'Tengo la frustraci¨®n de no haber logrado la paz'

'Cuando uno ya est¨¢ a pocas horas de culminar su Gobierno, cuando uno se sienta consigo mismo y con su conciencia, lo importante es tener la tranquilidad y la satisfacci¨®n del deber cumplido, y eso es lo que yo tengo', afirma Andr¨¦s Pastrana a pocos d¨ªas de ceder la presidencia de Colombia a ?lvaro Uribe. 'Estoy seguro de que la historia nos va a reconocer nuestra labor, realizada con toda nuestra buena fe, porque si algo caracteriz¨® a mi Gobierno fue precisamente eso, la buena fe'. Pastrana convers¨® con EL PA?S en Quito, donde particip¨® la semana pasada en una cumbre suramericana, su ¨²ltima aparici¨®n internacional como presidente de Colombia.

Pregunta. ?Se siente usted frustrado por el fracaso en el proceso de paz durante su Gobierno?

Respuesta. Claro que existe la frustraci¨®n de no haber logrado la paz. ?se era el anhelo no s¨®lo de Andr¨¦s Pastrana, sino de todos los colombianos. Pero yo tengo una percepci¨®n distinta de lo que fue nuestro proceso de paz. M¨¢s que un fracaso, fueron muchas las cosas positivas que logramos obtener. En primera instancia, ganamos la batalla m¨¢s importante en los ¨²ltimos a?os: la batalla pol¨ªtica. Hoy las FARC tienen el 1% de popularidad en Colombia. Internacionalmente, est¨¢n en la lista de terroristas de Estados Unidos y de la Uni¨®n Europea. En segunda instancia, logramos conformar una agenda com¨²n. Por primera vez, los colombianos nos pusimos de acuerdo, y en ella participaron las FARC, el Gobierno, los sindicatos, el sector privado, la Iglesia, los partidos pol¨ªticos... En tercera instancia, la legitimaci¨®n del Estado, tambi¨¦n internacionalmente. Yo sigo creyendo en la soluci¨®n pol¨ªtica negociada. Creo que ¨¦se es el ¨²nico camino hacia la paz.P. ?C¨®mo puede manejarse la renuncia de m¨¢s de un centenar de alcaldes, atemorizados por las amenazas de las FARC?

R. Lo que me preocupa es que se conozcan s¨®lo las noticias negativas y no las positivas sobre el tema. He ido a sitios de verdadero conflicto, como el Putumayo o el Casanare, donde los alcaldes est¨¢n amenazados por la guerrilla y, sin embargo, han asegurado que no renunciar¨¢n. Han respaldado al Gobierno (...). En todas ellas hemos constatado los buenos prop¨®sitos de los alcaldes, que afirman: 'A nosotros nos envi¨® el pueblo, pues nos vamos a quedar. No nos vamos a ir porque un grupo insurgente est¨¦ al margen de la ley'.

P. El presidente Bush quiere que personas comunes trabajen como confidentes para combatir el terrorismo. ?Podr¨ªa implementarse ese plan tambi¨¦n en su pa¨ªs?

R. El problema es distinto. Hace algunos a?os, en Colombia se hizo el experimento con la poblaci¨®n civil trabajando como colaboradores de las entidades. Pero esto atrajo consigo muchos asesinatos. Lo que est¨¢ funcionando, y creo que es lo que tenemos que impulsar, es el tema de las recompensas por la informaci¨®n. Estamos hablando de dos millones de d¨®lares por los cabezas, de un mill¨®n por jefe de bloque, 500.000 por los jefes de frente. Y est¨¢ comenzando a dar resultados, con la tranquilidad de que cuentan con nuestra protecci¨®n ellos y sus familias.

P. ?C¨®mo vislumbra el futuro de Colombia?

R. Creo que entregamos un pa¨ªs distinto al que recibimos en 1998. Si miramos las cifras econ¨®micas, a pesar de las dificultades que hemos tenido, vemos que hemos logrado bajar las tasas de inter¨¦s a niveles muy importantes, los m¨¢s bajos en las ultimas d¨¦cadas, al igual que la inflaci¨®n. En cuanto al d¨¦ficit fiscal, este a?oo aspiramos llegar a menos del 3%, cuando antes estaba casi en el 7%.Y en buena parte, el presidente electo ha querido continuar muchas de nuestras pol¨ªticas. En otras, l¨®gicamente, habr¨¢ ajustes, pero creo que en ello hay definitivamente un reconocimiento importante de la labor que hemos hecho.