Garz¨®n responde a Jersey que la intimidad de los clientes del BBV no es 'incondicional'
La isla critica que se 'parta del hecho de que todos los clientes del Privanza son delincuentes'
El derecho a la intimidad 'es esencial pero no puede tener un car¨¢cter absoluto e incondicional'. As¨ª responde Baltasar Garz¨®n, instructor del caso BBV, a William J. Bailhache, fiscal de Jersey que se niega a colaborar con la investigaci¨®n judicial y asegura que los clientes del BBV Privanza Bank 'tienen un derecho leg¨ªtimo a la privacidad de sus asuntos'. La fiscal¨ªa de Jersey, isla del canal de la Mancha, ha prohibido a Simon Drew, letrado en ese organismo, que tenga ninguna relaci¨®n con el caso, ya que su padre es una de las cuatro personas vinculadas al banco al que el juez ha pedido interrogar.
La elegante sede de piedra del BBV Privanza en Jersey, en el n¨²mero 2 de la calle Mulcaster, cerca de la estatua que conmemora la liberaci¨®n de Jersey de las tropas nazis, se ha convertido en un muro infranqueable para la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n y para el juez Garz¨®n, cuyas peticiones rogatorias han sido rechazadas.
William J. Bailhache, fiscal general de esta isla de 85.000 habitantes, se niega a colaborar porque 'me pide que parta del hecho de que todos los clientes de la entidad son delincuentes, ya que de otro modo no ser¨ªa leg¨ªtimo interferir en la privacidad a la que tienen derecho con arreglo al art¨ªculo 8 del Convenio Europeo de Derechos Humanos... que en Jersey respetamos'.
El titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 5 de la Audiencia Nacional, en un escrito de cinco folios, le ha respondido as¨ª: 'Es inadecuada la sugerencia de que el reino de Espa?a podr¨ªa estar incurriendo en el incumplimiento del Convenio Europeo de Derechos Humanos. Tal intenci¨®n se niega'. Y le recuerda que el mismo fue firmado y ratificado por Espa?a en 1979. Asimismo, a?ade que 'velar por la correcta aplicaci¨®n del sistema tributario tiene perfecto encaje en las excepciones contempladas en esa declaraci¨®n'.
William J. Bailhache, que antes de fiscal general fue presidente del Barclays Bank Finance Company Limited, cuestion¨® en su respuesta que los productos financieros offshore (fuera de territorio) sirvieran para defraudar y pidi¨® que 'me haga llegar las disposiciones del C¨®digo Penal espa?ol en las que conste que es il¨ªcito adquirir productos fiduciarios offshore'. Garz¨®n le ha remitido una traducci¨®n del art¨ªculo 395 del C¨®digo Penal en el que se recoge el fraude a la Hacienda p¨²blica y la prohibici¨®n expresa de usar personas interpuestas para ocultar la identidad del tributario.
El juez se?ala en su respuesta que 'la adquisici¨®n de productros fiduciarios offshore permite ocultar la identidad del que percibe una renta y la evasi¨®n de los impuestos espa?oles'. Y a?ade que la confidencialidad que se ofrece en los productos del banco investigado en el caso de las compa?¨ªas 'hace figurar accionistas y consejeros distintos de los reales que act¨²an como personas interpuestas de quienes verdaderamente est¨¢n tras ellas'.
Garz¨®n pone el ejemplo los trust (fundaciones) que se ofertan por el BBVAPJ y critica que se asientan en una confidencialidad 'que se consigue a partir del compromiso de no hacer p¨²blica la escritura de constituci¨®n del trust y por tanto de la ocultaci¨®n de la identidad del fideicomitente, violentando los elementos jur¨ªdicos del trust al facilitar su revocaci¨®n con una flexibilidad absolutamente extra?a en este tipo de instituciones'.
Y a?ade otra referencia, la del Trust Discrecional Standard, que aparece en la p¨¢gina 46 del Manual de productos fiduciarios localizado durante el registro del BBVA en Madrid, que ofrece el banco para asegurar la transmisi¨®n sucesoria de un patrimonio, fundamentalmente de activos situados fuera del pa¨ªs del cliente y no incluidos en su testamento, libres de impuestos.
