'El Bar?a, mejor plantilla; el Madrid, m¨¢s guerrero'

'?Eh, t¨², el fot¨®grafo! No dispares, que quiero tomar el caf¨¦ tranquilo. Ya habr¨¢ tiempo para las fotos y para hablar del Madrid, del Bar?a y de lo que sea'. S¨®lo hab¨ªan transcurrido unos segundos desde que esta frase retumbara en la sede de la Asociaci¨®n de Veteranos del Madrid cuando Alfredo di St¨¦fano (Buenos Aires, 1926), autor de la misma, le pregunt¨® a Gento: 'Paco, ?viste a Zidane el otro d¨ªa en el Francia-Rusia? ?Qu¨¦ b¨¢rbaro! ?Qu¨¦ futbolista!'. A partir de ah¨ª, el actual presidente de honor del Madrid, junto a Francisco Gento (Guarnizo, 1933) y Enrique P¨¦rez D¨ªaz, Pach¨ªn, (Torrelavega, 1936), no par¨® de hablar del Bar?a y del Madrid. Los tres, que disputaron las dos eliminatorias que les enfrentaron en las temporadas 1959-60 y 1960-61, la primera ganada por ellos y la segunda perdida, aceptaron reunirse alrededor de una mesa y desgranar para este peri¨®dico los que han sido hasta ahora los ¨²nicos cara a cara internacionales entre los dos clubes espa?oles m¨¢s importantes.

Gento: 'La UEFA cre¨ªa que, si gan¨¢bamos 'la sexta', la Copa de Europa se iba a la mierda'

Di St¨¦fano: 'A m¨ª me hicieron en el Camp Nou lo mismo que a Figo la pasada temporada'

Di St¨¦fano: A m¨ª me cuesta acordarme de un partido de hace 42 a?os. Recuerdo el ambiente, claro, que era tan impresionante como ahora.

Gento: La ¨²nica diferencia es que entonces hab¨ªa diez periodistas y ahora hay 10.000. Yo ya no s¨¦ cu¨¢ntas entrevistas me han hecho estos d¨ªas. Y eso que no juego.

Pach¨ªn: Entre los equipos, la rivalidad exist¨ªa como ahora. Y en cuanto al ambiente... En el Bernab¨¦u cab¨ªan entonces 120.000 personas, que hoy no caben. As¨ª que no me hablen de que el ambiente es distinto.

D. S.: A m¨ª me regalaron una silbatina en el Camp Nou. Como locos se pusieron todos. Me hicieron lo mismo que a Figo.

P.: El primer a?o les ganamos c¨®modamente [3-1 en el Bernab¨¦u y 1-3 en el Camp Nou]. Lo tengo grabado porque en Chamart¨ªn debut¨¦ con el Madrid.

D. S.: ?Nos entrenaba todav¨ªa el viejo? [Fleitas Solichs, que dur¨® siete meses en el banquillo].

P.: No. Le hab¨ªan despedido poco antes. Ya estaba Miguel Mu?oz.

D. S.: El viejo no pudo irse en las semifinales, que ser¨ªan por estas fechas. ?Si se fue despu¨¦s de una nevada tremenda! Andaba como una gallina y se cay¨®.

P.: ?De qu¨¦ nevada hablas? Contra el Bar?a jugamos la semana anterior a san Isidro. Lo s¨¦ porque ese d¨ªa Espa?a se enfrent¨® a Inglaterra. En siete d¨ªas debut¨¦ con el Madrid y con la selecci¨®n. Igual que Del Sol. Ganamos por 3-0 y marqu¨¦ a Bobby Charlton.

D. S.: Eso es marcar. En aquel partido frente a Inglaterra el p¨²blico nos chill¨® y todo.

P.: Porque and¨¢bais haciendo tri¨¢ngulitos de tac¨®n y la gente quer¨ªa m¨¢s goles.

D. S.: Ser¨ªan pocos tres a Inglaterra.

G.: Volviendo a lo del Bar?a, creo que en la ida marc¨® dos Alfredo y uno Pancho [Puskas] y en la vuelta dos Pancho y uno yo.

D. S.: As¨ª que marqu¨¦ dos. Est¨¢ bien eso.

P.: Fijaros que pasamos sin ning¨²n problema y ellos ten¨ªan una plantilla formidable.

G.: Al Bar?a lo entrenaba Helenio Herrera, al que despidieron tras las dos derrotas.

D. S.: Luego, le tuvimos en la selecci¨®n.

G.: Helenio era un fen¨®meno. Y todo lo que dec¨ªa, esas frases que tanto repiten los periodistas, era para animar a los jugadores. Si alguien se molestaba, all¨¢ ¨¦l.

D. S.: Un entrenador b¨¢rbaro.

P.: Aquel Bar?a ten¨ªa mejor plantilla que la nuestra. Mejor equipo, no, porque la mentalidad del Madrid era distinta. M¨¢s guerrera. Pero eran un equipazo.

