Un incendio arrasa 28 viviendas de un inmueble pr¨®ximo al hospital La Paz
Alg¨²n vecino amenaz¨® con lanzarse al vac¨ªo al verse cercado por las llamas
Momentos de histeria y mucho miedo se vivieron ayer en los n¨²meros 24 y 26 de la calle de Julio Palacios (Fuencarral), de 13 plantas, durante un devastador incendio que afect¨® a 48 viviendas, 28 de las cuales quedaron arrasadas. Las llamas se propagaron con gran rapidez por el interior del inmueble, de 182 viviendas, ya que una escalera estaba recubierta de materiales muy inflamables, como maderas, tarima y papel entelado. El Samur-Protecci¨®n Civil atendi¨® a 69 personas (46 bomberos, 21 vecinos y dos miembros del Samur), de los que seis fueron trasladados al hospital.
En la mente de los 104 bomberos que se desplazaron al lugar estaba la tragedia del paseo de La Habana, 20, ocurrida el pasado 11 de abril, en donde murieron cuatro personas. La central de emergencias de los bomberos recibi¨® a las 11.39 una llamada procedente del 112 en la que se alertaba de un fuego en una vivienda del tercer piso, escalera B.
La primera dotaci¨®n de bomberos lleg¨® cinco minutos m¨¢s tarde y se encontr¨® con un panorama preocupante. Varias personas, en su mayor¨ªa mujeres, se hallaban en las terrazas del edificio pidiendo auxilio, ya que las llamas hab¨ªan ascendido con gran rapidez. 'O me rescatan ahora mismo o me tiro de cabeza', grit¨® un hombre de unos 60 a?os que hizo adem¨¢n de precipitarse al vac¨ªo, seg¨²n coment¨® un testigo.
Los bomberos tuvieron bastantes dificultades para acceder al lugar del siniestro, ya que la escala que hab¨ªan desplazado s¨®lo alcanzaba hasta el noveno piso, seg¨²n varios vecinos. Lenguas de fuego sal¨ªan por las ventanas y por las terrazas, junto a una densa columna de humo visible desde varios kil¨®metros de distancia. 'Hemos o¨ªdo una explosi¨®n sobre las diez y media de la ma?ana y, al poco, hemos visto mucho humo. Los bomberos han tardado much¨ªsimo en venir y en hacerse con el incendio', se quej¨® Emma, una vecina del n¨²mero 24 de la calle de Julio Palacios.
El alcalde de Madrid, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, del PP, asegur¨® que la llamada de aviso se recibi¨® a las 11.39. 'Los bomberos se han puesto a tirar agua al incendio desde un cami¨®n, pero el chorro no ten¨ªa la suficiente potencia y no llegaba al incendio. Ha sido tremendo', agreg¨® la vecina.
Otra dificultad a?adida a la extinci¨®n fue que el edificio est¨¢ rodeado de amplios jardines, por lo que tuvieron que cortar la valla que los rodea y tronchar los pivotes para que no reventaran los neum¨¢ticos de los camiones. Los bomberos calzaron con maderas los veh¨ªculos, que oscilaban con gran peligro. Mientras, 15 personas ped¨ªan auxilio a gritos desde sus viviendas. 'Hemos intentado salir por la escalera. Pero, nada m¨¢s abrir la puerta, una gran humareda nos lo ha impedido. Nos ha dado una bocanada que nos ha hecho salir corriendo hacia la terraza', explic¨® una vecina.
Cuando los bomberos lograron acceder al jard¨ªn, el terreno cedi¨® (estaba bastante h¨²medo) y los camiones se quedaron hundidos en el c¨¦sped, algo alejados del inmueble. A partir de ah¨ª, comenzaron a bajar una a una a las 15 personas que estaban encaramadas en las terrazas. Algunas personas se protegieron la cara con mantas mojadas, mientras las llamas se acercaban con gran peligro para sus vidas. Como las escalas no llegaban hasta el piso 12?, los bomberos tuvieron que emplear escalas manuales para rescatar a tres mujeres. Cuando intentaron descender, se encontraron con que el fuego arrasaba las ventanas y las terrazas de los pisos inferiores. Tuvieron que trasladar a las v¨ªctimas hasta un balc¨®n cercano, que estaba sin humo ni llamas. 'Estaba durmiendo y ha entrado corriendo la empleada de la limpieza gritando 'fuego, fuego'. He pegado un bote que casi salgo por el piso de arriba. No me ha dado tiempo a nada y he salido en pijama', recordaba David, un vecino del segundo piso.
Los materiales que revest¨ªan la escalera de servicio sirvieron de combustible para que las llamas se propagaran con gran rapidez, gracias al llamado efecto chimenea. Las escaleras estaban adornadas con papel entelado y los descansillos con madera barnizada de gran grosor. 'La gente ha intentado salir por la escalera y ha dejado las puertas abiertas. El aire que entraba por ¨¦stas y por las ventanas que estallaban han alimentado de ox¨ªgeno el fuego, lo que ha dificultado, y mucho, la extinci¨®n', se?al¨® el director de los bomberos, Pedro Gallardo. ?ste a?adi¨® que la extinci¨®n se efectu¨® tambi¨¦n por el interior del edificio, lo que provoc¨® que 46 bomberos sufrieran golpes de calor e intoxicaciones por el denso humo.
104 bomberos
El jefe de guardia de los bomberos, que se desplaz¨® al siniestro, fue solicitando m¨¢s y m¨¢s dotaciones conforme avanzaba el incendio. Al final, acudieron al lugar 23 camiones (18 de ataque directo al fuego), con 104 bomberos de todos los parques de la capital.
Los efectivos del Samur asistieron, adem¨¢s de a los bomberos, a 21 vecinos que sufr¨ªan crisis de ansiedad, gran nerviosismo y problemas respiratorios. Uno de ellos se hizo una herida en la cabeza durante el desalojo y otros seis, todos con lesiones leves, fueron trasladados a los hospitales de La Paz y Ram¨®n y Cajal. El incendio qued¨® extinguido dos horas m¨¢s tarde, sobre las 14.00. Los bomberos entraron y comprobaron uno a uno todos los pisos afectados por el fuego para comprobar que no hab¨ªa ninguna persona en su interior.
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