Chucho Vald¨¦s, Serranito y Carlos Varela, en Cubadisco

El pianista Chucho Vald¨¦s ha puesto de nuevo el toque de oro en la feria internacional Cubadisco, que este a?o ha celebrado su s¨¦ptima edici¨®n en La Habana al son de ritmos variados, incluyendo el rock, la rumba y el flamenco. Acompa?ado por su cuarteto de jazz y medio centenar de m¨²sicos de la orquesta sinf¨®nica, dirigidos por el maestro Manuel Duchesne Cuz¨¢n, Chucho ofreci¨® un concierto m¨¢gico en el que se reencontr¨® con "temas muy queridos" de Ernesto Lecuona, Sindo Garay y Antonio Mar¨ªa Romeu, reinterpret¨® el cl¨¢sico de la m¨²sica popular cubana El manisero y realiz¨® soberbias versiones de The man I Love, de Gershwin, as¨ª como de Claudia y Misa negra, de su autor¨ªa.

El teatro Amadeo Rold¨¢n se llen¨® hasta los topes de un p¨²blico variopinto que acudi¨® a deleitarse con un programa anunciado como Sonido sinf¨®nico del jazz latino. El t¨ªtulo se qued¨® corto en relaci¨®n con lo que all¨ª sucedi¨® el viernes. La improvisaci¨®n lleg¨® temprano con un solo de piano de Vald¨¦s, al que sigui¨® la descarga Solar, rumba pegajosa y jazzeada que cont¨® con la participaci¨®n de los integrantes de su cuarteto, L¨¢zaro Rivero (bajo), Rams¨¦s Rodr¨ªguez (bater¨ªa) y Yaroldi Abreu (congas), quienes ya no salieron del escenario.

'Mina negra'

La trilog¨ªa Chucho Vald¨¦s-Duchesne Cuz¨¢n-Roberto S¨¢nchez Ferrer (autor de la mayor¨ªa de los arreglos) funcion¨® con la precisi¨®n de un reloj desde que subi¨® a escena la orquesta Cubadisco. El Amadeo Rold¨¢n se vino abajo cuando, en la segunda parte del programa, Duchesne dirigi¨® a Chucho y a toda la banda en La comparsa, Siempre en mi coraz¨®n y Ah¨ª viene el chino, de Ernesto Lecuona. El broche del concierto vino con la entrada de los tambores bat¨¢ y los cantos yorubas, que se sumaron a la sinf¨®nica para hacer una monumental Misa negra.

El s¨¢bado fue otro gran d¨ªa de Cubadisco. Primero, el guitarrista flamenco V¨ªctor Monge, Serranito, y la cuban¨ªsima Camerata Romeu presentaron el disco Sue?os de ida y vuelta, que transcurre como la seda entre sones, guajiras y buler¨ªas. Por la noche, el roquero Carlos Varela llen¨® el teatro Carlos Marx de La Habana en la presentaci¨®n de Siete, su ¨²ltimo disco -como Sue?os de ida y vuelta, producido por Factor¨ªa Autor, de la SGAE-. Varela, que acaba de cumplir 20 a?os de vida art¨ªstica, demostr¨® ser uno de los cantautores cubanos que m¨¢s pegan en la isla; por sus canciones, que supuran inconformidad y denuncia, y tambi¨¦n por la poes¨ªa con que retrata a una ciudad -La Habana- y aborda el drama de una generaci¨®n -la suya y la de los cubanos m¨¢s j¨®venes-.

Las 5.000 personas que asistieron al concierto disfrutaron de lo lindo con los nuevos temas de Varela, pero tambi¨¦n con los m¨¢s antiguos y emblem¨¢ticos como Guillermo Tell o La pol¨ªtica no cabe en la azucarera. M¨¢s de 2.000 personas no puedieron entrar al teatro y la reventa de entradas clonadas (fotocopiadas) lleg¨® a tres d¨®lares, la tercera parte del salario mensual de un maestro. Lo de Varela en el Carlos Marx s¨®lo tiene un calificativo: un ¨¦xito absoluto.

Los premios Cubadisco tuvieron punter¨ªa. En la categor¨ªa de canci¨®n, el pianista y compositor Jos¨¦ Mar¨ªa Vitier se llev¨® el galard¨®n con su bell¨ªsimo CD Canciones del buen amor. Yusa, con un disco de igual nombre, triunf¨® en fusi¨®n. En banda sonora fue X Alfonso con Delirium tremens, y en m¨²sica bailable, Manolito Simonet con Se rompieron los term¨®metros. El CD de Ars Longa Esteban Salas gan¨® en m¨²sica coral.