Bush negociar¨¢ con Francia y Rusia el levantamiento de las sanciones a Irak

Los planes del presidente George W. Bush para relegar a la ONU a un papel muy secundario en la reconstrucci¨®n de Irak han topado con un obst¨¢culo: el Consejo de Seguridad controla el crudo iraqu¨ª a trav¨¦s del programa Petr¨®leo por Alimentos. Y los Gobiernos de Francia y Rusia se niegan a cancelar ese programa y levantar las sanciones que a¨²n pesan sobre Irak si la ONU no dispone de protagonismo en la posguerra. Bush, que el mi¨¦rcoles pidi¨® el fin de las sanciones, empieza a plantearse la necesidad de negociar un proceso gradual de normalizaci¨®n con el Consejo de Seguridad.

El presidente de Estados Unidos y su secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, consideraban que la ONU se hab¨ªa condenado a la "irrelevancia" por su negativa a bendecir la invasi¨®n de Irak, y que Francia y Rusia deb¨ªan quedar excluidas del negocio de la reconstrucci¨®n del pa¨ªs, como castigo a su rotunda oposici¨®n a la pol¨ªtica de Washington. El mi¨¦rcoles, Bush reclam¨® el fin de las sanciones sobre Irak y la aprobaci¨®n de una resoluci¨®n que cediera a las nuevas autoridades estadounidenses de Bagdad el control sobre las rentas del petr¨®leo. "Con la ca¨ªda de Sadam Husein no hay ya necesidad de sanciones", explic¨® Richard Boucher, portavoz del Departamento de Estado.

La respuesta de Mosc¨², sin embargo, fue negativa. El ministro de Exteriores ruso, ?gor Ivanov, indic¨® que el cambio de r¨¦gimen no era suficiente: hab¨ªa que certificar tambi¨¦n el desarme del pa¨ªs y la desaparici¨®n de las armas de destrucci¨®n masiva. Esa argucia diplom¨¢tica dispon¨ªa de una base real: en los pa¨ªses ¨¢rabes se acoger¨ªa con incredulidad cualquier hallazgo de armas prohibidas anunciado por Washington y no certificado por la ONU.

El presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, se uni¨® a los rusos e indic¨® que conven¨ªa levantar las sanciones, pero correspond¨ªa, "naturalmente", al Consejo de Seguridad decidir c¨®mo y cu¨¢ndo. En su cumbre de Atenas, el conjunto de la Uni¨®n Europea exigi¨® que la ONU desempe?ara "un papel central" en la posguerra iraqu¨ª.

Sin la autorizaci¨®n de la ONU, el Gobierno de Washington no podr¨ªa disponer de las rentas del petr¨®leo para costear el proceso de reconstrucci¨®n f¨ªsica, que ha empezado ya a adjudicar a consorcios estadounidenses como Bechtel.

Petr¨®leo por Alimentos

El programa Petr¨®leo por Alimentos fue establecido en 1995 con el objetivo de suavizar el desastre humanitario causado por las sanciones contra Irak. La ONU se hizo cargo del negocio petrolero, percibiendo los beneficios y dedic¨¢ndolos a comprar, en nombre de Irak, productos "autorizados" como alimentos, medicinas y art¨ªculos industriales no susceptibles de utilizaci¨®n en programas armamentistas.El programa era supervisado por el secretario general de la ONU, Kofi Annan, y por el presidente iraqu¨ª, Sadam Husein. Al empezar la guerra, por razones obvias, la gesti¨®n fue cedida totalmente a Annan. El 95% de los iraqu¨ªes reciben alimentos por ese sistema, que cada seis meses necesita ser autorizado de nuevo por el Consejo de Seguridad.

La actual fase del Petr¨®leo por Alimentos est¨¢ vigente hasta junio. Tres miembros del Consejo de Seguridad, dos de ellos permanentes y con derecho de veto, Rusia y Francia, y un tercero rotatorio, Siria, son los principales exportadores a Irak dentro del programa, y no se muestran dispuestos a renunciar a ¨¦l si Estados Unidos mantiene su amenaza de marginarlos de la reconstrucci¨®n. Ante esta perspectiva, Bush necesita negociar.

Fuentes de su Administraci¨®n dijeron a The New York Times que el Gobierno de Washington estar¨ªa dispuesto a aceptar un proceso gradual, por el que la ONU mantendr¨ªa temporalmente el dominio sobre la exportaci¨®n de petr¨®leo y, por tanto, un claro protagonismo, y se ceder¨ªa al gobierno interino del general Jay Garner una autoridad limitada en materia de importaciones, agricultura y administraci¨®n p¨²blica. En lugar de una sola resoluci¨®n, Bush propondr¨ªa tres o cuatro a lo largo de varios meses.