La UE concede la inmunidad ante la Corte Internacional a los diplom¨¢ticos y soldados de EE UU

La UE ha atendido las presiones de EE UU para conceder inmunidad a su personal diplom¨¢tico, civil y militar destinado en territorio comunitario ante la Corte Penal Internacional (CPI). Los ministros de Asuntos Exteriores europeos pactaron ayer un planteamiento com¨²n a fin de que cada socio se sirva de acuerdos bilaterales ya existentes o suscriba otros con Washington facilit¨¢ndole tal privilegio bajo la condici¨®n de que los estadounidenses perseguidos por genocidio, cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad sean juzgados por tribunales de su pa¨ªs.

'No se trata de ninguna concesi¨®n, ni de rendici¨®n. Simplemente hemos atendido las preocupaciones de EE UU al tiempo que preservamos los estatutos del tribunal', declar¨® ayer tarde el ministro dan¨¦s Per Stig M?ller en nombre de la presidencia de la Uni¨®n. Satisfecho tambi¨¦n se mostr¨® el comisario europeo de Asuntos Exteriores, Chris Patten, que hasta ahora era uno de los m¨¢s firmes opositores a firmar pactos con terceros que minaran la CPI. 'Es innegociable', dec¨ªa este verano. Sin embargo, ayer afirm¨® que la f¨®rmula encaja perfectamente con los estatutos de este ¨®rgano judicial, el primero en la historia de este tipo, fundado en Roma en 1998 y que ha comenzado a funcionar este verano sin el apoyo, entre otros, de EE UU, Rusia, China o India.

La UE ha establecido tres principios para atender las presiones de la Administraci¨®n de Bush: la no inmunidad de norteamericanos perseguidos por la CPI, lo que supone que tendr¨¢n que ser procesados por la justicia de su propio pa¨ªs; la no reciprocidad en el caso de los europeos a fin de no extender m¨¢s la inmunidad y, finalmente, el alcance de este privilegio: afectar¨¢ exclusivamente a todo 'personal diplom¨¢tico, militar o civil enviado' por EE UU a territorio comunitario.

'La UE ha hecho demasiadas concesiones', afirm¨® ayer Richard Dicker, director del programa de justicia internacional de Human Rights Watch. 'No veo garant¨ªas que obliguen al procesamiento de esas personas en EE UU y, por otro lado, abre la puerta para hacer nuevas excepciones con pa¨ªses no signatarios como es el caso de Rusia', coment¨® el representante de la destacada organizaci¨®n humanitaria norteamericana. La presidencia danesa dijo 'no tener constancia' de haber recibido petici¨®n por parte rusa y se limit¨® a afirmar que ser¨ªa estudiada si Mosc¨² lo solicita.

Los gobiernos del Reino Unido, Italia y Espa?a fueron desde el primer momento los socios comunitarios m¨¢s proclives a alcanzar una soluci¨®n con EE UU. Londres y Roma amenazaron el pasado agosto con firmar por separado acuerdos bilaterales con Washington, tal como EE UU ha hecho ya con una docena de pa¨ªses no comunitarios. La presidencia danesa salv¨® hace un mes los muebles al lograr que nadie diera un paso hasta que no se alcanzara una posici¨®n com¨²n.

La propuesta alcanzada por los Quince es bastante sutil, se?alan fuentes diplom¨¢ticas. No pod¨ªa ser de otro modo trat¨¢ndose de la UE. No se concede un cheque en blanco a la Administraci¨®n de Bush extendiendo la inmunidad a cualquier ciudadano norteamericano, como suger¨ªa el italiano Silvio Berlusconi, ausente ayer de la cita ministerial, y deja al arbitrio de cada Gobierno la aplicaci¨®n de acuerdos bilaterales ya existentes con Washington en materia de extradici¨®n, como quer¨ªa Alemania, y no de un acuerdo global. 'No se trata de una posici¨®n com¨²n, sino de un planteamiento com¨²n que evita una divisi¨®n interna y atiende las preocupaciones de EE UU preservando el principio de no impunidad y en definitiva la integridad del tribunal', sentenci¨® la ministra espa?ola Ana Palacio. Los servicios jur¨ªdicos de la Comisi¨®n Europea concluyeron este verano que acuerdos bilaterales sobre inmunidad con pa¨ªses no signatarios ser¨ªan una violaci¨®n de los estatutos del tribunal.

Por otra parte, la espa?ola Uni¨®n Progresista de Fiscales manifest¨® el pasado fin de semana que 'la ¨²nica posici¨®n claramente a favor de la protecci¨®n de los derechos humanos es la de una cerrada oposici¨®n a la firma de los citados acuerdos bilaterales, que tanto da?o pueden hacer a los avances que en los ¨²ltimos tiempos se han producido en esta materia'.