La agencia alimentaria sueca detecta un cancer¨ªgeno en patatas fritas, pan y galletas
Sanidad toma el informe con cautela y encarga un estudio propio al Instituto Carlos III
Uno de cada tres casos de c¨¢ncer est¨¢ provocado por los alimentos, pero a¨²n se ignora cu¨¢les son los alimentos concretos que suponen un mayor riesgo. La agencia sueca de seguridad alimentaria (NFA) acaba de detectar dosis desaconsejables de un probable agente cancer¨ªgeno, la acrilamida, en muestras de patatas fritas (sobre todo las de bolsa, pero tambi¨¦n las de tipo casero), galletas, crackers y en menor medida en el pan, los cereales para el desayuno y los aperitivos de ma¨ªz. El Ministerio espa?ol de Sanidad ha encargado un estudio propio al Instituto Carlos III.
La acrilamida, utilizada en la industria qu¨ªmica para sintetizar pl¨¢sticos, es un producto t¨®xico y probable cancer¨ªgeno bien conocido, pero hasta ahora se cre¨ªa que sus principales fuentes eran el agua corriente y el humo del tabaco. Para el agua corriente, los niveles m¨¢ximos aconsejados por la UE son de 0,1 microgramos por litro (o kilo) de agua. Como comparaci¨®n, la agencia sueca ha detectado una media de 1.200 microgramos por kilo de producto en las patatas fritas de bolsa (v¨¦ase gr¨¢fico).
Tambi¨¦n se ha detectado acrilamida en las patatas fritas de tipo casero (450 microgramos por kilo de producto), las galletas y crackers (410), el pan (140), los cereales para el desayuno (160), y los aperitivos de ma¨ªz (150). En general, contiene dosis desaconsejables de acrilamida cualquier alimento rico en almid¨®n (patatas, cereales) sometido a altas temperaturas (frito u horneado). Los mismos alimentos no contienen acrilamida cuando est¨¢n crudos o han sido hervidos en agua.
La Agencia Internacional para la Investigaci¨®n del C¨¢ncer (IARC), dependiente de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), clasifica la acrilamida como un 'probable carcin¨®geno en humanos'. No se ha podido demostrar que la sustancia provoque c¨¢ncer en las personas (un dato que nunca es f¨¢cil de obtener).
No cabe duda, sin embargo, de que la acrilamida es capaz de da?ar el ADN. En ratas, la exposici¨®n prolongada causa tumores, sobre todo de mama, ¨²tero, escroto y gl¨¢ndula suprarrenal. En ratones, tambi¨¦n los causa de pulm¨®n y de piel.
La agencia sueca notific¨® sus hallazgos hace dos semanas a Bruselas. Fuentes de la comisar¨ªa de Sanidad y Consumo, dirigida por David Byrne, explicaron ayer que la Comisi¨®n Europea 'no est¨¢ preocupada' por este asunto, informa Gabriela Ca?as. Bruselas considera que el estudio sueco es de momento un 'ensayo piloto', y que sus datos deber¨¢n ser confirmados y ampliados antes de tomar medidas. La agencia brit¨¢nica de seguridad alimentaria (FSA) se ha pronunciado en parecidos t¨¦rminos.
El subdirector de Seguridad Alimentaria del Ministerio espa?ol de Sanidad, Ignacio Arranz, afirm¨® ayer que el estudio sueco le merece respeto, pero que debe tomarse con cautela dado su car¨¢cter muy preliminar. 'Tuvimos conocimiento del trabajo el 24 de abril, y encargamos al Instituto Carlos III una evaluaci¨®n y confirmaci¨®n de los resultados', explica Arranz. 'El estudio abre una v¨ªa de investigaci¨®n interesante, pero no sustenta la adopci¨®n de medidas de prevenci¨®n del riesgo. La OMS ha decidido convocar una consulta de expertos para junio -una iniciativa bastante com¨²n-, pero no ha emitido ninguna recomendaci¨®n nueva sobre los h¨¢bitos alimentarios'.
Manfred Luetzow, experto de la FAO (Organizaci¨®n para la Agricultura y la Alimentaci¨®n, vinculada a la OMS) en qu¨ªmica de los alimentos, declar¨® el 26 de abril en Roma: 'Entendemos que el informe sueco no refleja ning¨²n riesgo nuevo. La acrilamida ha estado presente en esas comidas desde que la humanidad empez¨® a fre¨ªr y hornear. Por desgracia, la informaci¨®n disponible no nos permite sacar conclusiones ni emitir recomendaciones a la industria y los usuarios'.
El vicepresidente segundo del Comit¨¦ Cient¨ªfico de la Alimentaci¨®n Humana de la UE, el bioqu¨ªmico Andreu Palou, explic¨® ayer que la acrilamida 'es un factor adverso al que hemos estado y seguimos estando expuestos habitualmente', y a?adi¨®: 'Por primera vez se ha descubierto acrilamida, un compuesto cancer¨ªgeno, en alimentos de consumo habitual, y en tales cantidades que podr¨ªan explicar un n¨²mero significativo de casos de c¨¢ncer'. La agencia sueca ha calculado que la presencia de acrilamida en los alimentos mencionados puede causar 'varios cientos' de casos de c¨¢ncer al a?o en ese pa¨ªs.
Palou cree que el hallazgo ser¨¢ muy ¨²til: 'El descubrimiento puede ayudar a controlar y reducir una parte apreciable, quiz¨¢ hasta el 5%, de los casos de c¨¢ncer que tienen su origen en la alimentaci¨®n, que a su vez pueden ser un 30% del total de los casos de c¨¢ncer. Queda mucho por estudiar, pero sin duda es una referencia importante y habr¨¢ que tomar medidas en cada pa¨ªs y estudiar el asunto a nivel internacional'.
La principal indefinici¨®n se refiere a la dosis (v¨¦ase gr¨¢fico). En ratas se considera cancer¨ªgena una dosis de 25-50 miligramos por kilo de peso corporal y d¨ªa. Pero la Universidad de Estocolmo ha detectado roturas cromos¨®micas (un tipo de mutaci¨®n gen¨¦tica) a dosis de 2 miligramos por kilo de peso, tambi¨¦n en ratas.
La agencia sueca ha calculado que la dosis media de acrilamida que toma un ciudadano de ese pa¨ªs, debido sobre todo a los alimentos mencionados, var¨ªa entre 0,05 y 0,1 miligramos diarios (el triple en el caso de los fumadores). Esa ingesta est¨¢ muy lejos de los l¨ªmites calculados para causar c¨¢ncer en ratas, pero con la acrilamida y otros cancer¨ªgenos no hay dosis consideradas del todo seguras.
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