Golpe de efecto azulgrana

El Bar?a lleg¨® a Vitoria con la mosca detr¨¢s de la oreja, receloso de sus fuerzas, dubitativo por su crisis de juego, necesitado de un golpe de efecto. Los m¨²ltiples aspectos que se le objetaban -que si le falta un p¨ªvot, que si Navarro no cuenta con minutos, que si Okulaja y Karnisovas est¨¢n bajos de forma...- alcanzaban de lleno a algo que siempre le ha caracterizado: su buen hacer defensivo. Para disipar las dudas, no pod¨ªa reafirmarse de mejor manera que sometiendo con pu?o de hierro a un Estudiantes que s¨®lo se dedic¨® a pasar como pudo el mal trago.

Finalmente, el Bar?a desnaturaliz¨® el partido con una abrumadora salvaguarda de su aro, cerrado bajo siete llaves por un disuasorio Due?as. Cuando se halla en m¨ªnimas condiciones f¨ªsicas, el gigante azulgrana se convierte en un parapeto que dota a su equipo de una ascendencia a la que resulta dif¨ªcil hacer frente. Y Estudiantes, tan acostumbrado a vivir de segundas opciones, de su garra, se desmoron¨®: 34 rebotes en total por 56 de su adversario. As¨ª, la igualdad dur¨® poco. El abrumador traj¨ªn del Bar?a le dej¨® seco.

Estudiantes ya hab¨ªa tenido much¨ªsimos problemas para anotar con continuidad y su porcentaje era irrisorio en el descanso: 8 canastas en 33 lanzamientos. S¨®lo los sutiles escarceos de Carlos Jim¨¦nez, excepcional como ante el Madrid, le mantuvieron en el partido (37-30). Pero la que se le vino encima en el tercer cuarto fue para salir corriendo. Desactivados sus p¨ªvots, perdi¨® toda perspectiva ofensiva y cay¨® en el abismo con un parcial de 24-7.

En aquel momento fue cuando qued¨® en evidencia la horfandad del equipo de Pepu Hern¨¢ndez en cuanto a extranjeros se refiere: Garnett se qued¨® parado en los puntos que anot¨® de carrerilla al principio y Patterson, fuera de foco, roz¨® lo pat¨¦tico, m¨¢s o menos como el comunitario Jasen. Demasiadas facilidades para un Bar?a que amarr¨® perfectamente a Felipe Reyes y que se mostr¨® muy a gusto en el ataque, con buenas fases de Rentzias, Okulaja, Karnisovas... Cuando no era uno, era el otro, porque, en definitiva, la impotencia ofensiva de Estudiantes acab¨® contagiando todo su juego.

Para redondear, al Bar?a s¨®lo le sobr¨® una de las ¨²ltimas acciones, en las que Navarro resbal¨® y volvi¨® a sufrir un esguince en el tobillo izquierdo, el mismo que se lesion¨® recientemente. A la espera de que baje la inflamaci¨®n para conocer el alcance de la torcedura, su participaci¨®n en la final de hoy es dudosa.