El s¨ªndrome de M¨¹nchhausen acecha al Samur
Las ambulancias acuden diez veces en un solo d¨ªa a atender a un hombre que finge estar enfermo
Con las sirenas a todo volumen y afan¨¢ndose en plena hora punta, una ambulancia del Samur-Protecci¨®n Civil lleg¨® a las 7.30 de ayer a la calle de Orense. Una llamada de un ciudadano hab¨ªa alertado a los m¨¦dicos de que un hombre de mediana edad acababa de desplomarse, entre temblores y aparentemente inconsciente, frente a una boca de metro de Nuevos Ministerios. La situaci¨®n parec¨ªa grave, pero cuando los sanitarios llegaron donde estaba el supuesto paciente, ¨¦ste les mir¨® y se levant¨® para abandonar el lugar con paso ¨¢gil.
?Fue curaci¨®n repentina? ?Un milagro de la medicina sugestiva? ?Un efecto terap¨¦utico, hasta ahora desconocido de las sirenas? 'No, nada de eso. Este hombre nos ha hecho la misma jugarreta 10 veces en 24 horas, desde el domingo por la ma?ana'. Entre resignado e incr¨¦dulo, un portavoz del servicio municipal de emergencias explicaba ayer con estas palabras lo sucedido en la calle de Orense.
Uno de estos falsos pacientes simula comas et¨ªlicos o espectaculares borracheras
Vestido con camisa y pantal¨®n oscuro, con barba de tres o cuatro d¨ªas y de aspecto algo desali?ado, pero de ning¨²n modo abandonado, el hombre en cuesti¨®n, de 47 a?os, es un paciente del Samur y, por tanto, no puede ser revelada su identidad. Sin embargo, ya empieza a ser ampliamente conocido por el personal sanitario del Samur, que le ha visto decenas de veces simulando ataques incomprensibles que luego se quedan en nada. 'No s¨¦ qu¨¦ le ha pasado este fin de semana. Suele hacer lo mismo a menudo, varias veces a la semana, pero nunca hab¨ªa llegado a hacerlo tantas veces en un solo d¨ªa', explic¨® el portavoz del Samur-Protecci¨®n Civil.
No es el ¨²nico que hace lo mismo en Madrid. El Samur tiene fichados a otros dos falsos enfermos: El Luis Mari y El Postiguillo. El primero tiene unos 65 a?os, y su especialidad es simular comas et¨ªlicos o fenomenales y ruidosas borracheras. 'Act¨²a por la zona de Tetu¨¢n, y nunca se sabe si es verdad o no lo que finge. Porque es cierto que el hombre a veces va bebido, pero casi siempre monta el tumulto y, cuando llega la ambulancia, se va tan tranquilo', explican desde el Samur.
El Luis Mari, de unos cincuenta a?os, es el que m¨¢s cuida la puesta en escena. Su especialidad es interpretar ataques de epilepsia en plena calle de la Princesa, plaza de Espa?a y aleda?os. 'No sabemos c¨®mo lo hace, pero el hombre se las apa?a para sacar espuma de la boca y todo, como si fuera de verdad', comenta el portavoz de los servicios de emergencia del Ayuntamiento de Madrid.
El comportamiento de los tres hombres es muy parecido: buscan zonas concurridas en las horas de m¨¢ximo trasiego. Interpretan bien los s¨ªntomas de sus ataques y logran, tras llamar la atenci¨®n de un buen pu?ado de peatones, que alguien llame al Samur. Y cuando llega la ambulancia, los tres desaparecen andando. 'Hay d¨ªas que lo hacen m¨¢s de una vez. Otras veces, pasa hasta una semana sin que les veamos', asegura el portavoz del Samur-Protecci¨®n Civil.
Los responsables del servicio de emergencias confiesan que ya no saben qu¨¦ hacer con ellos: 'Nunca dejaremos de asistir a una llamada de urgencia. Jam¨¢s. Es algo que estamos obligados a hacer aunque tengamos la firme sospecha de que el paciente es uno de estos tres hombres. Pero lo cierto es que es un despilfarro, porque se est¨¢n ocupando equipos m¨¦dicos que quiz¨¢ hacen falta en otro lugar de Madrid', lamentan desde el Samur-Protecci¨®n Civil.
?Qu¨¦ les pasa a estos hombres? ?Por qu¨¦ simulan estos ataques? En psiquiatr¨ªa hay un conjunto de trastornos muy parecidos a los que presentan estos hombres conocidos como s¨ªndrome de M¨¹nchhausen o trastornos facticios.
'Las personas que lo sufren son los t¨ªpicos pacientes que acuden una y otra vez a los hospitales alegando enfermedades que en realidad no sufren. Llegan a conocer muy bien los s¨ªntomas de tanto simularlos y ver las reacciones y las pruebas a las que les someten los m¨¦dicos en urgencias', explica Antonio Escudero, presidente de la Asociaci¨®n Madrile?a de Salud Mental.
'El comportamiento de estos hombres se parece al de estos trastornos', a?ade Escudero, 'aunque a la hora de hablar de salud mental hay que decir que cada persona es un caso ¨²nico y deber¨ªan conocerse m¨¢s detalles del pasado y del comportamiento de estas personas'.
Una cosa sorprende a Antonio Escudero del comportamiento de estos falsos pacientes del Samur: 'Normalmente, lo que quieren estas personas es que les lleven al hospital y que all¨ª empiecen a examinarles y tratarles. En este caso, si se levantan nada m¨¢s ver la ambulancia, es que quiz¨¢ ya saben que en urgencias les van a rechazar porque tambi¨¦n les conocen'.
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