Moda en el tri¨¢ngulo de oro
Lujo, calma y voluptuosidad en las tiendas de marca de Par¨ªs
Aunque una tendencia de la moda sea diversificarse, abrir peque?os locales o grandes superficies con cafeter¨ªa y restaurante incluido, como Emporio Armani en Saint-Germain, prototipo de tienda multiservicios, las tradicionales casas de alta costura conservan su clasicismo. No hay m¨¢s que echar un vistazo a sus escaparates. Entre la avenida George V, los Campos El¨ªseos y la avenida Montaigne, los palacios de piedra tallada, peque?o jard¨ªn delantero y verja imperial con lanzas, marcas e insignias de un estilo mitol¨®gico, reclaman la atenci¨®n. Todos ellos pueden ser vi
sitados a pie, en un solo d¨ªa.
En ciertos locales, como Christian Dior, s¨®lo con atravesar el umbral el cuerpo queda impregnado por perfumes exultantes, agrios o azucarados, aromas que espolean la imaginaci¨®n cuya fertilidad acompa?ar¨¢ al cliente durante toda su visita. La nueva tienda de Jean-Paul Gautier, ina
ugurada hace unos meses, con decorado interior dise?ado por Starck, es exigua pero sorprende. Sus estanter¨ªas con cristal de Venecia, pantallas de v¨ªdeo de alta definici¨®n incrustadas en las paredes, y un busto femenino presidiendo el vest¨ªbulo como estatua romana, ilustran el canon de la ¨¦poca, mezcla equilibrada pero anacr¨®nica entre fashion et people. Delante de la embajada espa?ola est¨¢ Givenchy, y 50 metros m¨¢s arriba, Crist¨®bal Balenciaga. Un poco m¨¢s lejos, frente a la mansi¨®n diplom¨¢tica china, Kenzo recrea un interior semejante al de las pagodas, y muestra ropa con una partici¨®n del espacio sobria y el buen gusto de las cosas claramente dispuestas.
Yves Saint Laurent, parte del grupo Gucci, contin¨²a representando el patr¨®n cl¨¢sico. Como Chanel, donde puede admirarse, como si fuera un museo, la variedad de modelos del tailleur, conjunto que dio merecida reputaci¨®n a la firma. En una esquina del coqueto sal¨®n, uno negro, con motivos blancos, y otro blanco, con filigranas negras, provocan la admiraci¨®n de esa elegancia insuperable del misterioso encanto femenino. Son casi las mismas blusas y chaquetillas que vistieron la leyenda de Greta Garbo. Muchas tiendas presentan accesorios y curiosidades -correas o pa?uelos, hebillas, piedras brillantes- como especias tra¨ªdas de regiones ignotas dignas de los fil¨®sofos pataf¨ªsicos.
Un rito en el probador
El acceso directo de cualquier ciudadano a lugares reservados, en principio, a gente adinerada, es una aventura. La acogida suele ser fr¨ªa, pero muy educada. En general, el protocolo para probarse prendas muy costosas sigue las normas del ritual imperial o colonial. Cuenta mucho la cara que el cliente pone al entrar, y su poder de adquisici¨®n. Reciben mejor si intuyen que lleva abultada su cartera. En Calvin Klein, la primera firma americana en un dominio italo-franc¨¦s casi exclusivo, una escultura del artista Fabrizio Plessi (Anillo del fuego) gira al lado del mostrador. La boutique de la antigua modelo fetiche de Karl Lagerfeld, In¨¦s de la Fressange, ¨²ltima esfinge encarnando a la Marianne republicana (la anterior fue Catherine Deneuve, y la posterior, Laetitia Casta), presenta un mont¨®n de prendas para ni?os con luces empolvadas y colores exuberantes. Justo enfrente se halla el hotel de cinco estrellas Plaza Ath¨¦n¨¦e, que permite hacer una pausa. En su sal¨®n cafeter¨ªa de la planta baja se puede degustar un t¨¦ ingl¨¦s con rosquillas y retomar fuerzas antes de proseguir las visitas. Al final de la avenida est¨¢ Prada, la marca italiana cuya sobria mezcla entre la mejor tradici¨®n artesanal italiana y los tejidos de ¨²ltima generaci¨®n la han convertido en un referente.
