El Gobierno reformar¨¢ la Ley de Extranjer¨ªa este a?o con o sin consenso

La reforma de la Ley de Extranjer¨ªa, presentada el mi¨¦rcoles por el Gobierno del PP y que recorta los derechos de los inmigrantes recogidos en la norma vigente, se realizar¨¢ este a?o para que entre en vigor en enero de 2001, aunque no se consiga el consenso de todas las fuerzas parlamentarias. El delegado del Gobierno para la Inmigraci¨®n, Enrique Fern¨¢ndez Miranda, admiti¨® ayer que s¨®lo existe disposici¨®n para el acuerdo con los nacionalistas catalanes y canarios, pero que el proyecto es rechazado por el resto de los grupos.

Fern¨¢ndez Miranda admiti¨® ayer, tras la primera ronda de contactos que ha mantenido con las fuerzas pol¨ªticas para presentarles el borrador de la reforma, que el Gobierno est¨¢ dispuesto a recoger aportaciones de otros grupos, pero reconoci¨® las profundas diferencias existentes. Insisti¨® en que la nueva ley no va a recortar derechos fundamentales de los extranjeros, aunque aclar¨® que "algunos derechos sociales" s¨ª se ver¨¢n regulados. El objetivo del Gobierno es que la reforma se discuta en el Congreso a partir del pr¨®ximo mes de septiembre para que entre en vigor en enero del pr¨®ximo a?o. El proyecto ha provocado dur¨ªsimas cr¨ªticas de los partidos de izquierda, sindicatos y organizaciones de inmigrantes. El presidente de la comisi¨®n pol¨ªtica del PSOE, Manuel Chaves, lo calific¨® de "impropio de un pa¨ªs democr¨¢tico", mientras que IU considera la reforma cercana al "esclavismo". Tambi¨¦n los sindicatos rechazaron de plano el proyecto de reforma. UGT considera que abre la puerta a la explotaci¨®n y el tr¨¢fico de mano de obra. Por su parte, CC OO puso de relieve que tiene "car¨¢cter represivo". Pero las cr¨ªticas no vinieron s¨®lo de la izquierda. El ex diputado del PP Diego Jordano, que actu¨® como ponente de su partido durante la tramitaci¨®n en el Congreso de la actual ley, dijo que algunas de las medidas del nuevo texto son inconstitucionales.