T¨®picos y sevillanas

En los cursos de verano de la Universidad de C¨¢diz ha tenido lugar un seminario con el t¨ªtulo: Los t¨®picos sobre Andaluc¨ªa hoy, al que, adem¨¢s de alumnos, han asistido representantes de comunidades andaluzas de lugares muy diversos en busca de apoyo contra los t¨®picos que les afectan y que desear¨ªan eliminar sin perder la diversidad de folclore que poseemos y la cultura que les identifica.

En lo que se refiere al folclore y a su diversidad tienen toda la raz¨®n, pues, aunque ellos no lo manifestaron, s¨ª es verdad que lo que llega a todos lados es nuestro baile por sevillanas, y se comprende que moleste que llegue como representaci¨®n folcl¨®rica de toda Andaluc¨ªa y que haya quien acabe harto de esa moda de sevillanas. Pero en cuanto a los t¨®picos, parece ser que no son nada f¨¢ciles de eliminar porque son r¨¢pidos y resbaladizos, tan falsos como aut¨¦nticos, con un enorme poder de transmisi¨®n y que resisten tenaces a trav¨¦s del tiempo. Son muchos los que a¨²n siguen vivos.

Me hab¨ªa hecho a la idea de que los t¨®picos ven¨ªan de fuera, de forasteros, pero no: por lo que dijeron comenzaron hacia 1830, cuando comienza la preocupaci¨®n por las se?as de identidad, y fuimos nosotros mismos los primeros que cultivamos las im¨¢genes llamativas, ex¨®ticas, que m¨¢s tarde tomaron los extranjeros y se desbordaron hasta llegar a representar a toda Espa?a. M¨¢s o menos ocurri¨® lo que hoy sucede con el traje de flamenca y el baile por sevillanas: que en lugar de singularizar estandarizan.

Hay quien cree necesaria una actitud activa frente al t¨®pico y contra la sobredosis de ambiente festivo, contra el tiempo y las energ¨ªas que ocupan y que podr¨ªan emplearse en algo m¨¢s innovador. Y tambi¨¦n hay quien considera que el t¨®pico es inofensivo cuando tiene lugar en una comunidad como Andaluc¨ªa, donde, como pueblo viejo y sabio, ya no nos preocupan tanto las se?as de identidad que han pasado a ser problema de pueblos inmaduros. La soluci¨®n puede venir a base de tomar distancia para estudiar su contenido e intentar suprimir lo que haya en ¨¦l de chabacano y de inconveniente. Ser¨ªa un tema importante para los medios.