Llaneros solitarios en la m¨²sica vasca

Habr¨¢ quien piense que el panorama musical vasco es muy mon¨®tono, condicionado en parte por las servidumbres que impone el mercado y por unas discogr¨¢ficas aut¨®ctonas que muchas veces limitan su oferta a la m¨²sica en euskera, o centran su cat¨¢logo en la m¨²sica folk, en la m¨¢s combativa o en los cantautores. Pero no se debe pasar por alto que, aunque Euskadi no cuente con freaks como el punki estadounidense G.G. Allin, quien se automutilaba, defecaba y se atrev¨ªa con la coprofagia en escena, s¨ª hay quien rema contra corriente.

Para un conjunto musical lo f¨¢cil ser¨ªa intentar perpetuar el llamado metal euskald¨²n, opositar a un hipot¨¦tico nuevo boom de la trikitixa o intentar tocar la fibra sensible del p¨²blico con propuestas similares a las de Alex Ubago o La Oreja de Van Gogh, los aut¨¦nticos superventas vascos. Incluso engrosar las filas del Donosti sound, rebuscar en el cancionero tradicional o buscar el visto bueno de los abundantes aficionados al reggae que, por lo visto, pueblan Euskadi. Sin embargo, artistas como El Corsal Desastre evitan los senderos m¨¢s transitados, las concesiones a los sonidos m¨¢s o menos comerciales y la inmediata afinidad con determinadas tribus urbanas. Aunque con ello se cierren muchas puertas y renuncien de partida a vender muchos soportes.

"No es que no me interese vender discos, pero necesito hacer m¨²sica y canciones honestas. Antes que para nadie, las hago para m¨ª. A estas alturas de mi vida, no estoy para hacer concesiones baratas. No s¨¦ si quiero ser un profesional de la m¨²sica: yo la necesito para vivir y tambi¨¦n necesito compartirla, tiene una dimensi¨®n social y comunicativa que para m¨ª es muy importante, pero yo no decido en asuntos de mercados. Aunque supongo que con el tiempo conseguir¨¦ que mi relaci¨®n con el p¨²blico sea m¨¢s di¨¢fana". As¨ª explica Carlos Desastre, ex 713avo Amor, por qu¨¦ edita m¨²sica tan poco convencional y comercial.

El andaluz afincado en Azkoitia cataloga como "ruido l¨ªrico" la mezcla de poes¨ªa, acoples y pasajes hipn¨®ticos que contiene el libro-disco Radio ensue?o. Algo que "no lo est¨¢ haciendo nadie m¨¢s en Espa?a". Y tambi¨¦n forma parte de un proyecto que funde teatro y m¨²sica bajo el nombre de Mi Padre Cigarro

M¨¢s elevada es la fuente de inspiraci¨®n del grupo Ahava, que dif¨ªcilmente se har¨¢ con un disco de diamante mientras invite a la relajaci¨®n entonando textos de santa Teresa de Jes¨²s y san Juan de la Cruz. Ya lo ha hecho en un par de discos m¨ªsticos (el ¨²ltimo, Agua viva, dedicado al poeta suf¨ª Jalaluddmin Rumi), capitaneado por Ahimsa Lara Rivera, una mujer definida en el cuadernillo interior como "un puro instrumento de lo divino, un junco en el que el Dios del Amor y de la Verdad ta?e sus hermosas melod¨ªas".

Sus canciones parecen ser veh¨ªculos para alcanzar la armon¨ªa con esa divinidad, pero la mayor¨ªa de sus colegas se salen de lo establecido, sobre todo, por fidelidad a sus gustos personales, por falta de pretensiones o por asumir su dedicaci¨®n a la m¨²sica como un pasatiempo. Es el caso de, por ejemplo, Bosco El Tosco, cantautor humor¨ªstico que s¨®lo en sue?os se plantea ganarse la vida al frente de Su Puta Banda, que reviste con eclecticismo musical el sonido de su turuta y sus humoradas sobre "el precio del alcohol, el veneno del tabaco y la televisi¨®n". "De momento es un hobby. Lo de dedicarnos profesionalmente al grupo es una posibilidad, pero la veo, hoy por hoy, bastante lejana", reconoce con modestia y sensatez Bosco, a la espera de ir conociendo las ventas de su primer elep¨¦, ?D¨®nde estabas t¨² el 11-S?, que acaba de ser editado.