El precio de la vivienda aument¨® un 62% en los ¨²ltimos tres a?os, seg¨²n las cooperativas

Orencio Osuna, presidente de la Asociaci¨®n Nacional de Empresarios Gestores de Cooperativas y Comunidades de Viviendas (Agecovi), responsabiliz¨® ayer al Gobierno de la Comunidad y al Ayuntamiento de Madrid de la 'irresistible' escalada del precio de la vivienda en la regi¨®n -un piso de tama?o medio costaba en marzo de este a?o un 62% m¨¢s que en 1999-. Osuna asegur¨® que la 'ausencia de controles p¨²blicos sobre las transacciones de suelo' acaba disparando el precio final de los pisos, y critic¨® la 'exigua' apuesta que hay en Madrid por la vivienda protegida (m¨¢s barata).

El presidente de Agecovi compareci¨® ayer ante la Comisi¨®n de Obras P¨²blicas, Urbanismo y Transportes de la Asamblea para dar cuenta del estudio realizado por su asociaci¨®n sobre la evoluci¨®n del precio de la vivienda en Madrid. Seg¨²n sus datos, quien quiera comprar ahora un piso de 90 metros cuadrados en la capital deber¨¢ desembolsar un 62% m¨¢s que hace tres a?os. El aumento del coste es similar en el conjunto de la regi¨®n, donde las casas cuestan un 61,4% m¨¢s que en 1999.

Osuna se?al¨® el endeudamiento al que se ven abocados los compradores y subray¨® el escaso inter¨¦s de las administraciones madrile?as por la construcci¨®n de viviendas de protecci¨®n p¨²blica (esto es, con un precio m¨¢ximo fijado por ley y destinadas a personas con bajos ingresos). Seg¨²n Agecovi, de los 55.713 pisos iniciados el a?o pasado en Madrid, s¨®lo 1.834 -'un exiguo 3,29%'- eran de promoci¨®n p¨²blica, muy por debajo de la media espa?ola (9,3%).

El origen de esta situaci¨®n de precios desorbitados y endeudamientos enormes hay que buscarlo, en opini¨®n de los gestores de cooperativas, en la 'ausencia de controles p¨²blicos sobre las transacciones de suelo destinado a vivienda protegida, lo que ha permitido [a excepci¨®n de los terrenos gestionados por consorcios p¨²blicos] la venta de suelo muy por encima' de los precios m¨¢ximos fijados por ley.

Especulaci¨®n

Es decir, las administraciones p¨²blicas, seg¨²n Agecovi, han dejado en manos de la iniciativa privada el reparto de las parcelas, lo que ha conducido a que se 'especule' con los terrenos y el precio de ¨¦stos se dispare. Eso produce, adem¨¢s, un efecto domin¨® en los costes de producci¨®n: la empresa promotora ha tenido que pagar tanto por el suelo que ya no le compensa construir pisos protegidos o venderlos al precio que marca la ley. ?Soluci¨®n? Convence al comprador para que pague un extra en dinero negro.

Osuna puso el ejemplo de los nuevos barrios (PAU) de la capital, donde las promotoras est¨¢n cobrando por la vivienda protegida mucho m¨¢s del m¨¢ximo legal. Para romper esta din¨¢mica, Agecovi propone, por una parte, apostar por los consorcios p¨²blicos entre el Gobierno regional y los ayuntamientos, y, por otra, elevar el precio m¨¢ximo de la vivienda protegida para que no est¨¦ 'por debajo de los costes de producci¨®n'.

La f¨®rmula de los consorcios es la que ha adoptado generalmente el Ejecutivo de la Comunidad, presidido por Alberto Ruiz-Gallard¨®n (PP), en diversos municipios de la regi¨®n. Consiste en que las administraciones expropian primero el suelo destinado a viviendas y venden despu¨¦s las parcelas a las distintas promotoras, a un precio pol¨ªtico que no puede modificarse al alza. De este modo se evita la especulaci¨®n con los terrenos y se logra un mayor control p¨²blico para garantizar que el coste final de la vivienda cumpla la ley.

Este modelo requiere del acuerdo entre la Comunidad y el Ayuntamiento de cada municipio. Pero el alcalde de la capital, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, tambi¨¦n del PP, se ha negado siempre a ponerlo en pr¨¢ctica. El gobierno municipal ha preferido optar por una f¨®rmula de corte m¨¢s liberal: la venta de los terrenos se deja en manos privadas, confiando en que la ley de la oferta y la demanda haga bajar los precios. El resultado ha sido el opuesto: los costes del suelo aumentan de forma imparable, y eso repercute sobre el precio final de los pisos.

Desde el Ejecutivo regional, sin embargo, se quita importancia a la influencia que sobre los precios tienen uno y otro modelo. 'Nosotros hemos optado por los consorcios, pero cualquier otra f¨®rmula es v¨¢lida. Lo importante es que la Ley del Suelo de la Comunidad obliga a que, en cualquier desarrollo urban¨ªstico, haya al menos un 50% de vivienda protegida', asegura Jes¨²s Valverde, viceconsejero de Urbanismo, Obras P¨²blicas y Transportes del Gobierno regional.

Valverde cree, adem¨¢s, que la cifra de pisos protegidos aportada por los gestores de cooperativas (s¨®lo 1.834 viviendas iniciadas en 2001) est¨¢ muy alejada de la realidad. 'Han sido miles y miles el a?o pasado', sostiene el viceconsejero. Un portavoz de la consejer¨ªa precis¨® que 's¨®lo en este a?o la Comunidad de Madrid ha sacado el concurso para 9.000 viviendas protegidas, y en los ¨²ltimos a?os se han construido m¨¢s de 30.000'.