El empleo femenino aguanta la recesi¨®n

Las mujeres conservan con mayor facilidad los empleos indefinidos en comparaci¨®n con los hombres. ?sta es, al menos, la conclusi¨®n que se desprende de un estudio realizado por el catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona, Josep Oliver, y la empresa de trabajo temporal Manpower. Aunque en valores absolutos, la tasa de temporalidad en el colectivo femenino es superior a la masculina -34,1% frente al 29,9%- la diferencia se ha reducido notablemente desde 1991, fecha en la que esta cifra era superior en 9 puntos. Adem¨¢s, seg¨²n el catedr¨¢tico, la experiencia de la crisis sufrida entre 1992 y 1994, que destruy¨® empleos indefinidos masculinos pero que pr¨¢cticamente no afect¨® al empleo en las mujeres, 'da pie a pensar que ¨¦stas, quiz¨¢ por el alto grado de formaci¨®n que presentan, son capaces de aguantar mejor la recesi¨®n'.

En valores absolutos, la tasa de temporalidad sigue siendo menor en el colectivo masculino que en el femenino

Josep Oliver cree que el alto grado de formaci¨®n de las mujeres influye en su mejor evoluci¨®n relativa en el empleo

De hecho, una de las caracter¨ªsticas de la formaci¨®n en los ¨²ltimos a?os es el constante aumento de mujeres licenciadas, y numerosos estudios apuntan a que el nivel educativo es una de las mayores salvaguardas del empleo. Recientemente, un informe del Consejo Econ¨®mico y Social pon¨ªa de manifiesto que los universitarios tienen una tasa de desempleo un 38% inferior a la media nacional.

Otro dato que favorece a las mujeres es que, de los 3,7 millones de empleos creados entre 1987 y 2001, un 61% ha sido ocupado por ellas, mientras que del total de 2,4 millones de empleos temporales creados en ese mismo periodo, el colectivo femenino aport¨® un porcentaje sustancialmente inferior, un 46,6%.

Oliver se?ala que, en l¨ªneas generales, las mujeres ocupan trabajos cualificados y apenas est¨¢n presentes en sectores donde la temporalidad es muy elevada, como es el caso de la construcci¨®n, por ejemplo. En su opini¨®n, el mercado de trabajo espa?ol es capaz de soportar ahora mejor que hace unos a?os los reveses econ¨®micos: 'Durante 1992 y 1993 se destruyeron muchos puestos indefinidos, mientras que ahora, si comparamos el tercer trimestre de 2000 con el mismo periodo de 2001, observamos que no se est¨¢ produciendo una destrucci¨®n neta del empleo', asegura.