'Se invita directamente a los clientes residentes en Espa?a a evadir el impuesto sobre sucesiones cuando realicen adquisiciones patrimoniales mortis causa, e impl¨ªcitamente a ocultar la preterici¨®n de aquellos herederos que ostentando derechos legales no tengan conocimiento de la estructura fiduciaria', responde el juez a la negativa de Bailhache.
Impresos en espa?ol
Garz¨®n destaca que los impresos utilizados para abrir cuentas bancarias est¨¢n redactados en espa?ol y asegura que ¨¦ste 'es uno m¨¢s de los serios indicios de que las cuentas abiertas en BBVAPJ y los productos fiduciarios a ellas asociados son contratados, entre otros, por clientes residentes en Espa?a y, por tanto, que es la Hacienda p¨²blica espa?ola la que resulta defraudada'. Bailhache le hab¨ªa contestado que, en su opini¨®n, 'eso no implica que hayan cometido delito'.Para el fiscal de Jersey, el Manual de productos fiduciarios localizado en la sede del BBVA en Madrid, 'no es especialmente sorprendente' que sea un documento de uso interno y a disposici¨®n de los gestores. S¨®lo significa 'que el grupo est¨¢ bien organizado como para garantizar una coherencia en el enfoque a adoptar por sus gestores'.
Sobre la confidencialidad que el fiscal de Jersey defiende a capa y espada, Garz¨®n le responde: 'Es un principio rector esencial. Pero tambi¨¦n es cierto que el derecho a la intimidad no es ni puede tener car¨¢cter absoluto e incondicionado, puesto que est¨¢ matizado por dos preceptos, tambi¨¦n de rango constitucional'. Y cita el art¨ªculo 31 de la Constituci¨®n Espa?ola en el que se recoge la obligaci¨®n 'de todos' a contribuir al sostenimiento de los gastos p¨²blicos mediante un sistema tributario justo.
La comisi¨®n rogatoria espa?ola ped¨ªa al fiscal de Jersey el registro de la sede del BBV Privanza y el interrogatorio de cuatro testigos vinculados al banco y a Canal Trust Corporation, la sociedad que comercializaba los productos del manual. Uno de ellos es John Drew, cuyo hijo Simon trabaja como letrado en la fiscal¨ªa que dirige William J. Bailhache. El fiscal de Jersey informa en su contestaci¨®n sobre esta circunstancia y a?ade: 'He dado instrucciones en el sentido de que Simon Drew no debe ver el expediente que ha enviado y no debe ocuparse del mismo en ning¨²n aspecto'. Bailhache asegura que esta coincidencia no le va a mediatizar en este caso.
Garz¨®n remitir¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas una nueva comisi¨®n rogatoria con datos m¨¢s precisos de algunos clientes, seg¨²n fuentes judiciales. Si la isla no colabora, la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n estudia denunciar a Jersey ante organismos internacionales como el Grupo de Acci¨®n Financiera Internacional (GAFI), que persigue el blanqueo de dinero.
4.000 clientes y 1.682 millones en dep¨®sitos
La petici¨®n de auxilio judicial del juez Baltasar Garz¨®n a la fiscal¨ªa de Jersey para investigar un presunto macrofraude fiscal en la filial del BBV Privanza calcula que los clientes canalizados por la entidad en esta isla de 116 kil¨®metros cuadrados supera los 60 millones de euros (10.000 millones de pesetas).
Pero en realidad el volumen de negocio de la filial es mucho mayor del que supone el juez y la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n. Un folleto del banco recogido por un redactor de este peri¨®dico, en julio del 2000, en la sede del BBV Privanza en Jersey asegura que entonces ten¨ªa 4.000 clientes y gestionaba 1.682 millones de euros (unos 280.000 millones de pesetas). Asimismo gestionaba 500 compa?¨ªas y 300 trust.
Seg¨²n el acta judicial del registro en la sede del BBVA en Madrid, el Manual de productos fiduciarios, con el que presuntamente se defraudaba a Hacienda, fue localizado en el despacho que ocupaba D¨¢maso Moreno, directivo del BBV Privanza en Suiza y Jersey. El banco ha se?alado que ese despacho del banco no correspond¨ªa al citado directivo, ausente entonces del banco.
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