Aimar lanza al Valencia a por la Liga
El equipo de Ben¨ªtez se exprime para derrotar merecidamente a un Deportivo muy conservador
Por ambici¨®n, por car¨¢cter y por f¨²tbol, el Valencia derrib¨® ayer a un Deportivo muy conservador. Le cost¨® much¨ªsimo al cuadro de Ben¨ªtez, que actu¨® pasado de tensi¨®n en muchos momentos, pero lo consigui¨® gracias a su gran estrella, Pablito Aimar, convertido en el jugador m¨¢s decisivo de la Liga. Marc¨® de falta tras un rechace de Duscher. No hay nadie ahora tan fresco como el media punta argentino para resolver un choque que no haya por donde descerrajarlo. Es un futbolista imprevisible, tenaz y hambriento de gloria. Justo lo que necesitaba el forzudo Valencia para llevarse un campeonato despu¨¦s de 31 a?os: unas buenas dosis de talento. Llega lanzado el cuadro de Ben¨ªtez a este tramo final, con un ritmo superior a todos sus rivales, como advirti¨® en su d¨ªa Olabe, el t¨¦cnico de la Real. De modo que ayer acab¨® por asfixiar al Deportivo, incapaz en muchas fases de salir de su propio campo.
VALENCIA 1| DEPORTIVO 0
Valencia: Ca?izares; Curro Torres, Djukic, Ayala, Carboni; Rufete, Albelda, Baraja, Kily Gonz¨¢lez (Vicente, m. 82); Aimar (S¨¢nchez, 81) y Angulo (Mista, m. 65). Deportivo: Molina; Scaloni, Naybet, Romero, Capdevila; Duscher (Emerson, m. 73), Sergio; V¨ªctor (Pandiani, m.72), Valer¨®n, Fran; y Makaay. Goles: 1-0. M. 70. Falta que lanza enroscada Aimar, el bal¨®n da en Duscher y se convierte en gol al enga?ar a Molina. ?rbitro: Mejuto Gonz¨¢lez. Amonest¨® a Duscher, Curro Torres, Sergio, Fran, Rufete, V¨ªctor, Capdevila, Ayala y Pandiani. Unos 53.000 espectadores en Mestalla. Lleno.
Cierto que el equipo de Irureta acus¨® las bajas (sobre todo la de Mauro Silva), pero vivi¨® demasiado feliz con el empate y acab¨® pag¨¢ndolo. La superioridad f¨ªsica y mental del Valencia fue implacable y nadie la reflej¨® tan bien como Albelda, que acab¨® el partido como si acabara de empezarlo: con una potencia descomunal. Por si fuera poco, Baraja volvi¨® a demostrar que est¨¢ en vena, tanto en la direcci¨®n del juego como en la finalizaci¨®n, a pesar de que su fant¨¢stica chilena de ayer la repeliera el travesa?o. Baraja acab¨® imponi¨¦ndose a Sergio en uno de los duelos m¨¢s bonitos de la noche. El otro fue el que mantuvieron Valer¨®n y Ayala, que encim¨® al medio punta canario y apenas lo dej¨® maniobrar.
Eso s¨ª, el Valencia jug¨® con un exceso de revoluciones, lo que le rest¨® precisi¨®n en los ¨²ltimos metros. Demasiada adrenalina. Lleg¨® mucho y bien ante Molina, pero una vez ah¨ª le entraba el tembleque. Remates a romper que los recog¨ªa la desesperada grada. Su despliegue f¨ªsico, como de costumbre, fue extraordinario. Pero no hall¨® la manera de hincarle el diente en la primera parte al Deportivo, entre otras cosas porque Romero, aun en la inc¨®moda demarcaci¨®n de central obligado por las bajas, pudo con Angulo, que ni siquiera pudo imponer su fortaleza f¨ªsica. Despu¨¦s sali¨® Mista y el Valencia gan¨® muchos recursos. El Depor concentr¨® casi toda su energ¨ªa en defenderse y lo hizo con inteligencia, lo que sac¨® de sus casillas a la hinchada valencianista, frustrada en el intento.
El cuadro de Irureta, en efecto, estuvo a verlas venir, a provocar el desgaste de su fogoso adversario, pero no por ello dej¨® de mostrar detalles de sus grandes centrocampistas. Aqu¨ª un toquecito de Fran, all¨¢ una potente salida de Sergio, un cambio de juego de V¨ªctor o una escapada de Valer¨®n entre una mara?a de piernas rivales. Un aviso para el Valencia, que no deb¨ªa despistarse ni un instante. En ese sentido, volvi¨® como guardi¨¢n defensivo Ayala, tras un mes de lesi¨®n, y lo hizo como estaba como antes de marcharse: muy sobrado en todas las facetas.
Baraja destap¨® la segunda parte con una dificil¨ªsima chilena: de espaldas a la porter¨ªa, el centrocampista vallisoletano se invent¨® un remate seco, con la izquierda y desde muy arriba, que se fue al larguero.
El Valencia, sin embargo, sigui¨® con su dominio por aplastamiento, pero sin chispa en el ¨²ltimo tramo, estrell¨¢ndose en la l¨ªnea fijada por Naybet. Aimar parec¨ªa arrastrar la patada de Jeremies en el partido amistoso frente a Alemania del pasado mi¨¦rcoles. Y su compatriota Kily Gonz¨¢lez anduvo desaparecido como ya hizo la semana pasada en Son Moix.
En ¨¦sas estaba el choque, con el Valencia frustrado y el Depor muy satisfecho, cuando Aimar se fue a sacar una falta. La en¨¦sima. Claro que con P Aimar no existe la rutina. Su disparo enroscado tuvo la fortuna de aliada y la pierna de Duscher descoloc¨® a Molina.
A partir de entonces, la presi¨®n valencianista fue realmente demoledora. Quer¨ªa m¨¢s el Valencia y Albelda marc¨® la raya en el centro del campo, orden¨® abalanzarse sobre sus rivales y a ¨¦stos no les vali¨® ni su acreditada t¨¦cnica para salir del laberinto. M¨¢s que nunca not¨® el Deportivo la ausencia de Mauro Silva. Para compensarlo, Irureta introdujo al brasile?o Emerson, que equilibr¨® un tanto el partido, aunque demasiado tarde. Achuch¨® fugazmente el Depor, pero sin ning¨²n acierto. Con espacios por delante, Aimar empez¨® a gustarse, a trazar pases inimaginables, a sortear contrarios con limpieza hasta que... Ben¨ªtez lo mand¨® a la ducha. Estar¨ªa cansado, s¨ª, pero con las ideas mucho m¨¢s frescas que los 21 restantes. Mestalla, en todo caso, lo despidi¨® con una ovaci¨®n estruendosa. Sab¨ªa que era su hombre. El hombre que acerca a su equipo a la Liga. Despu¨¦s de 31 a?os.
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