D. S.: Ten¨ªan toda la defensa de la selecci¨®n: Segarra, Gensana...

P.: Pero les ganamos. Y en Glasgow, 7-3 [al Eintracht]. A¨²n lo echan en Inglaterra por la tele.

G.: He le¨ªdo que los dos ¨¢rbitros de la eliminatoria que ganamos al Bar?a fueron los mismos que en la que perdimos.D. S.: ?Los ingleses?

G.: Los mismos.

P.: Pues la segunda vez nos hicieron una putada. No es el t¨®pico por haber perdido. Es la verdad. Nos la hicieron bien hecha.

D. S.: Hubo alguna cosa rara... Pero no lo har¨ªan a prop¨®sito.

G.: ?Venga, Alfredo! T¨² no piensas eso. La verdad es que nos anularon cuatro goles. ?Y los cuatro eran v¨¢lidos!

D. S.: Me acuerdo del gol que anularon a Del Sol. Le hicieron penalti a Canario, marc¨® Luis y el ¨¢rbitro [Leafe] pit¨®. Y nos fuimos todos a ¨¦l diciendo que si hab¨ªa pitado el penalti o hab¨ªa dado el gol. Y resulta que ni lo uno ni lo otro. Dijo que 'venga', que 'el bal¨®n, para el Bar?a'. Y ah¨ª est¨¢bamos todos como locos a su alrededor: 'Pero, referee, ?qu¨¦ haces?', le dijimos. Nada, ni caso.

G.: No se le puede echar la culpa al Bar?a, pero algo hubo ah¨ª, alguna orden que ven¨ªa de m¨¢s arriba. No se pod¨ªa permitir que el Madrid ganara la sexta.

D. S.: No ser¨ªa premeditado.

G.: Que s¨ª, Alfredo; que pensaban que la gente ya se aburr¨ªa con tanto t¨ªtulo del Madrid.

P.: El comportamiento que tuvo el ¨¢rbitro en el campo y, despu¨¦s, en la cena que tuvimos los dos equipos con ¨¦l era extra?o. Algo pasaba.

G.: ?Qu¨¦ iba a pasar? Pues que hab¨ªamos ganado cinco y el resto cero. Y ya estaban hartos. La UEFA pensaba que la Copa de Europa se iba a la mierda si el Madrid segu¨ªa gan¨¢ndola.

P.: Unos d¨ªas despu¨¦s volvimos al Camp Nou en un partido de la Liga y les metimos cinco [3-5]. Ah¨ª qued¨® todo claro, aunque el Bar?a era un equipazo.

G.: Ya, era grande, pero yo he estado 17 a?os en el Madrid y s¨®lo le he visto ganar dos Ligas. Y la segunda, empatado a puntos con nosotros.

D. S.: Y porque el goal average era distinto. Con el de ahora, habr¨ªamos ganado nosotros.

P.: Un d¨ªa hablaba con Fust¨¦ y me dijo: '?Sabes que jam¨¢s he ganado una Liga?' Y estuvo 10 a?os en el Bar?a. Asustado me qued¨¦.

G.: Y era un monstruo.

D. S.: Volviendo a lo de la Copa de Europa, dicen que en aquella cena pegamos al ¨¢rbitro.

P.: Bueno, no le pegamos, pero le dijimos de todo menos 'guapo'.

G.: Pegarle, no, pero casi. No nos entendi¨® nada porque le hablamos en castellano.

P.: La prensa critic¨® al ¨¢rbitro. Sobre todo, la extranjera. Si hubiera ocurrido ahora...

D. S.: De todos modos, el club estuvo tranquilo. Y el que m¨¢s, Bernab¨¦u.

G.: Porque en el Madrid est¨¢ prohibido llorar.

D. S.: Recuerdo la ¨²ltima jugada, la de Marquitos, que fall¨® delante del portero.

P.: Le echamos una bronca... '?Qu¨¦ cojones pintabas t¨² ah¨ª, de ariete? ?Por qu¨¦ no dejaste que rematara Alfredo?', le dije yo.

D. S.: Me grit¨® '?qu¨ªtate!'. Me quit¨¦, chut¨® y... dos guardias que estaban en la grada cayeron.

G.: Hab¨ªa marcado en Par¨ªs en una final anterior.

D. S.: Por eso se anim¨® y fue a rematar. Dos minutos faltaban.

G.: A t¨ª te anularon un gol.

P.: No me acuerdo. S¨®lo s¨¦ que en mi carrera s¨®lo marqu¨¦ uno.

G.: En propia meta, por cierto. El primero del Bar?a se le da a Verg¨¦s y fue tuyo.

P.: ?Qu¨¦? Ni toqu¨¦ la pelota.

G.: Ya. El caso es que entre t¨² y el ¨¢rbitro la hicisteis buena.

P.: No, si ser¨ªa culpa m¨ªa tambi¨¦n el gol de Evaristo.

D. S.: No, amigo. Aquello fue un golazo.