El asesino del rifle burla a la polic¨ªa de Washington y mata a su octava v¨ªctima

El francotirador de Washington volvi¨® a actuar ayer. Un hombre se convirti¨® en la d¨¦cima v¨ªctima del asesino -la octava mortal- al recibir un disparo cuando llenaba el dep¨®sito en una gasolinera de Massaponax, en el Estado de Virginia. La polic¨ªa lanz¨® de inmediato una operaci¨®n de b¨²squeda en la que participaron m¨¢s de mil agentes e instal¨® controles muy estrictos en la autopista 95, la m¨¢s concurrida de Estados Unidos, y en todas las carreteras de la zona. Nadie fue detenido. La ciudad de Washington qued¨®, durante unas horas, casi totalmente cerrada.

El nuevo crimen ocurri¨® a las 9.30, hora local. Era un viernes lluvioso y de tr¨¢fico intenso en la carretera estatal 1. Un agente de tr¨¢fico se encontraba en una gasolinera de esa v¨ªa cuando escuch¨® un disparo. Vio que un hombre se desplomaba en la gasolinera del otro lado de la carretera. El polic¨ªa tard¨® unos segundos en cruzar los cuatro carriles que le separaban de la v¨ªctima, a¨²n viva. 'Nos enfrentamos a alguien muy violento y muy audaz, alguien a quien no le importa actuar con polic¨ªas en las inmediaciones', coment¨® m¨¢s tarde Ronald Knight, sheriff del condado de Spotsylvania. El herido fue trasladado a un hospital, pero muri¨® a poco de ingresar.

El crimen no fue oficialmente atribuido al francotirador que aterroriza los suburbios de Washington, a la espera de analizar la bala empleada, pero el margen de error era escaso: otra vez un solo disparo, otra vez en una gasolinera, otra vez en las cercan¨ªas de un acceso a la autopista 95. La gasolinera Exxon donde el asesino del rifle se cobr¨® su d¨¦cima v¨ªctima estaba a unos 400 metros de una salida de la autopista 95, en un ¨¢rea con varios restaurantes y moteles de carretera. A s¨®lo seis kil¨®metros de all¨ª, en una gasolinera similar, una mujer fue herida por el francotirador el pasado viernes.

El disparo de ayer pudo partir desde la estaci¨®n de servicio de enfrente, justo donde se encontraba el polic¨ªa de tr¨¢fico. Bruce Bingham, empleado de la gasolinera, dijo haber visto una furgoneta blanca sospechosa. 'Estaba detenida junto a la calzada, al lado del sem¨¢foro, a punto para salir', explic¨®. Otros testigos vieron una furgoneta blanca que, minutos despu¨¦s del asesinato, circulaba a gran velocidad por las inmediaciones. Seg¨²n algunas personas, s¨®lo el conductor viajaba a bordo; otros creyeron ver a dos personas. En cualquier caso, la fantasmag¨®rica furgoneta blanca vista en casi todos los escenarios de los cr¨ªmenes del francotirador fue definida ayer con m¨¢s precisi¨®n: la polic¨ªa buscaba una Chevrolet Astro con una escalera de mano sobre la baca.

Una extraordinaria operaci¨®n policial se despleg¨® de inmediato para interceptar el veh¨ªculo sospechoso. Se cerr¨® casi totalmente la autopista 95, dejando s¨®lo un carril en cada direcci¨®n para facilitar los controles, y se instalaron patrullas en todas las carreteras. Varios helic¨®pteros sobrevolaron durante horas y a baja altura los suburbios al sur de Washington. Se formaron embotellamientos de decenas de kil¨®metros en la autopista m¨¢s concurrida del pa¨ªs, pero, tras detener y registrar cientos de furgonetas blancas, la polic¨ªa no detuvo a nadie.

El nuevo asesinato agrav¨® a¨²n m¨¢s la angustia colectiva. El gobernador de Virginia, Mark Warner, pidi¨® precauci¨®n a sus conciudadanos, pero les rog¨® que mantuvieran sus actividades normales. Desde que el francotirador comenz¨® a actuar, el pasado d¨ªa 2, el miedo ha reducido la actividad comercial en la zona metropolitana de Washington. Las escuelas han suspendido todas sus actividades al aire libre y los restaurantes han cerrado sus terrazas.

El portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer, dijo que el presidente George W. Bush segu¨ªa 'con el m¨¢ximo inter¨¦s' la situaci¨®n y recib¨ªa cada ma?ana informaci¨®n del FBI sobre las investigaciones. La dispersi¨®n geogr¨¢fica de los cr¨ªmenes, cometidos en dos Estados, Virginia y Maryland, y en el Distrito de Columbia (Washington), ha hecho que el FBI, una instituci¨®n federal, asuma un creciente protagonismo en la direcci¨®n de los m¨¢s de 300 polic¨ªas que se dedican exclusivamente al caso.