Louis Vuitton abri¨® hace cuatro a?os las puertas de un imperio comercial. Haciendo esquina con los Campos El¨ªseos, sobre una superficie de mil metros cuadrados y tres pisos, el ajetreo es incesante. Su director, el se?or Duchene, responsable de 200 empleados, se desvive para atender correctamente a los incesantes compradores de bolsos con sus inconfundibles estampados. La nueva gama, acharolada, ha sido concebida y realizada por el americano Marc Jacobs, y la ¨²ltima decoraci¨®n es de Robert Wilson. En varios apartados hay mesillas y sillones confortables para reposar, calcular los altibajos de la Bolsa o leer la prensa internacional. Ciertos clientes tienen derecho a caf¨¦ con chocolatinas o una flauta de champa?a.
"Lo importante es ofrecer, como dec¨ªa Baudelaire, lujo, calma, y voluptuosidad", explica el manager. Vuitton es visitado constantemente por turistas japoneses. No paran de entrar y salir grupos. Esta curiosidad no pasa inadvertida. El director explica el motivo. Al principi¨®, L. Vuitton (1854), el ancestro de los actuales herederos de la marca, era maletero. Harto de ser copiado por sus concurrentes, Vuitton se fue a Jap¨®n y volvi¨® a Europa con otra idea original. Dej¨® entonces la piel (considerada una vulgaridad en la tradici¨®n japonesa), por la tela, percibida ¨¦sta como un material noble, y reprodujo monogramas extra?os en bolsos y maletas. Eran algunos emblemas, blasones de grandes familias feudales con dinast¨ªas milenarias. Ese detalle hace que los japoneses ("mezcla de cultura arcaica y supertecnolog¨ªa", dice Duchene) est¨¦n particularmente interesados y casi veneren los productos Vuitton.
Al ir a comprar, o a curiosear, las prendas de estas tiendas de lujo vestimentario, el ciudadano tiene la impresi¨®n de que un fr¨¢gil portal separa la calle ordinaria del acceso a un sue?o fastuoso, pero, como aconsej¨® Oscar Wilde, "conviene recordar que nada de lo que vale la pena saberse puede ser ense?ado", e inmediatamente, presumir ante el vendedor de tener ideas claras; sonre¨ªr, y dejarse llevar por todo tipo de explicaciones sobre el refinado gusto de c¨®mo ir o no vestido con elegancia.
GUIA PR?CTICA
Datos b¨¢sicos
Poblaci¨®n: el centro de Par¨ªs tiene 2,1 millones de habitantes; incluyendo la periferia, 10,9 millones.
Prefijo telef¨®nico: 0033.
C¨®mo ir
- Air France (901 11 22 66), hasta el 30 de junio, desde Madrid y Barcelona, 138 euros m¨¢s tasas (compra con 10 d¨ªas de antelaci¨®n).
- Iberia (902 400 500), hasta el 30 de junio, desde Madrid, 168 euros con tasas, y desde Barcelona, 229 con tasas. Ofertas de ¨²ltima hora, en: www.iberia.com, 125 euros m¨¢s tasas desde Madrid, y 148 m¨¢s tasas desde Barcelona.
- Air Europa (902 401 501), hasta el 30 de junio, desde Madrid, 69 euros por trayecto, m¨¢s tasas.
- Aerol¨ªneas Argentinas (913 35 66 00), desde Madrid, a partir de 193 euros con tasas (compra con cinco d¨ªas de antelaci¨®n).
Informaci¨®n
- Oficina de turismo de Par¨ªs (0033 892 683 112 y www.paris-touristoffice.com).
- Maison de la France en Espa?a (906 24 26 28 y www.franceguide.com).
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