KPNQwest intenta evitar lo peor
El cierre de la l¨ªnea ¨®ptica de la empresa podr¨ªa colapsar el tr¨¢fico europeo por Internet
'A efectos t¨¦cnicos, el 31 de mayo fue una especie 11 de septiembre en el mundo de las telecomunicaciones', comentaba un directivo de una empresa del sector para explicar la conmoci¨®n que caus¨® la declaraci¨®n en quiebra de KPNQwest, la empresa holandesa-norteamericana propietaria de la mayor red de fibra ¨®ptica de Europa.
La filial espa?ola de KPNQwest, que controla un 20% del tr¨¢fico de Internet, ha traspasado a otros operadores m¨¢s de un tercio de su capacidad
Ahora la suerte de la compa?¨ªa, una sociedad mixta de la operadora holandesa KPN y la norteamericana Qwest Communications, pende de un hilo. Poco antes del fin de semana los curadores hicieron un desesperado llamamiento a los principales clientes, entre los que se encuentran Dell Computer, AOL Time Warner y Hewlett-Packard, para que paguen las facturas de los meses de mayo y junio. Si el dinero recibido es suficiente, los curadores podr¨ªan mantenerla funcionando algunas semanas m¨¢s, lo que les permitir¨ªa ganar tiempo para conseguir comprador y, al menos, permitir a sus clientes encontrar otro proveedor. En caso contrario, la compa?¨ªa suspender¨¢ sus servicios ma?ana, lunes, por la noche.
La de KPNQwest es la cr¨®nica de una muerte anunciada. La compa?¨ªa adquiri¨® una deuda de 1.800 millones de euros resultado de la construcci¨®n de una red de m¨¢s de 25.000 kil¨®metros de fibra optica que une las principales ciudades europeas, justo en un momento en el que los precios de los servicios de Internet empezaban a caer. El mercado llevaba meses esperando una decisi¨®n dr¨¢stica del grupo que nunca lleg¨®, para renegociar la deuda con sus acreedores y reordenar el negocio.
KPN es, junto con Cable & Wireless y BT Ignite, uno de los mayores grupos especializado en el tr¨¢fico de Internet en el mundo. Es lo que se denomina en el sector un carrier: por sus cables las conexiones de Internet pasan de un pa¨ªs a otro y de un operador al siguiente, hasta llegar a su destinatario final.
El grupo, que no ha obtenido beneficios desde que sali¨® a Bolsa en noviembre de 1999, encendi¨® las luces de alarma hace unas semanas al anunciar unas p¨¦rdidas de 280 millones de euros en el primer trimestre de este a?o y reconocer que su generaci¨®n de caja para 2002 supon¨ªa casi la d¨¦cima parte de los desembolsos a los que ten¨ªa que hacer frente durante el a?o.
Con la negativa de los bancos a concederle m¨¢s financiaci¨®n, el 23 de mayo, la empresa present¨® suspensi¨®n de pagos poco despu¨¦s de que, en una actitud desconocida en el mundo empresarial, dimitiera en pleno su consejo de supervisi¨®n, en el que estaban representados su principales accionistas.
De poco sirvieron los ag¨®nicos planes de venta de activos 'no esenciales', para conseguir liquidez, hacer frente a las necesidades de efectivo m¨¢s acuciantes y mantenerse a flote, al menos alg¨²n tiempo. Pocos d¨ªas despu¨¦s, el 31 de mayo, tras el fracaso de algunas negociaciones, la compa?¨ªa ped¨ªa a un tribunal holand¨¦s que procediera con la declaraci¨®n de quiebra.
La debacle puede producir importantes da?os en decenas de empresas-clientes que utilizan su red de fibra ¨®ptica para transmitir datos y servicios de Internet, ya que el grupo holand¨¦s gestiona el 30% del tr¨¢fico de Internet a escala europea y el 10% a escala internacional.
Aunque muchas empresas se han buscado a marchas forzadas en los ¨²ltimos d¨ªas sumistradores alternativos (British Telecom anunci¨® ya que recibi¨® clientes de KPNQWest por valor de seis millones de euros) traspasar en cuesti¨®n de horas todo el tr¨¢fico de KPNQwest hacia otros operadores, adem¨¢s de suponerles importantes sumas de dinero representar¨ªa para las empresas m¨¢s grandes al menos dos semanas y graves trastornos.
En Espa?a, donde se calcula que KPNWest maneja el 20% del tr¨¢fico de salida de las comunicaciones de Internet hacia otros pa¨ªses, la filial -que al igual que la de Portugal e Italia no se han declarado todav¨ªa en quiebra- traspas¨® la semana pasada m¨¢s de un tercio de su capacidad a otros operadores.
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