El arte, la comida y el hambre centran una gran muestra en Salamanca

El arte, la comida y el hambre, con la imbricaci¨®n de todo ello en el desarrollo de la sociedad y sus tiempos, conforma el contexto de la exposici¨®n Comer o no comer, que desde el s¨¢bado se puede visitar en el Centro de Arte de Salamanca. Son 220 obras de un centenar de artistas internacionales las que se muestran en el proyecto expositivo, desde Duchamp a Spoerri, Haacke, Goldin Kosuth, Joan Mir¨®, Juan Gris, Antonio L¨®pez, Mamedov, Andy Warhol, Man Ray, Nauman, el grupo Accionistas de Viena, Hamilton, Matta-Clark y Brossa, entre otros.

La exposici¨®n, de dimensi¨®n internacional y primera de sus caracter¨ªsticas en todo el mundo, figura en la programaci¨®n del Consorcio Salamanca 2002 y se podr¨¢ visitar hasta el d¨ªa 19 de enero de 2003. El comisario del proyecto, Dar¨ªo Corbeira, ha partido de la idea de que "la historia del arte es una parte no divorciada de la historia general" y as¨ª, la muestra ha tenido en cuenta en todo momento el contexto hist¨®rico, social, pol¨ªtico y cultural de las obras y los artistas.

La exposici¨®n se abre con un bodeg¨®n (1800) de Luis Mel¨¦ndez, "que se dedicaba a pintar bodegones y, sin embargo, pasaba hambre, como refleja una carta al rey en la que reclama dinero porque se hallaba en situaci¨®n de miseria: es una forma de mostrar que el arte est¨¢ con la comida y con la no comida, en una especie de triangulaci¨®n que presenta la sala de apertura".

A su lado, otra obra (1992) del colombiano Rosemberg Sandoval, "que tambi¨¦n pasa hambre, pero la diferencia es que ya no pinta un bodeg¨®n, sino que lo reconstruye con una jarra y unos cristales recogidos en un atentado terrorista en Cali". Se a?ade una pieza (1917) que aporta "la presencia del artista conceptual y te¨®ricamente m¨¢s influyente del siglo XX, Marcel Duchamp, el gran desmaterializador de la historia del arte de ese siglo, junto a dos instrumentos del Museo de Estocolmo, que representan la dualidad de comer y no comer en el mundo del arte". As¨ª presenta la entrada a la muestra Dar¨ªo Corbeira, artista visual y profesor en la Facultad de Bellas Artes de Salamanca.

El recorrido contin¨²a con la obra del mexicano C¨¦sar Mart¨ªnez, que cre¨® en el mismo punto dos ind¨ªgenas de chocolate y frutas, uno de los cuales ya se ha merendado el p¨²blico, y el otro seguir¨¢ expuesto. El siguiente lo ofrece un cuadro (1949) tardo-expresionista, espectacular por dimensiones y contenido, de Renato Guttuso, con la ocupaci¨®n de las tierras sin cultivar, para expresar la lucha por el logro de los alimentos. La marcha de los campesinos da paso a un equivalente en el proletariado de la f¨¢brica, a trav¨¦s del cuadro (1931) del alem¨¢n Hans Baluschek, que abre una sala en la que, a efectos de montaje, se ilustra por d¨®nde han ido el movimiento moderno y las vanguardias, y por otro lado los artistas que denuncian el hambre, ya que "hay un inter¨¦s decidido en fijar puntos hist¨®ricos". Artistas alemanes de entreguerras (Kollwitz, Grosz, fotomontajes de Heartfield) que denuncian la opresi¨®n y el hambre alternan la l¨ªnea que pone de relieve lo que fue el comienzo del arte moderno: Man Ray, Dal¨ª, Juan Gris, Mir¨®, representaci¨®n del arte futurista, con Depero, Dino Severini, o piezas de C¨¢ndida H?ffer, Katharina Fritsch, Bruce Nauman, "con una carga y una significaci¨®n hist¨®rica brutal".

Daniel Spoerri, el m¨¢s importante artista de relaci¨®n del arte con la comida, tiene su aportaci¨®n en contexto con la biblioteca del centro y tambi¨¦n con el montaje de una parte de su restaurante en D¨¹sseldorf. Por primera vez se monta con hormig¨®n una propuesta clave, el muro de Berl¨ªn y la "brigada Ludwig" del alem¨¢n Hans Haacke, artista exigente en sus montajes de contexto de an¨¢lisis pol¨ªtico y de denuncia de los entresijos de la historia del arte y las instituciones.