Bush negocia con sus aliados el plazo de la guerra

La cumbre de las Azores puede ser un ¨²ltimo esfuerzo diplom¨¢tico o la primera reuni¨®n de un "gabinete internacional de guerra". Quiz¨¢ sea ambas cosas. George W. Bush, Tony Blair y Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar acuden a las islas atl¨¢nticas con "todas las opciones abiertas", pero con el calendario pr¨¢cticamente agotado. Cualquier decisi¨®n implicar¨¢ inmediatez: o forzar¨¢n una votaci¨®n urgente y simb¨®lica, derrotada de antemano, en el Consejo de Seguridad, o retirar¨¢n el proyecto de resoluci¨®n y asumir¨¢n que la invasi¨®n de Irak debe realizarse sin el respaldo de la ONU. En la Casa Blanca ya no se esperan milagros. Bush tiene sobre su mesa la orden de ataque, el plan de batalla y el programa para la ocupaci¨®n, que incluye, entre otros puntos, la abolici¨®n del dinar iraqu¨ª como moneda oficial y su sustituci¨®n por el d¨®lar estadounidense.

El presidente de EE UU revel¨® ayer su estado de ¨¢nimo antes de viajar a Azores al recordar, durante su alocuci¨®n radiof¨®nica de los s¨¢bados, que la ONU hab¨ªa fracasado en crisis como las de Bosnia, Kosovo y Ruanda. "La incapacidad del Consejo de Seguridad condujo a la tragedia" en esos casos, dijo, para apoyar en esos antecedentes la probable decisi¨®n de ir a la guerra sin contar con una resoluci¨®n de Naciones Unidas.

Bush aprovech¨® que se cumpl¨ªan 15 a?os del ataque qu¨ªmico contra la localidad kurda de Halabja, atribuido a Sadam Husein (aunque EE UU, por entonces aliado de Irak, culpara en ese momento a los iran¨ªes), para describir al presidente iraqu¨ª como un peligro para la humanidad. "El ataque qu¨ªmico sobre Halabja, s¨®lo uno entre los 40 lanzados contra la poblaci¨®n iraqu¨ª, permiti¨® entrever los cr¨ªmenes que Sadam Husein est¨¢ dispuesto a cometer y la clase de amenaza que representa ahora para el planeta entero", declar¨®. "Es uno de los dictadores m¨¢s crueles de todos los tiempos, y est¨¢ arm¨¢ndose con las armas m¨¢s terribles del mundo".

Dircurso preb¨¦lico

George W. Bush asegur¨® que Sadam dispon¨ªa de "enormes cantidades de agentes qu¨ªmicos y biol¨®gicos, como el gas mostaza, la toxina de la botulimia y el sar¨ªn, capaces de matar a millones de personas", e insisti¨® en que su r¨¦gimen "financia y patrocina el terrorismo". Para Bush, el momento de las presiones diplom¨¢ticas hab¨ªa pasado ya: "Hay muy pocas razones para confiar en que Sadam Husein se desarme". Fue un discurso claramente preb¨¦lico, en el que advirti¨® que las pr¨®ximas jornadas ser¨ªan "cruciales".

Fuentes de la Casa Blanca indicaron que Bush pensaba pedir a sus dos aliados m¨¢s cercanos en la actual crisis que desestimaran la v¨ªa de la ONU y retiraran el proyecto de resoluci¨®n que, en su redactado inicial, inclu¨ªa un ultim¨¢tum que expiraba ma?ana. La cumbre hab¨ªa sido organizada a toda prisa como una f¨®rmula de auxilio a Aznar y, sobre todo, a Blair, y Bush deseaba no cerrarles de antemano ninguna puerta. El presidente de EE UU consideraba, sin embargo, que la mejor forma de rescatar a sus aliados de sus respectivas crisis pol¨ªticas consist¨ªa en hacer la guerra inmediatamente, encontrar las armas prohibidas de Sadam Husein y exhibirlas ante el mundo. Dentro de los preparativos b¨¦licos, Washington complet¨® una lista de altas autoridades iraqu¨ªes, encabezada por Sadam Husein y sus dos hijos y compuesta en total por unas 2.000 personas, que ser¨ªan juzgadas por cr¨ªmenes de guerra o contra la humanidad.

La asesora de seguridad nacional, Condoleezza Rice, anunci¨® el viernes que la ocupaci¨®n posterior a la guerra estar¨ªa dirigida por generales estadounidenses, con la cooperaci¨®n de una "autoridad interina iraqu¨ª", que se ocupar¨ªa inicialmente de "asuntos civiles". El Ej¨¦rcito, la polic¨ªa, la econom¨ªa y los campos petrol¨ªferos quedar¨ªan en manos de EE UU. El dinar iraqu¨ª ser¨ªa suprimido y sustituido por el d¨®lar, entre otras razones porque se consideraba intolerable que la efigie de Sadam siguiera circulando en el papel moneda.