Visados bajo sospecha
La lucha contra las mafias que trafican con la inmigraci¨®n no puede dejar a un lado, si quiere ser eficaz, las posibles connivencias que a veces encuentran estas organizaciones criminales en el interior de los aparatos del Estado. La venta de visados o de permisos de trabajo y de residencia fraudulentos es una de ellas. No es extra?o, por ello, que en los ¨²ltimos a?os, con una presi¨®n migratoria creciente, hayan salido a la luz casos de funcionarios que han debido ser investigados por su supuesta implicaci¨®n en este tipo de corrupci¨®n.
El informe de dos inspectores del Ministerio de Asuntos Exteriores se?alando indicios de que, al menos desde 1999, el anterior c¨®nsul espa?ol en Tetu¨¢n (Marruecos) pudo facilitar cientos de visados irregulares a falsos turistas marroqu¨ªes deseosos de emigrar a Espa?a, dispara las alarmas sobre la extensi¨®n de este tipo de pr¨¢cticas corruptas y la relativa impunidad con que pueden llevarse a cabo. De confirmarse el hecho, pendiente de una posible querella por parte de la Fiscal¨ªa General del Estado, se tratar¨ªa quiz¨¢s de uno de los m¨¢s graves de su naturaleza conocidos hasta ahora, no s¨®lo por el rango diplom¨¢tico del funcionario implicado, sino por dar p¨¢bulo a la denuncia reiterada por Marruecos de que la corrupci¨®n funcionarial relacionada con la inmigraci¨®n tambi¨¦n es cosa de Espa?a.
Los hechos hab¨ªan sido objeto de denuncias informales y a veces an¨®nimas desde 1999, pero la investigaci¨®n realizada por el Ministerio de Asuntos Exteriores no se inici¨® hasta noviembre pasado a instancias del nuevo c¨®nsul. Sorprende de la actuaci¨®n de Exteriores que en esa investigaci¨®n administrativa no se haya escuchado la versi¨®n del anterior c¨®nsul, sobre el que se concentran las sospechas, que este ¨²ltimo cesara voluntariamente y que no fuera objeto de sanci¨®n alguna ni suspendido cautelarmente en sus funciones. Exteriores se ha limitado a trasladar el informe de sus inspectores al fiscal del Estado, eludiendo cualquier toma de decisi¨®n en su ¨¢mbito. Todo ello en un momento en que es obligado extremar la vigilancia sobre el funcionamiento de los servicios consulares, convertidos cada vez m¨¢s en pieza esencial del engranaje de la inmigraci¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Permisos trabajo
- Permisos residencia
- Polizones
- VII Legislatura Espa?a
- Opini¨®n
- MAE
- Embajada espa?ola
- Marruecos
- Inmigraci¨®n irregular
- Inmigrantes
- Embajadas
- Relaciones internacionales
- Magreb
- Pol¨ªtica migratoria
- Legislaturas pol¨ªticas
- Inmigraci¨®n
- PP
- Ministerios
- Partidos pol¨ªticos
- Migraci¨®n
- Pol¨ªtica exterior
- ?frica
- Corrupci¨®n
- Gobierno
- Demograf¨ªa