo que comienza cuando termina el libro- como la lucha por encontrar un lugar en el mundo donde poder exiliarse'.

Concebida como una novela de aventuras, Las cuatro fugas de Manuel narra las tribulaciones de un brillante investigador que consigue llegar a Suiza (en un tren llamado Franz Kafka) gracias a la cooperaci¨®n de uno de sus profesores. En Basilea se le niega el asilo pol¨ªtico y tras ser repatriado a la Uni¨®n Sovi¨¦tica vuelve a intentar la huida a trav¨¦s de la frontera con Finlandia sin lograrlo. Trasladado al consulado cubano en Leningrado, Manuel escapa casi por casualidad y con la ayuda de Ayinray, una muchacha que se enamora de ¨¦l, organiza su marcha a Polonia, donde sobrevive durante alg¨²n tiempo sin mayores perspectivas. Su cuarto proyecto de fuga incluye un viaje a Berl¨ªn, su estancia en dos campos de refugiados y la colaboraci¨®n con una organizaci¨®n de la mafia rusa dedicada al contrabando de armas.

Ser¨¢ en Berl¨ªn donde Manuel entrar¨¢ en contacto con la familia del autor, que en ese momento tambi¨¦n est¨¢ recorriendo su propio camino hacia el exilio, cuyo t¨¦rmino ser¨ªa Madrid. 'Mis hijos ganaron un hermano; mi esposa, un amigo; Manuel, una familia, y yo, un hijo', cuenta Jes¨²s D¨ªaz.

La novela invita a reflexionar sobre lo que ha supuesto para Occidente la existencia y desaparici¨®n del bloque socialista. 'Esta amenaza estimul¨® en Europa las pol¨ªticas redistributivas que ahora est¨¢n bajo cuesti¨®n. El muro de Berl¨ªn imped¨ªa huir del bloque socialista. Cuando Manuel intenta llegar a Occidente en 1991, el tel¨®n de acero ya no existe, en su lugar se han levantado muchos muros invisibles que impiden la entrada'.